Joven amor

Cap IX: "El reto"

Tiempo después de haber revelado sus sentimientos, tanto Luz como Cande, empezaron a ser animadas por sus amigos a declararlos ante la persona correspondiente. Por el lado de la colorada la cosa era más pasiva. Frases como; "podrías hablarle hoy", "para mí si siente algo por vos" o "yo te ayudo a decirle" no eran tan molestas. Por otro lado la morena no recibía la misma pasividad. Acciones como: empujarla contra la de lentes, hacerle burla cuando los demás no veían o simplemente tirar comentarios desubicados en los peores momentos.

En fin, pasó el tiempo y ya habían llegado las vacaciones de invierno. Estas habían sido las peores vacaciones para la morena. Dos semanas de extrañar a sus amigos y sobretodo de pensar en aquella chica que había robado su corazón.
Cuando volvieron las clases todo el grupito iba con una felicidad abismal como si fuera el primer día de jardín. Al parecer todos habían extrañado el hablar de bobadas mientras el profe explicaba algo.

Lunes 13:00 hrs
Rosario, Santa Fe

Ese día el grupo había llegado temprano. Ni uno solo se atrasó. El que más parecía contento era Iván, quien había llegado primero que todos y había recibido a cada uno de sus amigos con un abrazo, algo bastante raro en él.

- Que pasa que estás tan contento vos?- preguntó la colorada, quien fue la última en recibir su abrazo

El chico hizo caso omiso a las palabras de su amiga y rápidamente tomó el brazo de Luz y la guió a un lugar alejado.

- Se lo vas a decir?- preguntó serenamente el pelinegro - Por Whatsapp me dijiste que se lo ibas a decir hoy- agregó

- Pero! Podés ser más discreto!? - susurró la morena

- Ta bien, yo decía nada más-

Mientras tanto, la de lentes y su amigo castaño miraban en dirección a sus dos amigos sospechando de sus acciones.

- Vos que decís que le esté diciendo?- preguntó la ojiverde

- No sé y no me importa - contestó su amigo - Lo que me importa es: ¿Cuando le vas a decir lo que te pasa con ella?-

- Pronto....creo- dijo en voz baja

- A que no te animás a decirle hoy- miró desafiante a su amiga sabiendo lo competitiva que es ella y que nunca podría no aceptar un reto

- A que si - contradijo ella

Justo en ese momento sonó el timbre y los cuatro tuvieron que ir a su salón. El tiempo pasaba y se hacía eterno para el famoso grupito. Liam tratando de resolver ejercicios, Luz ayudándole, Iván negado a trabajar y Cande pensando en que hacer para confesarse y hacer que su amigo se tragara sus palabras. Finalmente a la última nombrada se le ocurrió una idea al ver que a la última hora tenían inglés. La susodicha tomó su celular y buscó el traductor. Una vez que tradujo unas palabras las pasó a un papelito.

Finalmente llegó la hora de inglés y Cande parecía nerviosa. Luz, quien había vuelto a su asiento luego de ayudar a Liam, la notó extraña, como si algo fuera a hacer. No le dió importancia y prestó atención a la profesora, quien estaba explicando.

La profesora dictó unos ejercicios y, como siempre, las primeras en entregar fueron Luz y Cande. Luego de que pasaron 5 minutos de haber entregado la de lentes tomó el papelito y se lo dió a Luz.

"I prefer that infinity lose its stars and the sea lose its immensity as long as the cinnamon of your skin does not disappear and the brown of your eyes does not stop shining. My heart longs to ask you: Do you want to be my girlfriend?"

Al leerlo Luz no entendió absolutamente nada de lo que estaba escrito así que llamó a la profesora que parecía que no tenía nada mejor que hacer.

- Profe, que dice acá? - preguntó curiosa por saber la respuesta

- A ver...- dijo la maestra soltando un leve suspiro - Prefiero que el infinito pierda sus estrellas y el mar pierda su inmensidad con tal de que el canela de tu piel no desaparezca y el marrón de tus ojos no deje de brillar. Mi corazón anhela preguntarte: ¿Querés ser mi novia?- tradujo finalmente

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