NuNew ha sido mi mejor amigo desde que teníamos dos años. Hacemos todo juntos, por eso me sentí... raro cuando a los dieciséis años descubrí que es gay. ¿Cómo puede NuNew ser algo que no soy?
Pero ahora se va a casar... con un chico con el que lleva...
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Me estaba volviendo loco, y no me gustaba.
No hay ninguna razón por la que debería estar tan enojado, triste, frustrado, molesto o cualquier otra cosa que no sea feliz por el hecho de que NuNew se iba a casar. Estaba sintiendo un montón de mierda en lo que a él concernía, y una de esas cosas era la que menos sentido tenía: una parte de mí se sentía... traicionada.
No tenía sentido. NuNew era mi mejor amigo. Él era gay; yo era heterosexual. Quería establecerse; yo no. Me abrí paso por la vida, y aunque él había tenido una buena cantidad de conexiones, permanecer soltero nunca fue su objetivo.
Además, de nuevo, él era un hombre y yo era heterosexual, así que sí, no éramos así. A veces era difícil separarnos a los dos. NuNew era la única persona en la que había confiado al cien por cien. El único que sentía que necesitaba en mi vida. El único que creía me amaba por mí, sin importar qué. Papá era exigente y adicto al trabajo, mamá siempre estaba preocupada por sí misma, pero NuNew siempre estaba ahí. Incluso cuando estaba necesitado o era egoísta, él nunca se apartó de mi lado.
Y ahora se iba a casar con Imbécil, y no sabía cómo lidiar con eso.
—Voy a echar un polvo. NuNew se rio. —¿Así de fácil?
Jugaba con el pendiente de aro en su oreja izquierda.
—Estamos en Las Vegas, Nu.
—Buen punto.
—Y yo soy yo.
—Lo que lo hace más fácil. Puedo ver eso. Eres bastante sexy — bromeó NuNew, y mi estómago dio un vuelco.
—Muy sexy. —Me acerqué y le di un fuerte beso en la frente—. Probablemente quieras pasar un tiempo con tu futuro esposo antes de casarte mañana, de todos modos.
Casado. NuNew se iba a casar. Cristo, esto me estaba haciendo experimentar todo tipo de cosas extrañas y confusas.
—¿Zee ? —dijo NuNew mientras abría la puerta del balcón para volver a su habitación.
—¿Sí? —No me di la vuelta para mirarlo.
—Te quiero, hombre.
Entonces no te cases. No cambies las cosas. Pero eso no era justo, ¿verdad? Porque no podía darle a NuNew lo que se merecía. Imbécil aparentemente podría.
—Yo también te quiero.
Salí de la habitación, pero no intenté echar un polvo. En cambio, simplemente caminé por Las Vegas. Hacía un calor infernal y había mucha gente, y odiaba estar allí, pero tampoco podía soportar volver al hotel.
Una parte de mí sentía que estaba actuando de manera infantil, enloqueciendo porque alguien me iba a quitar a mi mejor amigo, como si NuNew me perteneciera, pero no era así. Él no estaría haciendo pucheros y perdiendo la cabeza si fuera yo quien se casara.
—Estoy enamorado de ti, ¿sabes?
—Cállate. —Me reí y negué con la cabeza—. Estás borracho.
—El hecho de que esté borracho no significa que no sepa lo que siempre he sentido. —NuNew se encogió de hombros—. De todos modos, solo pensé que deberías saberlo. Voy a tomar una ducha y masturbarme antes de acostarme.
Cerré los ojos, traté de quitarme de la cabeza el recuerdo del vigésimo primer cumpleaños de NuNew. Habíamos estado en Portland, donde habíamos ido a la universidad. Había cumplido la edad para beber dos meses antes que él. Había sido su primera vez en un bar gay. Bueno, nuestras primeras veces, pero yo solo había estado ahí para él. NuNew tenía dos planes esa noche: emborracharse legalmente y echar un polvo. Había hecho las dos cosas cien veces desde que salimos de casa, pero salir a beber era diferente, y encontrarse con alguien en un club para llevarlo a casa también lo era.
Le habían coqueteado mucho. Aparentemente, todos los chicos querían lo que NuNew tenía para ofrecer, pero él no se había enrollado con nadie. En cambio, regresamos a nuestro apartamento y NuNew me dijo que estaba enamorado de mí, luego se metió en la ducha para correrse.
No sabía si era verdad, si NuNew estaba enamorado de mí, pero por primera vez en mi vida, me pregunté si tal vez había alguna manera de que pudiera funcionar. Quiero decir, nos llevábamos muy bien y nos conocíamos tanto como nos conocíamos a nosotros mismos... pero luego me di cuenta que solo era yo siendo... bueno, egoísta. No me gustaba que NuNew fuera algo que yo no era. Que había una parte de él que no podía compartir. Que otros hombres llegaron a tenerlo de maneras que yo no pude. Lo que probablemente me hacía un poco idiota, pero al menos era un idiota honesto.
Un idiota honesto que tal vez se sentía un poco desconsolado y no sabía lo que significaba, o si tenía las pelotas para tratar de resolverlo.
