Alice Mills
-Tenemos un problema- anuncié bajando las escaleras hasta llegar a la cocina donde mi madre preparaba la cena.
-¿Solo uno?, que suerte.
-Es en serio- mostré mi preocupación- he perdido el Dni.
-¡Alice Mills!- soltó la sarten a un lado y me miró sería.
-Debió caerseme en algún sitio...
-Algún día perderás las cabeza aun llevándola sobre los hombros- regañó- Alice...
-Lo siento, iba con prisa a todos sitios.
Encendí mi móvil y busqué entre mis contactos a Samantha, lo más probable es que se me haya caído en su casa, en alguna parte.
Ojalá que sea así.
Sam: se lo he comentado a mi madre. Se te cayó en el concesionario de mi padre, Louie te lo guardó.
-gracias Sam, me llegaré ahora en un momento.
Sam: puedes esperar a mañana y te lo recogen mis padres.
-No hace falta, gracias de nuevo.
Aliviada sonrei apoyada en la nevera la cual abrió mi madre hace unos instantes.
-¡Lo encontré!
-¿Dónde está?- inquirió mi madre curiosa.
-En el trabajo de los padres de Sam- mencioné agarrando los tenis que se encontraban en una esquina de la cocina.- voy a llegarme rápido.
-Son casi las diez Alice.
Llevamos casi un mes en California y seguía sin compartir que saliese sola por las calles. En cierta parte la entendía, después de cierto acontecimiento pasado tenía miedo.
No se puede vivir con miedo siempre.
Decírselo a Alisson Mills.
-Estaré bien, iré en un uber.
-Voy contigo- sugerió- me quedaré más tranquila.
-Mamá estaré bien, además te compartí mi ubicación por si me secuestran- bromeé ganandome una horrible mirada por parte de la rubia.
-¡Alice!
-Era broma- reí y a continuación deposité un beso en su frente- vuelvo en breve.
(...)
Mi madre no tenía que preocuparse tanto, el uber me dejó justo en la puerta de establecimiento unos quince minutos después.
-Alice, hola- saludó el tío de Sam al verme entrar.- Toma, se te cayó estando aqui.
-Siento ser tan despistada.- disculpé un tanto avergonzada- y siento haberte tenido más tiempo aquí, sé que cerrabais hace diez minutos.
-No te preocupes- quitó importancia- debo revisar una última sala, sal por la puerta de atrás.
-Bien- asentí guardando el carnet en el bolsillo trasero del pantalon- Gracias de nuevo.
-Ve con cuidado.
Después de despedirme de él, caminé por los pasillos llenos de coches cubiertos por lonas hasta dar con la puerta trasera.
Estaba entreabierta por lo que no tardé en salir de ahi.
La cerré al instante para evitar cualquier acontecimiento desafortunado.
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Stereo Hearts || Robby Keene
Fiksi PenggemarAlice Mills siempre había sido una chica tranquila, más cómoda con un libro en la mano que con un par de guantes de boxeo. Pero todo cambió cuando su familia se mudó a Los Ángeles y se vio arrastrada al mundo del karate. En la escuela, los rumores s...
