𝐓𝐇𝐄 𝐅𝐎𝐑𝐂𝐄 𝐎𝐅 𝐋𝐎𝐕𝐄 || 𝐀𝐍𝐀𝐊𝐈𝐍 𝐒𝐊𝐘𝐖𝐀𝐋𝐊𝐄𝐑 𝐅𝐀𝐍𝐅𝐈𝐂

002. GET MY TRUST

CAPÍTULO 002. OBTENER MI CONFIANZA.

─ Ten, quitate esos trapos Jedis ─dijo Lava entregandome algo de ropa.

─ ¿Dónde me puedo cambiar? ─cuestione curiosa dando unos pasos hacía ella.

Ella rodó los ojos y me miró con algo de molestia.

─ Dali, Dali, te llevaría a mi habitación, pero en ella solo entran mis invitados y yo ─me miró de abajo hacía arriba.─ Tú sólo eres una recogida más de Hondo.

─ ¿Cómo tú?

Sonreí burlona en mi posición, ahora entiendo porque me decían que me parecía mucho a mi maestro, ambos jugábamos con fuego.

Aunque está weequay no es un problema para mí si hablamos de defensa.

Ella se acerco con enojó en sus ojos y tomo mi rostro con una de sus manos con fuerza, enterrando sus uñas en mis mejillas.

─ Pueda que hayas sido una Jedi y ahora seas protegida de Hondo, pero para mi no serás nadie, más que una vil basura que encontramos en las arenas de éste planeta que hizo la cosa más estúpida que haya escuchado ─escupio con recelo y acerco mi rostro al de ella.─ Tu República y tú son nada para mí.

─ Veo que la República no fue buena contigo ─dije con dificultad por como me tenía.─ Por eso también estoy aquí ─y tome su mano con fuerza para separarla de mi, rasguñandome un poco.─ La República no fue razonable con mi madre al momento de separarme de ella y es por eso que vine hasta aquí, lejos de esos sucios y ruidosos espacios, para criar yo misma a mi hijo y no me lo quiten cuando crezca.

Lava me miró fulminante por unos segundos y se dio la vuelta para dirigirse a la salida.

─ No me interesa tu vida ─dijo con desprecio.─ Y date prisa, que Hondo quiere hablar contigo.

Sin nada más que decir, salió de allí.

Yo dejé escapar un suspiro al recordar como me alejaban de mi familia y las promesas falsas que me hacía el Consejo cuando les pedía que me dejarán ir a verlos. Ellos creen que porque solo tenía 5 años lo olvidaría, pero están muy equivocados.

Y vaya, la República jamás ayudó a mi familia económicamente como se lo habían prometido. Son unos malditos mentirosos.

Me adentre a la selda nuevamente y me fui a una esquina para poder cambiarme, solo dejándome la túnica para cubrirme mientras lo hacía.

El atuendo era un poco ajustado de la parte del torso, pero no me incomodaba, se me iba bien y acomode mi túnica para que me hiciera juego con la ropa, por lo que quedó muy bien.

Baje la capucha y salí de la selda para dirigirme a Hondo.

─ ¡Hey!, hola, Dalina, ¿verdad? ─me pregunto un joven humano, al parecer de 17 años.─ Soy Miller Seawhite, uno de los ayudantes de Hondo y futuro amigo tuyo ─dijo tomando mi mano estrechandola.

Que niño tan simpático.

─ Un gusto ─sonreí ampliamente por su actitud.

─ Veo que vas a ver a Hondo, yo te llevó.

Y sin soltarme la mano, prácticamente me llevó a arrastrando hasta donde está su capitán.