19°¿𝑌𝑜 𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑎𝑛?

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Frisk se sentía agotado, sus músculos dolían y la herida en su abdomen, que había recibido hace unos días, ardía con cada movimiento. A pesar del agotamiento, no podía permitirse detenerse. Las órdenes tenían que ser dadas y las posiciones debían ser aseguradas.

Frisk: (jadeando) No puedo más... Necesito... algo de energía.

Sin más opción, sacó el frasco y la jeringa que el general había distribuido entre los soldados. Miró el contenido con cierta duda, pero el dolor y la fatiga eran demasiado. Sin pensarlo más, inyectó la droga en su brazo. Sintió una oleada de calor recorriendo su cuerpo, seguida de una euforia y fuerza inesperadas.

Frisk: (apretando los puños) Esto... esto es increíble. ¡Vamos, podemos con ellos!

El agotamiento se desvaneció, reemplazado por una energía feroz y una determinación implacable. Frisk volvió a gritar órdenes a sus compañeros, su voz ahora firme y decidida.

Frisk: ¡Avancen! ¡No dejen que estos monstruos nos detengan!

Chara: (mirándolo con preocupación) ¿Estás bien, Frisk? Pareces... diferente.

Frisk: (con una sonrisa maníaca) Estoy mejor que nunca. Vamos, ¡no tenemos tiempo para dudar!

Con una velocidad y fuerza renovadas, Frisk se lanzó a la batalla. Cada monstruo que se cruzaba en su camino era abatido sin piedad. Su cuchillo se movía con precisión letal, cortando y apuñalando sin descanso.

Monstruo: (gritando) ¡Cuidado con ese humano! ¡Es un demonio!

Frisk no se detuvo, su mente nublada por la euforia y el deseo de matar. La droga hacía su trabajo, eliminando el dolor y la fatiga, dejándolo con una única misión: destruir a los enemigos.

Frisk: (gritando mientras atacaba) ¡No se rindan! ¡Sigamos adelante!

Los soldados a su alrededor, inspirados por su ferocidad, lo seguían con una mezcla de asombro y miedo. La batalla se tornaba más encarnizada, pero la determinación de Frisk los mantenía en movimiento.

Chara: (a un lado de Frisk, peleando) ¡Frisk, no te expongas tanto!

Frisk: (sin detenerse) ¡No te preocupes por mí, Chara! ¡Pelea y gana!

A medida que la batalla avanzaba, Frisk seguía dando órdenes y luchando con una energía casi sobrehumana. Sus movimientos eran precisos, cada ataque devastador. Los monstruos retrocedían ante su furia, incapaces de detenerlo.

Soldado humano: (a otro soldado) ¿Viste cómo pelea Frisk? Es como si estuviera poseído.

Soldado humano 2: (asintiendo) No sé qué le pasó, pero está liderando la carga como nadie.

La trinchera enemiga comenzó a desmoronarse bajo la presión implacable de los humanos. Frisk, en el centro de la acción, era una fuerza de la naturaleza, imparable y letal. Cada monstruo que intentaba enfrentarlo caía rápidamente, convertido en polvo.

Frisk: (gritando) ¡Nosotros ganaremos! ¡Por nuestra libertad!

Finalmente, después de lo que pareció una eternidad de lucha, la batalla comenzó a menguar. Los monstruos restantes se retiraron, dejando la trinchera en manos humanas. Frisk, jadeando pero sin mostrar signos de fatiga, se paró en medio del campo de batalla, observando el resultado de su furia.

Frisk: (respirando pesadamente) Lo... lo logramos.

Chara se acercó a él, con una mezcla de alivio y preocupación en sus ojos.

Chara: (suavemente) Frisk, ¿estás seguro de que estás bien? Pareces... diferente.

Frisk: (asintiendo, con una sonrisa cansada) Estoy bien, Chara. Solo necesitaba un poco de... impulso.

Wartale | AU "Donde Las Flores Mueren"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora