꒰ › 17 ▎EXPLANATION !!

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—No crean que se me olvidó el pastel de... ¡Pepa!—su madre saco un pastel posicionandolo en el centro de la mesa del comer.

Todos estaban felices; habian regresado a su casa que ya estaba libre de la plaga, las cosas parecían estar mejorando para ellos. Pedro Pablo se sentía afortunado, veia a su familia con una sonrisa, sintiendo como sus ojos se humedecen un poco por la emoción. Saca su credencial que demostraba que ya era mayor de edad, pronto entraria a la universidad. Habia otra cosa que no les habia mencionado a su familia, Bosco vendría más tarde para celebrar con ellos y asi podia presentar formalmente a su novio. Lo hablaron unos días antes, cuando estaban en una tutoría.

Bos, ¿quieres venir a celebrar mi cumpleaños?—dejo el lapiz sobre la libreta.

¿A donde?—volteo su cabeza para prestarle mejor atención.

A mi casa, cuando este libre de plagas. Puedo al fin presentarte como mi novio—Pepa estaba algo nervioso. Tenia también la oportunidad de decirle a su familia sobre la universidad, queria hacerlo en ese momento. Noto una mueca que hizo Bosco, estaba pensando seriamente en ir.

Creo que es una buena idea...—aun habia algo de duda en su tono de voz, posiblemente el que se libraran de una plaga no era de su agrado. Se levantó de su silla—¿Deberia vestirme con un traje o algo así?

Pepa río, estaba preocupado por la presentación que tendria con su familia. Aunque la primera impresión que tuvieron de el no fue la mejor, podian arreglarlo.

Estaba feliz de poder contarle a su familia sobre un novio que no era como los demás en ningún aspecto. Miraba a todos con una sonrisa. Debia pedir un deseo, el sentía que ya tenia todo; su familia, una pareja y ahora su casa nuevamente. Era feliz en estos momentos, realmente lo era.

—Apurale a pedir tu deseo, que se acaban las velitas—hablo Nandy.

Que las cosas mejoren

Simple, pero sabia que era lo que quería. No queria que nada se desarrollara de mala forma, tal vez podia Luna volver con su madre y ellos no salieran afectados, su tía Paz pudiera encontrar a su hija y el podría estudiar lo que tanto queria. Seguir pintando murales por todo el mundo...

Tomo aire y soplo las velitas, se apagaron inmediatamente. Su madre le paso un cuchillo, cortando la primera rebanada de pastel para el. Le pasaron de poco a poco los platos, entregando rebanadas de pastel. Su abuela comenzó a servir atole.

Era algo sencillo, sin embargo lo amaba. Todos platicaban entre si sobre como fue vivir con los Roble, lo que harian ahora con Luna y poder regresar a su vida como normalmente era, sin ningún problema demasiado grave.

—Algo que quiero mencionar es que el Bosco ese trae una onda medio rara con el Pepa—solto Salomón, burlon. La conversación se habia dirigido a los hijos del señor Esteban, sobre como fue convivir con ellos.

—Salomon—se quejo el rizado, dandole un codazo en la costilla. No sentía que fuera algo obvio, a veces si se daban algunas miradas pero no pasaban a más.

—Ya mijo, ¿qué te traes con el, eh?—cuestiono su madre, dandole una sonrisa divertida. Pepa dejo su plato con la rebana de pastel en la mesa, dispuesto a hablar.

Dos golpes en la puerta lo interrumpieron, supuso que se trataba de Bosco. Se levantó para abrir.

No era Bosco.

No pudo reaccionar a tiempo cuando todos los policias entraron y Castro comenzó a explicar las razones por las que todos los mayores de edad serían arrestados.

El ya era mayor de edad.

Las emociones comenzaron a llegar de forma descontrolada, su primera reacción fue llorar. No queria ir a la carcel, el no habia hecho nada malo. Todo lo que hicieron fue con buena intención. Eso no le importo a la policía, los arrestraron de igual forma y los sacaron de su casa. Habia mucha gente afuera, alguna los apoyaba y otra los abucheaba.

El no era mala persona.

¿Porqué les estaba pasando todo esto?, ¿Quien le dijo a la policía que ellos tenian a la hija de Ginebra?

Un toque, más parecido a un rose, lo saco un poco de su divagación. El tiempo se detuvo por un momento, Bosco lo veia con miedo. Entre toda la gente era fácil notarlo. Si había llegado, pero ahora ya no tenia sentido.

—No soy un criminal, creeme—le dijo, aun estaba llorando. Sus palabras fueron interrumpidas por el jalón que hizo el policía que lo llevaba.

Entro al carro y supo que ya no habia vuelta atrás. Bosco lo veria como un delincuente, todos los del barrio lo harían. Tal vez ninguna universidad aceptaria sus papeles por esto.

Al entrar fueron tratados aun peor, no llevaban ni un día ahí. Notaron a Nandy entre todos los hombres de ahí.  Rubio solto unos comentarios tan horribles, no la pasarian nada bien ahí. Si a Nandy la trayaban así, no sabia que esperar para el. No estaba libre de alguna discriminación como esa, no se avergonzaba por lo que era sin embargo sabia que no todo el mundo pensaba de la misma forma que su familia. Lo vivió en la escuela, en el barrió y ahora lo viviría ahí.

Kenzo trato de defender a Nandy, no salio bien.

—¿¡Porqué no hacen nada!?—los guardias solo miraban como golpeaban a Kenzo. Debian ayudarlo.

Su estancia en la carcel iba a ser peor de lo que habia imaginado, con rubio ahí y todos sus hombres. Tenia miedo de no salir de ahí con vida, queria a su madre. Sonaba infantil, pero de verdad necesitaba el apoyo de alguien. El olor de su cuarto era asqueroso, al igual que el de toda la carcel, el olor a humedad se mezclaba con la fragancia de sus compañeros. Volvio a llorar, era injusto.

El no merecia nada de esto...

Please please please, BosPaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora