Capitulo 3: El Trauma De Furina

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Furina: oh, señorita Arlecchino! Es un honor tenerla en nuestra fiesta, supongo que esas deben ser sus hijas.

Crucabena: es un gusto poder venir, y si, son mis hijas, la más parecida a mi es Clervie.

Furina: en un gusto conocerla- dijo para estrechar la mano de la otra alfa- y supongo que ella es la famosa Peruere.

La pequeña Peruere, de pecho aún plano, estaba realmente encantada con la vista de furina. Había conocido a muchos Alfas antes, pero cuando furina tocó su mano para estrecharla, sin sentir disgusto alguno por las marcas en sus brazos, sintió algo diferente. Su pecho latió mucho y por muy poco, dejó salir sus feromonas, eso había condenado la fiesta. Furina se sintió algo mal y fue al baño para tratar de vomitar o lo que sea que su cuerpo le pidiera. Su compañero y amigo Neuvillete se preocupó por ella, le dijo que podía irse si lo necesitaba. Claro que esto fue por llamada telefónica.

Cuando trató de salir del baño se encontró con una oleada de omegas queriendo entrar en el baño. Ella era la única persona allí, por lo que estaban así por ella, rápidamente sacó los supresores que siempre llevaba con ella y los tomó, no quería que ocurriera un accidente. Pero el malestar y su temperatura corporal no se calmaron, no funcionaban los supresores, la desesperación comenzó a envolverla, tomó todos los supresores que tenía, pero lo funcionaron. La puerta estaba apunto de ceder por todos los omegas que intentaban derribarla. Su desespero se calmó un poco cuando un intenso olor a carbón llenó la habitación.

Al darse la vuelta vio a Peruere Legwork parada frente a una puerta secreta que usaban los empleados para limpiar los baños durante una fiesta o evento. Furina de asustó, la Omega estaba llena de sangre y tenía una expresión que no demostraba nada. Furina se levantó y trató de de retroceder, pero se encontró entre la pared del baño y el cuerpo de Peruere.

Furina:a-alejate! N-No quiero hacerte daño!!

Peruere: también estás en celo?- preguntó curiosa- sabes lo difícil que fue conseguir esas llaves?

Furina: eh? Espera... Que hiciste?!?

Peruere: nada importante- ve que la puerta estaba apunto de ceder- bueno, vienes conmigo, o te enfrentas a esos sucios omegas que no pueden controlar su celo?

Furina: eh? Tú, no eres una Omega?

Peruere: si lo soy, mira- bajó un poco sus shorts revelando su intimidad- vez? No tengo uno de esos- señaló el notable bulto entre los pantalones de furina- entonces, que dices?

Cuando Peruere hizo eso furina no se pudo controlar más, ese olor a carbón le nublo la mente y se lanzó contra Peruere. La Omega por su parte estaba más que encantada de recibir a furina con los brazos abiertos, pero ese no era el lugar para hacerlo. Antes de que pudiera reaccionar furina la habia tomado como un costal de papas y la había llevado por la puerta secreta solo para sellarla una vez más. Peruere hizo lo posible para soltarse, y lo logró, ahora el único problema era llevar a furina hasta la habitación que había preparado. Pero no tuvo que pensarlo mucho, furina se lanzó contra ella, pero Peruere fue más rápida y furina terminó chocando contra un estante lleno de herramientas de plomería. Las herramientas cayeron sobre la alfa, lastimando la y provocándole varios cortes.

Peruere: estás bien?

Furina: ah!!- se levantó y vio a peruere- ven aquí.

Peruere salió corriendo, furina al verla corrió tras de ella, primero se le insinuaba y después corría de ella? De verdad la castigaría cuando la alcanzara. La haría suya y no la dejaría escapar, o al menos eso pensó en su momento. Tardaron poco tiempo en llegar a la habitación, que era la suite presidencial, una vez allí furina comenzó a violar a Peruere, estaba frustrada sexualmente, y que Peruere se le ofreciera y luego la hiciera correr para conseguirla  la enojo. Tanto fue su enojo que comenzó a lastimar a Peruere en medio del acto, la Omega se había dejado lastimar en un principio, se lo merecía. Pero llegado un punto, cuando furina trató de asfixiar la, ella se defendió y golpeó a furina en la nariz. Ese golpe volvió en sí a furina, quien no podía creer lo que había hecho.

Furina: q-que te hice!?!?!- preguntó horrorizada de si misma, y un poco asustada por Peruere.

Peruere: solo sigue embistiendo me- dijo para tomar la camisa, lo que aún quedaba de la camisa, de furina y la acercó para besarla- todo está bien.

Nada estaba bien, por que una Omega le daría el visto bueno luego de ser golpeada y casi asesinada, pero Peruere tenía la misma expresión que una colegiala enamorada, cuyo crush le estaba prestando una ínfima parte de su atención. Luego de eso siguieron teniendo sexo hasta que el celo de ambas se calmó, pero esa semana, algo cambio dentro de furina, algo se quebró. No por Peruere o lo que habían hecho, sino por el efecto retardado de todos los supresores que había tomado, lo que causó que su primera reacción al acabar su celo fuera abandonar a la Omega, cosa que era completamente opuesta a lo usual, ya que ambos, tanto Omega como alfa, pasaban al menos dos semanas juntos después de calmar un celo. Pero Furina no sintió esa necesidad natural después de haber hecho tal acto, por eso no le podía dar la cara a Arlecchino sin llorar.

Notas del autor: como están? Espero que bien.

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