𝐟𝐢𝐧𝐚𝐥 𝟐/𝟐

1K 114 11
                                    

—¿Crees que lo hagan? —preguntó Love una vez que estuvieron lo suficientemente alejadas de Yoko y Faye.

—¿Qué cosa?

—Eso de ir al registro civil y casarse. Ellas se ven muy enamoradas.

—No lo sé, todo es posible —murmuró Milk pensativa—. Nosotras también estamos muy enamoradas, ¿no es así?

—Por supuesto, ¿Y tú te casarías conmigo si yo te lo pidiera? —preguntó la tailandesa con picardía.

—Esa es una buena pregunta Pattranite, ¿casarse ahora? Sería una completa locura —respondió Milk notando la palpable decepción en la expresión de su novia—. Pero...

—¿Pero? —los ojos de Love la miraron con ilusión.

—Pero para eso primero tienes que ganarte la aprobación de mis padres. A papá le gusta jugar golf, tienes que tomar clases para poder jugar con él y a mamá le gusta el ajedrez, si logras ganarle una partida, te aceptará encantada, porque nadie ha podido ganarle en los últimos cinco años —comentó Milk—. Ahora que lo pienso, no es algo tan difícil. Podríamos casarnos rápido, todo depende de ti.

—P-pero... yo soy pésima en los juegos de mesa, ni siquiera he podido ganarle a alguien una partida de domino —murmuró Love con el ánimo arrastrando por los suelos—. Y soy un asco para cualquier deporte que tenga que ver con pelotas.

—Hablando en serio Love, ¿de verdad te gustaría formalizar tu relación conmigo?

—Sí, ¿a ti no? —preguntó la rubia un tanto temerosa de escuchar la respuesta.

—Pues si eso es lo que nos tiene deparado el destino, lo aceptaré gustosa —contestó Milk con calidez—. ¿Te imaginas? Seríamos una pareja envidiable para el mundo.

—Ojalá que sea pronto...

—Por eso hay mucho que practicar mi Love —dijo Milk besándole su mejilla con dulzura—. Pero tranquila, yo te acompañaré en todo el proceso, seré algo así como tu mentora.

—Pues parece que estoy en graves problemas porque creo que me he enamorado de mi mentora —susurró Love mordiéndose el labio inferior de manera sugestiva—. Necesito aprender todo muy bien para poder casarme con mi novia lo más pronto posible, ¿será que pueda darme un par de clases extras?

—Esta misma noche, en mi apartamento, te daré la primer lección —dijo Milk lanzándole un beso al aire—. Ahora llevemos lo que falta a la mesa de Engfa, ya deben estar por llegar, hay que darnos prisa.

—Está bien cielo, ¿crees que con una sola botella de champagne les sea suficiente? Aún tengo dos botellas más.

—Yo creo que con eso será más que suficiente, mejor ordena que preparen más pollo frito.

━━━━━┅━━━┅━━━

Engfa esperaba ansiosa afuera del restaurante. Miraba su reloj de mano a cada instante, Charlotte tendría que haber llegado hace quince minutos.

¿Y si no viene? ¿Y si me deja plantada?

La rubia suspiró profundamente intentando ahuyentar esos malos pensamientos. Quería pensar que la contraria se había retrasado por alguna razón.

—¡Engfa! —escuchó un grito proveniente de la mujer que tanto esperaba. Venía corriendo rápidamente a la orilla de la calle. Y cuando llegó frente a ella, comenzó a toser excesivamente con las manos puestas sobre sus rodillas. Estaba completamente exhausta—. Mi auto... estúpido auto, se averió a mitad del camino.

—Por Dios, corriste demasiado, debiste llamarme por teléfono, yo habría ido por ti —dijo Engfa con preocupación.

—Cuando mi auto se paró a mitad de la calle yo salí para intentar revisar el motor —lo cual fue una completa tontería, porque ella no sabía absolutamente nada sobre reparación—, pero mi estúpido auto tenía seguro y se cerró, mi teléfono y cartera se quedaron dentro.

She loves control「 Freenbecky 」Donde viven las historias. Descúbrelo ahora