TE FALLE (JENLIM). (JENLISA). (GIP)

CAP 7

∆POV JENNIE

Después de la pelea en la escuela, mi mente estaba hecha un caos. Las palabras de Leo seguían resonando en mi cabeza, cada una más dolorosa que la anterior. Caminé hacia mi casa, intentando contener las lágrimas, pero la frustración y la tristeza eran demasiado grandes. Cuando llegué a la puerta, respiré hondo, intentando calmarme antes de entrar.

Abrí la puerta y vi a mis padres en la sala. Mi mamá estaba sentada en el sofá, leyendo un libro, y mi papá miraba la televisión. Ambos levantaron la vista cuando entré, y pude ver la preocupación en sus ojos al notar mi expresión.

-Jennie, ¿qué pasa?-preguntó mi mamá, cerrando su libro y poniéndose de pie.

No pude contenerme más. Las lágrimas empezaron a correr por mis mejillas mientras caminaba hacia ellos. -Es... Leo,-logré decir entre sollozos, sintiendo cómo se rompía el nudo en mi garganta. -Me engañó con Yuna... y hoy tuvimos una pelea horrible en la escuela.

Mis padres intercambiaron una mirada, y mi papá se levantó de la silla para acercarse a mí. -Ven aquí, cariño -dijo suavemente, envolviéndome en un abrazo reconfortante. -Cuéntanos todo, desde el principio.

Me senté en el sofá con ellos y, entre lágrimas y pausas para calmarme, les conté todo. Les hablé de la fiesta, de cómo no fui porque tenía que terminar un trabajo escolar, y de cómo me enteré de lo que Leo había hecho. Les expliqué cómo había estado evitando enfrentarme a él hasta que finalmente no pude más y cómo la pelea en la escuela había sido la gota que colmó el vaso.

Mi mamá me escuchó en silencio, con una expresión de tristeza y comprensión. Cuando terminé, tomó mi mano y me la apretó suavemente. -Lo siento mucho, Jennie,- dijo, sus ojos llenos de compasión. -Debe ser muy doloroso pasar por algo así.

Mi papá asintió, con el ceño fruncido. -Nadie merece ser tratado de esa manera, especialmente no tú. Leo cometió un gran error, y es natural que estés herida y enojada. Y creme que conmigo el va a pagar caro no mentira cuando lo amence de hacerte llorar no vería las luz del día.

Lloré un poco más mientras ellos me consolaban. Me sentía tan perdida, tan traicionada. -No sé cómo seguir adelante,- admití finalmente. -Todo se siente tan... roto.

Mi mamá acarició mi cabello suavemente. -Es normal sentirse así, cariño. Pero eres fuerte, y tienes a muchas personas que te apoyan. A veces, enfrentar estos momentos difíciles nos ayuda a crecer y a aprender más sobre nosotros mismos

Mi papá asintió de nuevo. -Lo importante ahora es enfocarte en ti misma.

Asentí, intentando absorber sus palabras. Sabía que tenían razón, pero todo se sentía tan abrumador. Aún así, era un consuelo saber que tenía su apoyo incondicional.

-Gracias, mamá, papá,- dije, secándome las lágrimas. -Solo... necesitaba sacarlo todo.-

-Siempre estamos aquí para ti, Jennie,- dijo mi papá, con una sonrisa tranquilizadora. -No dudes en hablarnos de cualquier cosa. Esto también pasará.

Nos quedamos allí un rato más, en silencio, simplemente disfrutando de su compañía. Sabía que sería un proceso largo y doloroso, pero tener a mis padres a mi lado me daba la fuerza que necesitaba para empezar a curarme. Y aunque la herida aún estaba fresca, me prometí a mí misma que saldría de esto más fuerte y más consciente de mi propio valor.

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___Semanas después de la pelea___

Cuando vi a Leo acercarse con la carta en la mano, sentí una mezcla de emociones. Habían pasado algunos días desde nuestra pelea, y aunque aún estaba muy dolida, una parte de mí tenía curiosidad por saber qué quería decirme. ¿Sería una disculpa sincera o solo otra excusa?