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Yibo ya estaba atendiendo  a sus invitados el, su esposa e hijos hacían alarde de su excelente sofisticasion, buen gusto y elegancia por eso no les había avisado con tiempo a sus padres para que los invitados vieran lo corriente que luciría el esposo doncel de su hermano por en a esas horas donde encontrarían algo digno de una cena de alcurnia para vestir a ese tostón, pero todas sus injurias se volcaron sobre el cuando su familia llegó al salón.

YIBOOO por qué nos dijiste que la pareja de tu hermano era el joven diseñador Xiao Zhan, hoooo miraaaa tus padres traen un conjunto que la mismísima reina le pido para ella y esta se negó a dárselo diciendo que habían sido confeccionados para sus suegros, la cara de Yibo se rompió por el coraje, que no era ese sucio doncel un arribista, como que ahora era uno de los diseñadores de la casa Weijinxi, esto debía ser una maldita broma.

Pues no fue una broma, lo que Yibo había diseñado para ser la vergüenza de sus padres y hermanos por traer a su lado a ese prostituto, resultó ser una noche de gala para Xiao Zhan, incluso su cuñada había suplicando que en cuanto se reincorporara a su trabajo le hiciera un vestido exclusivo para ella, pero Zhan quien era muy sincero solo atino a decirle que si quería podría darle algunos diseños que fueron descartados por algunos de sus clientes más exigentes pues no tendría tiempo para ella hasta dentro de 6 o 7 años .

Mientras Zhan lidiaba con las mujeres, Zhou se quitaba de encima a muchos empresarios que querían saber sobre el, Yibo trató de tomar el protagonismo en varias ocasiones pero al parecer lo que Cheng le había dicho en la casa de su padres no había sido una amenaza, más bien una realidad que el se había negado a reconocer, Wang Zhou Cheng era el primogénito de su familia y el solo era el sustituto de ese gran hombre de negocios.

Resignado a su suerte salió a la terraza tratando de calmarse, pero en ves de aligerar su humor este solo se volvió más agrio al ver al embarazado doncel empinado en el barandal como si quisiera llenar sus pulmónes con aire un poco más limpio,  así que no eres un arribista muerto de hambre, soltó Yibo sin ninguna delicadeza, jaaaa y eso a usted en que le perjudica, replico Zhan.

Yibo le dio una sonrisa ladina al doncel, bueno en que me engañaste quizás si hubiera sabido que no eras una rata callejera te habría convertido en mi amante oficial, respondió el Wang,  hooo que gran honor señor Wang creo que todos estos años lo he juzgado mal, pensé que era un pendejo de mierda elitista, pero ahora que lo veo mejor solo es un pendejo acomplejado que se hace un punto en la pared al lado de mi esposo.

Yibo apreto el puño que tenia posando en el barandal, Zhan lo noto y pensó que era hora de salir de ahí,  el aire había estado fresco antes de que usted saliera pero ahora la verdad creo que le ha salido el relleno por que huele a mierda, con su permiso, concluyó el doncel para entrar de nuevo al salón pero antes de que eso pasara Yibo lo tomó fuertemente del brazo, tu vas a salir de nuestra familia no me importa que tenga que destruir a mi propio hermano para lograrlo,  amenazó el Wang  al preñado doncel.

Con su otra mano Zhan se libero del agarre, inténtelo y vera de lo que un hombre de verdad le hace a las basuras como usted, mi esposo no está solo cree que solo tiene prestigio por ser el mayor de los Wang,  que risa me da su ignorancia,  intente lastimar a mi familia, me va a dar gusto verlo en la calle pidiendo limosna, con su permiso señor Wang, el doncel entró al interior dejando al Wang bastante escamado.

Al parecer lo que tenía planeado no sería algo tan acertado después de comprobar que ese chico no era tan desvalido, además que lo que había dicho sobre su hermano lo dejó pensando, que había hecho todos estos años su hermano en aquel país como para que muchos de sus amigos empresarios estubieran interesados en el, bueno aun podría rehacer su plan, con el apoyo empresarial de los Lan el podría posicionarse en un peldaño más alto que el de Zhou Cheng quizás desde un nivel más arriba podría desbancarlo por fin.

La velada terminó animada para los invitados y en un total fracaso para el anfitrión pues de sus logros realizados solo recibió alagos de sus padres, suegros y amigos, todos los demás se enfocaton en Zhou, su brillante esposo y sus educados hijos que adoraban conocer en persona,  los Wang regresaban a su casa con Zhan dormido en lo brazos de su marido, hablaba entre sueños y eso fue lo que alertó a los demás.

El joven parecía tener pesadillas con ese hombre que lo daño en su juventud,  suplicaba que no lo abandonara, que no dejara que su bebé creciera sin un padre que los ayudara, Zhou trataba de consolarlo como siempre lo hacía cuando este tipo de sueños lo aquejaba pero al parecer esta ves era más potente que otras, sin más remedio al llegar a la mansión de los patriarcas, llamaron al medico que atendía a la familia.

Dijo que el no podía hacer mucho pues las enfermedades mentales no eran su fuerte, pero les recomendó una doctora muy buena que había dado buenos resultados en casos de este tipo, por lo que les dio los datos de la mujer y salio de la casa, fue una noche larga, pesada y ansiosa, Zhan había tenido episodios de llanto, gritos de terror y dolor, no pudieron dormir mucho, afortunadamente Hao había regresado de su viaje de estudiantes, se llevó a los niños a su casa para que no los asustara la situación de su madre.

InnecesarioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora