𝐌𝐎𝐍𝐒𝐓𝐄𝐑 𝐇𝐎𝐔𝐒𝐄 ➤ txt, choi yeonjun ✓

𝐐𝐔𝐈𝐍𝐂𝐄

𝟏𝟓 | goodbye demon

30 DE SEPTIEMBRE 2015

Un suave tintineo resonaba en las calles, provocado por la llovizna que caía suavemente pero con insistencia contra el suelo. El cielo estaba oscuro y gris, ya que la noche había caído. Kathleen se refugiaba bajo un paraguas color rosa pálido, que la protegía del agua que caía a su alrededor, aunque de manera gentil, ya que no era una lluvia torrencial. Suspiró, mientras esperaba a Yeonjun en un callejón, resguardándose de la lluvia. Era tarde, alrededor de las diez de la noche, y el horario laboral del chico ya había finalizado. Él le había indicado que lo esperara justo allí.

Cuando Yeonjun salió por la puerta trasera del restaurante, Kathleen se dio la vuelta para verlo. Llevaba un paraguas negro y su ropa parecía monótona y triste, en blanco y negro. Sin embargo, sabía cómo vestirse y cómo lucirlo. Se acercó a ella, tomó su mano, indicándole que era hora de irse.

────¿Vamos por las velas?────Preguntó Kat, mientras Choi tiraba de su mano saliendo hacia las calles llenas de personas en Tokio.

A pesar de la lluvia, las calles estaban bien iluminadas y repletas de personas con sus paraguas escabulléndose de el agua.

────Mhm, es lo único que te falta, ¿no?

Para el ritual, se necesitaban siete velas negras que se pondrían alrededor formando un círculo para canalizar la energía oscura. Esto siendo leído por Kat de un libro de la biblioteca, uno de los más escondidos. Definitivamente quería hacer las cosas bien.

────Sí. ¿Pero estás seguro de dónde estamos yendo? No quiero que me roben. Que te roben a ti solo, mínimamente.────Rió cuando él la miró a su lado, alzando una ceja.

────Por supuesto que sé, estás hablando con una persona que ha vivido en Japón hace más de tres años.────Presumió, volteando sus ojos.

Caminaron juntos, disfrutando de la compañía mutua, con la suave lluvia como fondo y las voces extra de los adolescentes, adultos y jóvenes que también andaban por las calles.

────¿Qué tal las cosas con Soobin?

En la mañana, en el colegio, Kathleen había observado a lo lejos cómo Yeonjun y su amigo conversaban. Sin entrometerse, siguió con sus actividades, pero no pudo evitar notar el encuentro. Yeonjun le había mencionado que intentaría llegar a un acuerdo con su amigo después de que ella lo convenciera para darle otra oportunidad, y parecía que había cumplido con su palabra.

────Tenías razón... tú le gustabas desde hace mucho antes, y... él me expresó que no tenía idea sobre nuestros sentimientos mutuos────, fue explicando el pelinegro a medida que caminaban.────Creyó que lo nuestro era mera casualidad o compromiso, forzados a convivir, entonces...

────Oh... vaya.

────Sí, vaya────, asintió resoplando.────Se entero de todo en la fiesta, por eso estaba tan sensible. Pero ahora... las cosas ya están bien.

────¿Está todo arreglado?

────Lo está. He vuelto a la residencia con él────, informó, dándole una pequeña sonrisa.────Después de todo, no podía convivir mucho con Taehyun y Kai en una habitación hecha para dos, cuando éramos tres.

Kathleen se sintió satisfecha al ver que Yeonjun había seguido su consejo y había resuelto las cosas con su amigo. Sin embargo, aún no podía sacudirse el sentimiento de culpabilidad y dolor que la embargaba al pensar que habían lastimado a Soobin. A fin de cuentas, uno no elige de quién enamorarse.