-No creo que sea la mejor idea darnos la oportunidad, ahorita no podemos- Hablo, deteniéndose de inmediato- Prometo acompañarte en este proceso pero, como una simple amiga.
Creo que una cachetada dolia menos. Pegue mi frente a la suya sin soltar sus manos, estaba empezando a sentir mis ojos aguados, no quería que me viera llorar, no otra vez.
-Maria Jose ¿Estás bien?- Escuché que preguntaron del otro lado de la puerta.
Su voz irritante era irreconocible.
-Ya entendí- Dije soltando sus manos.
-No es lo que parece- Dijo rápidamente tomando una de mis manos al ver que estaba dispuesta a irme.
-No tienes porque mentir- Dije soltandome- ¿Y así es como dices ser mi amiga? Wow.
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Pov Maria Jose
No se cuanto tiempo llevaba viendo la comida, sin probar ni un bocado, solo se que estaba sumida en mis pensamientos.
La pequeña conversación que tuvimos con Daniela en el baño me dejo sumamente intranquila, quisiera ir donde ella y decirle que nada de lo que pensaba es la realidad. Seguramente estará pensando que Enzo y yo estamos saliendo, ha de estar pensando qu esa fue la razón por la que rechace su propuesta de darnos una oportunidad, si supiera que yo n......
-¿Hola? Tierra llamando a Maria Jose- Escuché a Enzo haciendo que saliera de mis pensamientos- Oye, no has tocado tu comida.
-Honestamente se me fue el apetito- Respondí.
Enzo se quedó callado pero, sabía que su cabeza estaba maquinando y no iba a pasar mucho tiempo cuando soltaría su primer pregunta.
-¿Crees que me odie más?- Preguntó.
Se tardó en preguntar.
-No lo creo- Respondí- Lo aseguro- Dije soltando una pequeña risa.
-Oye, enserio lamento haber llegado en el momento menos indicado, no quería empeorar tus planes- Dijo.
Enzo sabía lo que estaba pasando entre Daniela y yo. Un día después al que el y Daniela habían discutido, Enzo apareció con sus detalles semanales, esta vez apareció con un ramo de flores y otra pequeña caja donde se podía apreciar un juego de aretes Harry Winston los que regrese, por supuesto, diciendole que no podía aceptar tal cosa y como siempre insistió que ya los había comprado y no tenía a quien más regalárselo así que terminé aceptandolo dociendole que sería la última vez que aceptaría un regalo de esos.
~Flashback on~
-Si vuelves aparecer con flores y regalos costosos, prometo no volver hablarte más- Dije.
El empezó a reír.
-No te atreverías- Respondió.
-No me conoces entonces- Dije alzando mis hombros.
El pareció analizarme y dijo
-Creo que estoy empezando hacerlo- Respondió con una sonrisa.
No respondí a eso, solo le sonreí y seguí guardando mis cosas para poder ir al estudio.
-Sabes, he estado pensando algo- Dijo- Y creo que me acercaré a Daniela, en modo conquista- Soltó de la nada.
Yo empecé a reír casi que a carcajadas.
-Creo que te hace daño pensar- Dije aún riendo.
El también río conmigo.
-¿Por qué no? Dicen que del odio al amor solo hay un paso- Respondió.
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Mi pequeño gran regalo
RomansaDaniela calle. Una empresaria decidída a "vivir" lo que queda de su juventud, metida entre papeles, dice disfrutar su trabajo pero la realidad es que en el encuentra "compañia" según sus palabras, lo que con el pasar del tiempo le hará caer en cuent...