Aventuras en el centro comercial

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Condujo hasta llegar a su destino. El centro comercial.

Nunca había ido a uno. En primer lugar, porque era hijo de un gánster de la mafia, y sería peligroso para él que se supiera su identidad por accidente; y después, porque toda su ropa era escogida por algún diseñador famoso, o hecha a la medida.

Así que fue toda una experiencia.

Visitó varias tiendas, comprando todo lo que más le gustaba, ni siquiera veía los precios.

Sabía que podría pagar lo que fuera.

Aunque ocurrió algo desconcertante con una cajera, al entregarle su cambio, notó que no era solo el billete, tenía un papel con un número de teléfono. La cajera se ruborizó un poco al ver qué se había dado cuenta.

Izuku solo suspiró, rezando a cualquier dios por paciencia.

-Soy menor de edad- dijo arrugando el papel antes de tirarlo al contenedor de basura.

Por el rabillo del ojo pudo ver cómo la cajera cambiaba de color a un rojo cereza. No pudo evitar soltar una sonrisa de lado.

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Ya tenía todo lo que necesitaba, había renovado totalmente su guardarropas. Era raro para Izuku no ver solo trajes formales.

Tenía todas sus bolsas en su carro. Ahora se encontraba bagando en busca de algún regalo para su mamá mientras tomaba una malteada.

-Tal vez podría darle un bolso- se planteó al aire.

Pero el ruido de una conmoción llamó su atención. Pensó que tal vez era un famoso.

Aunque esa idea se descartó al ver pasar a los bomberos y a varios héroes.

Se acercó a la multitud tratando de ver, era un villano. Parecía estar hecho de un lodo verde escuro.

Había tomado a un rehén, parecía ser un estudiante, aunque no pudo ver su rostro, estaba luchaban por liberarse soltando explosiones.

Un don bastante fuerte e interesante.

Pero ninguno de los héroes hacía algo. Eso fue desconcertante ¿No los héroes deberían ayudar al estudiante?

Se acercó a uno de los héroes.

-Discúlpe señor- hablo con algo de indiferencia.

-Ahora no niño, este villano es muy peligroso y estamos evacuando a los civiles- dijo el héroe con preocupación.

-Lo que quería decir es que mi don podría apagar el fuego, y también atrapar al villano.

-Lo siento, pero no nos podemos arriesgar a poner tu vida en riesgo- habló

-Bueno- dijo con un suspiro

No había dicho eso por puro impulso, claro está, pero quería que su fachada de aspirante a héroe se mantuviera lo más posible.

-Oye chico - gritó otro héroe mientras corría a el

-¿Pasa algo?- dijo fingiendo preocupación

-¿Todavía puedes ayudar?

-Claro- sonrió en señal de victoria

En un momento ya estaba volando encima del incendio, alzó una mano a la altura del hombro y la cerró en un puño, poco a poco al incendio se fue apagando.

Mientras las llamas se apagaban, un remolino de viento succionaba al villano, dejando al estudiante libre.

Izuku atrapó al villano en una cúpula de aire, para después entregarla a los héroes.

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-¡Buen trabajo, niño!

-¡Qué don tan asombroso!

-¡Seguro que serás un gran héroe!

Los halagos continuaron por un rato para Izuku, y no sabía que decir exactamente.

Antes de que se diera cuenta, se había hecho un poco tarde. Todavía debía guardar sus cosas. Y, ¡Ni si quiera había comprado algo para su mamá!

Salió como pudo de la multitud que lo rodeaba. Miró su reloj.

5:13 PM.

Debería darse prisa si quería encontrar algo lindo para mamá.

Fue directo hacia una tienda de joyería de oro, tomó varios collares y anillos a juego. Y una caja de color rojo para estos.

Se disponía a partir antes de ver una tienda de bolsos, aunque se lo planteó un minuto. De cualquier forma entró, tomó dos bolsos y se marchó.

MI VIDA 17. Reencarnando En Un Villano Donde viven las historias. Descúbrelo ahora