Cap XXIV: "Al borde de la muerte"

12 2 1
                                    

(omnisciente)

Uno de los chicos miró a la morena cínicamente y, con una macabra sonrisa, le dió un rodillazo a esta en la panza. Tal fue el golpe que por el dolor Luz cayó al suelo. Estando ya en el piso los chicos empezaron a patearla. Eran apenas unos cinco chicos. Dos de ellos sostenían a la colorada y los otros pateaban y golpeaban a Luz.

- ¡¡Déjenla!! - gritaba Candela desesperada y llorando

Tantos golpes hicieron que la morena escupiera sangre. Ni bien terminaron de golpearla, los tres chicos iban a ir por la de lentes. Luz, al notar esto, se paró con dificultad y se puso entremedio de los agresores y su novia.

- A ella no - dijo débilmente

El que parecía ser el líder, el mismo que había dado el primer golpe a Luz, le dió un puñetazo. Esta cayó al piso desmayada. Los chicos iban a golpear a Candela cuando de repente escucharon a un vecino del barrio gritarles, entonces salieron corriendo.

Cuando los chicos se fueron, Cande rápidamente se arrodilló a un lado de Luz. Estaba asustada, gritaba pidiendo ayuda. Alertó rápidamente a todos los vecinos e hizo que llamarán al 911.

Cuando la ambulancia llegó Cande se encontraba tratando de despertar a Luz. Los paramédicos inmediatamente la corrieron y cargaron a Luz en la camilla. La subieron a la ambulancia y Cande fue tras ellos. En el vehículo, Cande miraba a Luz. Tenía contusiones en todo el cuerpo y perdía sangre por la boca. Los paramédicos aspiraban la sangre para que no se ahogara.

Llegaron al hospital y llevaron a Luz a terapia intensiva, dónde a Cande le prohibieron pasar. Pasaron horas hasta que llegaron los padres de Luz al hospital. Ambos preguntaron que pasó. Cande les contó todo lo que había sucedido.

Rato después de que llegaron los padres de Luz, sale una médica del área de terapia intensiva. Al parecer iba a dar el parte médico de Luz.

- Son familiares de la señorita Luciana Marqués? - preguntó la doctora

- Si! Somos sus padres. ¿Cómo está? - contestó desesperada la madre de Luz

- Lamentablemente perdió mucha sangre a causa de los golpes, no sabemos si vivirá. Tuvo una hemorragia interna muy grave. Disculpe - comentó la doctora para luego retirarse

Candela se sintió destruida, llena de impotencia por no haber podido defenderla. Se sentía culpable pero sacó esos pensamientos de su cabeza. Debía razonar, a Luz no le servía que ella tuviera esos pensamientos. Se mantuvo positiva. Sabía que Luz era fuerte así que trató de consolar a la madre, la cual lloraba devastada. En un momento Luz había tenido un paro, se podía sentir a los médicos desesperados por reanimarla. Se escuchaba el típico "despejen". No se sentía real, parecía una película, una desgarradora película.

Luego de muchas lágrimas y mucho tiempo salió la doctora nuevamente. Cande, al verla, se abalanzó contra ella preguntándole como estaba Luz, si estaba bien, si había despertado, si quería verla. A todo esto la doctora no dijo nada si no que se dirigió a los padres de la internada. Dijo algunas cosas que Cande no pudo escuchar ya que la médica lo había dicho despacio.

Joven amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora