𝗡𝗼 𝗠𝗲 𝗙𝗮𝗹𝘁𝗲𝘀 𝗧𝘂́ [𝗔.𝗠 & 𝗔.𝗩] ✔️

XXI➝ Clásico Tapatío

MADELINE ANGULO:

—¿Qué traes en la mano?— Voltee a ver a Alan mientras yo estaba sentada en el sillón de su sala.

—Un regalo para ti— Me lo dió —.

Lo abrí y era la jersey de este año, edición 23-24. Sonreí ante tal gesto.

—Gracias Alan— Me levanté del sillón y lo abrace.

—Te lo mereces, quiero que lo uses mañana que sea el partido — Giño el ojo y sonrió, solo solté una risa y asentí.

Fernando me ofreció quedarme en su departamento, ya que tiene cuarto de visita, me dió lo indispensable para 1 día que estuviera aquí o más bien 2 noches durmiendo aquí con él. Con Alan no podía quedarme porque había muchísimo desorden por remodelación de su departamento.

Salí de bañarme para ya ir a dormir, había dejado mi celular cargando en la mesita de noche, lo tome y tenía mil mensajes y llamadas de Damián.

No puede ser.

Cuando iba a mandar mensaje, me entró una llamada de él mismo, y tenía que fingir ante cualquier cosa que preguntara.

Para no hacer la cosa más larga, estaba súper "preocupado" porque no contestaba y fue a mi casa y no abría la puerta, ¿Que le estaba pasando a Damián?, ¿Porque tan exigente?. Le inventé que tuve que salir de emergencia a Culiacán y por eso no había podido hablarle, ya que estaba muy ocupada.

No sé de donde saqué tanta labia para convencerlo de que estaba bien y llegaría el domingo a medio día.

Ya había pensado en algo para decirle, y era mejor ahora que esperarme a finales del semestre. El lunes llegando a clases le diré. No quería nada por mensaje.

Al día siguiente me levanté temprano, tome un baño y fui a almorzar con Fernando.
Estuve casi todo el día haciendo tarea, ya que el partido era en la noche, aunque tenía que estar temprano ahí por la aglomeración de gente.

Termine mis tareas, me maquillaje y arregle para ir al partido, iría con Fernando para yo irme directo a los palcos.

—¿Primera vez?— Pregunto Fernando emocionado.

—No, pero ya tenía mucho sin estar aquí— Sonreí emocionada.

—¿¡Que paso mi pelinegra!?— Exclamó Mateo detrás de Fernando, sonreí y lo abrace.

—Es bueno volver a verte Mateo— Me separe de él y sonreí.

—Igual yo Made— Sonrió. —Y que mejor que en un Clásico Tapatío—.

Fernando se fue a calentar a la cancha y Mateo y yo nos quedamos en el palco, estábamos contando como nos ha ido desde la última vez que nos vimos.

—¿Damián está enamorado de ti entonces?— Pregunto sorprendido.

—Y no le he dicho aún que no siento lo mismo por él— Respondí soltando un largo suspiro.

—¡Pero te besaste con él!— Exclamó.

—¡Lo sé!, solo que— Suspiré —Es difícil—.

—¿Y que es lo difícil Madeline?— Preguntó serio —¿Porque no vas y le dices que no quieres nada con él?, es mejor que le digas ahorita que sigas con esto, al final se empeorará—.

—¿Y si dejamos de ser amigos?—.

—Claro que no será lo mismo después de que le digas, pero si ves que él se está alejando y no quiere hablar contigo, mándalo a la mierda, tu ya cumpliste con tu deber—. Respondió. —En este transcurso que he estado en Chivas he aprendido que debes de luchar por lo que quieres— Me miró y luego volteo a la cancha, directamente hacia Alan. —Y a veces debemos dejar aquellas cosas que "amamos", porque nos están lastimando y no nos dejan seguir, no te ofendas Made, pero con lo que me haz contado, siento que el grupito está deshaciéndose—.

Tenía razón, poco a poco nos estamos distanciando, en primera por parte de Mateo, aunque él no tiene nada que ver en esto, él ya está en su mundo, ocupado en la Sub23.
En otra Verónica y sus enojos porque le gustó a Damián, y Mateo insiste que Verónica está enamorada u obsesiona con Damián.
Pablo, bueno es Pablo, pero últimamente también se nos separa mucho.
Y Damián, que conmigo está como chicle y es por eso que tampoco convive con Verónica ni Pablo.

Dejamos el tema a un lado, ya que empezó el partido.
Muy potente entre los dos equipos, pero lograron meter el primero de la noche, al minuto casi 9 un disparo por parte de Fernando que no pudo parar el portero de Atlas, Camilo Vargas, se llama según la alineación presentada.

Aunque nuestras esperanzas se fueron un poco abajo cuando casi al minuto 45, un jugador de Atlas metió gol, no lo pudo parar Wacho, que anteriormente estaba Tala pero hubo un choque entre él y un jugador de Atlas salió un poco lesionado de la cara.

Luego al 63 un pase largo de Pocho llegó a la cabeza de Marin para meterla con está a la portería e ir 2-1, y gracias a él llegó su doblete al 84 por un larguísimo pase de Piojo.

Ya al final marcaron penal a favor de Chivas y claro, Piojo cobro ese penal y ganaron 4-1.

—¡Vamos con los chicos!— Dijo Mateo emocionado ya a los 10 minutos que terminó el partido.

—No creo que me dejen entrar a los vestidores—. Me encogí de hombros.

—Algo se nos ocurrirá, ven— Tomó mi brazo y fuimos a los vestidores.

No sé ni como logramos entrar pero estaban todos.

—Tu gol fue muy increíble Fernando— Llegué con él

—Gracias Made— Sonrió —Ve y felicita a Alan— Giño el ojo y asentí riendo.

—Estuviste genial en el partido Alan— Llegué por detrás suyo y solo dió un pequeño salto del susto.

—¿Cómo entraste?— Sonrió confundido y apunte a Mateo. —Mateo y sus influencias— Bufoo y rió por lo bajo. —Te agradezco mucho Made—.

Sonreí y no pude evitar abrazarlo, no me importaba que estuviera súper sudado, lo que quería era hacerlo, me siento tranquila con él.

Él también correspondió a mi abrazo y se aferró a mi espalda pegandome hacía él.

—Alan, estás llenando de sudor a Madeline— Rió Brizuela.

—No me importa— Respondí y mire a Alan, lo cual solo me sonrió y beso mi frente.

Con él siento lo que con Damián nunca he sentido.

Voten y les picho una caguama uwu