Yeonjun es un idol con una personalidad explosiva y un tanto infantil, lo que hacía que muchos no le tuvieran paciencia.
Soobin, por otro lado, es un mánager con mucha paciencia.
Yeonjun se observaba en el gran espejo frente a él, más bien veía su cabello, ya que era hora de un cambio de look por lo que ahora lo tenía de color marrón.
- La pregunta aquí es si a ti te gusta el tuyo - respondió, viéndolo.
- Sí, hace tiempo me lo quería volver al negro - contesto, tocando su cabello a la vez que lo veía en el espejo.
- Es eso o porque te dijeron que no lo podías tener rubio - le pregunto, saliendo del baño.
- No, en serio lo quería negro - le dijo siguiéndolo.
Y es que los jefes de Soobin le habían dicho que no podía tener el cabello de color rubio, ya que era muy llamativo. Por lo que se vio casi obligado a teñirse de negro, aunque no le molestaba sinceramente.
Ambos siguieron caminando por los pasillos de la empresa, dirigiéndose a la sala de baile.
- Tienes todo preparado para la noche - pregunto el idol cuando llegaron al lugar.
- Sí, tú solo procura brillar - le dijo, yendo a sentarse en una silla de la sala para ver la práctica.
- Siempre - le dijo, empezando a estirarse viéndose en el espejo de la sala de baile.
El ahora castaño tenía que practicar para la presentación en la noche de los tvarkorea, aunque nadie sabía que él iba a asistir. Lo cual era una de las condiciones que le impuso Soobin más que nada para evitar que se planifique algo en contra del idol. El público solo creía que iba grabar un vídeo agradeciendo por el premio, si es que ganaba.
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