parte 8

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Narra Leah.

Después de haberme divertido con Madison y rosearnos un poco con la manguera de agua, decidí tomarme un descanso con aquel chico que se encontraba solo. Me propuse a entablar una conversación con el, algo dentro de mi me dijo que el es muy distinto porque no se estaba divirtiendo con los demás en la piscina, ni siquiera estaba cantando casi gritando y mucho menos bebía en exceso como los demás, simplemente estaba ahí tranquilo en su lugar mientras observaba a los demás, necesita compañía supongo.

Me senté con el hablamos solo un poco, el chico es muy reservado y pues supongo que eso no permite que me pueda expresar bien, ni podía iniciar una conversación que durara si quiera unos 5 minutos, porque el solamente me respondía, no sacaba ningún tema y la verdad no me considero una persona paciente pero creo que puedo hacer un esfuerzo.

--- ¿Y quién eres? --- dije sin pensar esperando su respuesta, es que la verdad si quiera saber con quién estaba tratando de iniciar una conversación estable.

--- Apolo, ¿Y tú? ---- me contestó al instante sin esperarmelo.

¿Apolo? Ese era su nombre, era un nombre muy común, en el buen sentido, pues es que existen muchos chicos con el mismo nombre, no son mis conocidos pero existen, y bueno no voy a negar que el nombre es muy cool y le queda perfectamente, ignorando que también tenía que contestarle.

--- Leah --- dije apresuradamente, no quería dejarlo esperando.

--- Que lindo nombre --- dijo el chico sin pensarlo supongo, porque de inmediato me miró como si hubiera cometido un error y bebió un poco de su cerveza que ya se había terminado.

Trate de devolverle el mismo cumplido pero creo que no me quedo tan bien como planeaba porque no sabía cómo hacer para que el no se tomara a mal el hecho de haberle dicho que su nombre era común y casual, lo dije por lo que ya había mencionado pero también era muy bonito y se lo dije.

Al chico lo notaba un poco indispuesto para hablar conmigo, había momentos en lo que solo se quedaba callado y miraba hacia afuera como si algo le lastimara por dentro, quería ayudarlo y creo que sabía cómo hacerlo, básicamente era que ambos nos dostrajeramos un poco de todo esto y convivieramos juntos por un momento.

--- Por que no nos divertimos nosotros --- dije extendiendole una cerveza, en el fondo deseaba que la tomara y me dijera que si.

--- Está bien --- dijo Apolo al segundo, y su respuesta me hizo muy feliz pero creo que mi felicidad no duró, pues me tiró la cerveza encima, era un asco completo.

El trato de ayudarme mientras pasaba sus manos sobre mi ropa con un pañuelo pero era inútil, lo veía tan preocupado por lo que me había hecho que simplemente le dije que no se preocupara, en el fondo quería que el me diera una solución ante esto pero no lo hizo, al menos en ese momento no. El se veía tan preocupado y me pedía disculpas por lo que ocasiono accidentalmente, y es que era solo eso, un accidente y no había de que pedir disculpas, o al menos eso creo.

El miró hacia todos lados desesperado, tal vez trataba de buscar una solución para que las cosas se calmaran un poco, algo que si ya no estaba aguantando era lo fría que estaba la cerveza y mi ropa interior se estaba traspasando a mi ropa, era demasiado incómodo y se lo hice notar, a lo que el me tomo de la mano y me dijo que lo siguiera, fue muy confuso para mí pero lo hice porque me moría un poco de la vergüenza, lo deje que me guíara hacia donde sea que fuera, subimos las escaleras hasta llegar a una puerta que se encontraba casi al fondo del pasillo, el la abrió y ambos entramos, me dijo que me sentara en la cama y eso hice.
Mire su habitación detalladamente y era muy limpia y a la vez desordenada, pero estaba cool, el salió de su armario donde había entrado a buscar no se que, solo se escuchaban los ganchos de ropa que se movian los unos a los otros y por un momento pensé que estaba enloqueciendo pero no, salió con una sudadera negar que era enorme y estaba linda, y limpia.

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