El segundo matrimonio

Capítulo 104: La familia de Lu llega al pueblo de Ye

El clima en abril y mayo es el mejor del año. Ye Nan se sentía muy cómodo mientras dormía, pero cuando se despertó por completo, se sintió incómodo en todo el cuerpo. Al abrir los ojos, instintivamente miró a su lado y descubrió que Lu Ye ya se había levantado. Al no encontrar a nadie a su lado, quiso llamar a alguien, pero se quedó mudo.

Aún medio dormido, se frotó la garganta. Recordó que solo había bebido un poco de vino la noche anterior, pero ¿por qué su garganta estaba un poco incómoda hoy?

Ye Nan no tiene la costumbre de quedarse en la cama; aunque no se despierta temprano todos los días, siempre se levanta después de estirarse. Al levantarse para vestirse, notó que había un nuevo conjunto de ropa al lado de la cama. Justo cuando tomaba la ropa, Lu Ye entró.

"Nan Nan, toma, bebe un poco de agua". Lu Ye le trajo agua tibia. Ye Nan, que tenía la garganta incómoda y estaba algo sediento, tomó la copa sin reparos y bebió. Después de eso, se sintió mucho mejor.

Después de devolver la copa vacía, Ye Nan se sintió un poco avergonzado. Se volvió a meter en la cama, indicando a Lu Ye que se fuera y que él saldría en un momento. Lu Ye dejó la copa en una mesa cercana, pero se acercó a la cama, incluso se acostó junto a Ye Nan, abrazándolo desde atrás y susurrándole algo al oído.

Tan pronto como Lu Ye terminó de hablar, Ye Nan se puso rígido. Luego, se giró y lo abrazó, escondiéndose en su pecho. Aunque Lu Ye estaba nervioso anoche, era algo que había esperado durante mucho tiempo. Aunque se sintió un poco torpe, no estaba completamente perdido. Recordando el comportamiento de Ye Nan la noche anterior, tuvo sus sospechas. Ahora que Ye Nan lo confirmó, se sintió tanto feliz como furioso, sin poder decir una palabra durante un largo silencio antes de maldecir con furia: "¡Maldito!"

La "maldición" de Lu Ye, por supuesto, iba dirigida a Feng Jun. Ye Nan ya no se preocupa por él. Ahora, incluso se siente especialmente afortunado de que Feng Jun no haya consumado el matrimonio.

"Lu Dage, esto no está tan mal", dijo Ye Nan, agarrando la ropa de Lu Ye con su cara enterrada en su pecho. Su rostro estaba más rojo que la noche de bodas.

Además de la gratitud, Ye Nan se sentía feliz. Al pensar en lo de anoche, su cara se volvió más roja y caliente.

Lu Ye lo abrazó más fuerte, sin poder contener su enojo. Aunque era algo bueno que su esposo no hubiera consumado el matrimonio con Feng Jun, eso no borraba el hecho de que Feng Jun lo había desatendido.

Ahora, Ye Nan tuvo suerte. Tuvo el coraje de oponerse a la familia Feng y de divorciarse de su esposo, por lo que ahora tiene una buena vida. Pero, ¿qué habría pasado si Ye Nan no hubiera tenido ese coraje? ¿Habría tenido que vivir una vida solitaria en la familia Feng, sin hijos propios?

"No lo dejaré ir", pensó Lu Ye, calmándose finalmente. Pero todavía no soltó a Ye Nan, continuando en voz baja: "Anoche dijimos que cambiaríamos cómo nos llamamos, ¿por qué acabas de llamarme Lu Dage?"

La voz de Lu Ye era suave y consoladora. Escuchando las palabras suaves al oído, Ye Nan olvidó lo anterior y comenzó a pensar en cómo llamarlo en el futuro.

Recordó que su madre ocasionalmente llamaba a su padre "Qing Ge", aunque la mayoría de las veces lo llamaba "padre". Pero ahora que no tenían hijos, ¿podía llamarlo "Ye Ge"? ¿O simplemente "Xiang Gong" cuando estuvieran solos?

Pensando en "Xiang Gong", Ye Nan recordó cómo Fang Xiaonian llamaba a Lu Xiyuan, y en voz baja dijo: "Xiang Gong".

Lu Ye nunca esperó escuchar ese título. De repente se sintió emocionado y empujó a Ye Nan hacia atrás un poco, dándole un rápido beso en los labios y diciendo con ojos expectantes: "Di eso de nuevo".