El aire estaba lleno de tensión mientras los líderes de Eryndor se preparaban para la siguiente etapa de su búsqueda. La derrota de Azar había traído un alivio temporal, pero sabían que la verdadera batalla por el destino de su mundo solo acababa de comenzar. Las fuerzas de la oscuridad eran implacables, y sus enemigos más astutos y numerosos que nunca.
A medida que se reagrupaban en Heartwood Forest, los exploradores trajeron noticias alarmantes: un ejército masivo, compuesto por varias criaturas oscuras y dirigido por un nuevo general leal a la causa de Draven, marchaba hacia las fronteras de Eryndor. Este general, un señor de la guerra conocido solo como Kael, era temido en todo el país por su brutalidad y genio estratégico.
Alaric, Roderic, Selene, Thane y Eldrin se reunieron para discutir su estrategia. La sala del consejo estaba llena de mapas, notas y los artefactos que habían reunido hasta ahora. La tensión fue palpable, ya que cada uno de ellos entendió la gravedad de la situación.
"Necesitamos conocerlos antes de que lleguen a nuestros pueblos", dijo Alaric, con su voz firme. "Si infringen nuestras fronteras, la devastación será catastrófica".
Eldrin asintió. "Kael es conocido por sus tácticas despiadadas. Debemos estar preparados para cualquier cosa. Esta no será una batalla fácil".
Selene, que había estado inusualmente callada, finalmente habló. "Nos hemos enfrentado a probabilidades difíciles antes, pero esto se siente diferente. Las fuerzas de Kael son vastas, y es un maestro táctico. Debemos tener cuidado de no subestimarlo".
Roderic, que se había centrado en sus visiones, miró hacia arriba con una expresión sombría. "El equilibrio está inclinando, y no a nuestro favor. He visto atisbos de esta batalla... y no termina bien para nosotros".
Un fuerte silencio cayó sobre el grupo. Se habían enfrentado a amenazas terribles antes, pero el peso de las palabras de Roderic era inconfundible.
"No tenemos otra opción", dijo Alaric, con su voz decidida. "Luchamos. Para Eryndor".
Con eso, se tomó la decisión. Interceptarían al ejército de Kael en las Llanuras de Thalor, una vasta extensión abierta que serviría como campo de batalla. Era una ubicación estratégica, que les daba la oportunidad de utilizar su conocimiento superior del terreno para su ventaja.
Los líderes de Eryndor reunieron sus fuerzas, reuniendo a todos los guerreros con cuerpo que pudieron encontrar. Sabían que estaban superados en número, pero su determinación era fuerte. La marcha hacia las Llanuras de Thalor fue sombría, los guerreros sabían muy bien que la batalla por delante podría ser la última.
Al llegar a las llanuras, el horizonte ya estaba oscurecido por el ejército que se acercaba. Las fuerzas de Kael se extendían hasta el punto de vista: un mar de criaturas oscuras, soldados blindados y bestias de guerra que parecían borrar el sol.
Los dos ejércitos se enfrentaron a través de las llanuras, la tensión era tan espesa que casi se asfixiaba. Alaric estaba de pie en la parte delantera, con su espada reluciendo en la luz tinie, mientras que Roderic, Eldrin, Thane y Selene lo flanqueaban. Los guerreros de Eryndor estaban detrás de ellos, con la cara establecida con determinación, a pesar del miedo que roía los bordes de sus mentes.
Kael, una imponente figura vestida con una armadura oscura, se adelantó de las filas enemigas. Sus ojos brillaron con una luz fría y despiadada mientras inspeccionaba a los líderes de Eryndor.
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La leyenda de Eryndor
Historical FictionLa leyenda de Eryndor sigue el viaje épico de Alaric, un joven elfo cuyos padres son trágicamente asesinados por el hechicero oscuro Malgor. Criado por su tío guerrero Thane, Alaric se embarca en una búsqueda para evitar que Malgor obtenga el Crista...