Alas de esperanza 🪽

Capítulo 4: Más Allá del Deber

El sol se hundía lentamente en el horizonte, bañando la ciudad en tonos cálidos de dorado y rojo. Hawks estaba sentado en la terraza de su apartamento, sus alas descansando perezosamente sobre el respaldo de la silla. El sonido distante de la ciudad, mezclado con el suave susurro del viento, creaba un ambiente tranquilo que contrastaba con la agitación de su mente.

Desde aquella misión en el edificio en llamas, Hawks no podía dejar de pensar en Hikari. Algo en ella lo había atrapado, más allá de su evidente habilidad como heroína. Había una conexión que él no había sentido en mucho tiempo, y aunque intentaba no darle demasiada importancia, no podía evitarlo. Por primera vez en años, alguien había logrado penetrar la barrera que él mismo había construido alrededor de su corazón.

Decidido a comprender mejor esos sentimientos, Hawks decidió invitar a Hikari a pasar un rato juntos fuera del trabajo. Era algo inusual para él, pues solía mantener una distancia profesional con la mayoría de los héroes con los que trabajaba. Sin embargo, con Hikari sentía que debía hacer una excepción.

Tomó su teléfono y marcó el número que había conseguido de la Agencia de Héroes. Después de unos pocos tonos, Hikari respondió.

**Hikari:** (con una voz amistosa) "Hola, Hawks. ¿Cómo estás?"

**Hawks:** (con su típico tono desenfadado) "Hey, Hikari. Pensaba que después de tanta acción nos vendría bien un poco de descanso. ¿Qué te parece si salimos a comer algo? Podría ser una buena oportunidad para relajarnos un poco fuera del trabajo."

Hubo un breve silencio al otro lado de la línea, y Hawks sintió un pequeño nudo en el estómago, algo poco común en él.

**Hikari:** (finalmente respondiendo, con una ligera risa) "Eso suena genial. La verdad, me vendría bien un respiro. ¿Tienes algún lugar en mente?"

**Hawks:** (sonriendo para sí mismo) "Conozco un lugar perfecto. Te recojo en una hora."

Después de colgar, Hawks se dio cuenta de que estaba más nervioso de lo que esperaba. Había salido con muchas personas antes, pero esto era diferente. Se trataba de Hikari, una chica que lo había impresionado no solo con sus habilidades, sino también con su espíritu y su carácter.

Una hora después, Hawks la recogió cerca de su residencia. Hikari lucía diferente, sin su traje de heroína y con ropa casual. Su cabello plateado caía suelto sobre sus hombros, y sus alas blancas estaban plegadas a su espalda. A pesar de su atuendo relajado, había una elegancia en ella que no había notado antes.

**Hawks:** (sonriendo al verla) "Te ves bien, Hikari. Parece que el descanso también te sienta bien."

**Hikari:** (sonrojándose levemente) "Gracias, Hawks. Tú tampoco luces nada mal. Aunque no estoy acostumbrada a verte sin tu uniforme."

Ambos rieron mientras caminaban hacia el restaurante que Hawks había escogido. Era un lugar tranquilo, alejado del bullicio de la ciudad, con un ambiente cálido y acogedor. Una vez sentados, comenzaron a charlar de manera informal, hablando de sus últimas misiones y compartiendo anécdotas sobre sus vidas como héroes.

A medida que la conversación avanzaba, Hawks se dio cuenta de que Hikari tenía una forma de ver el mundo que resonaba con la suya. Ambos habían crecido bajo la sombra de expectativas elevadas y habían aprendido a lidiar con la presión de ser héroes en un mundo que constantemente demandaba más de ellos. Pero mientras que Hawks había desarrollado una actitud despreocupada para sobrellevarlo, Hikari había encontrado fuerza en su serenidad y en su conexión con su familia.

**Hawks:** (tomando un sorbo de su bebida) "Parece que ambos hemos tenido que cargar con bastante desde jóvenes. Es curioso cómo el peso de nuestras alas puede ser tanto físico como emocional."

**Hikari:** (asintiendo, pensativa) "Es verdad. A veces siento que las alas no son solo una extensión de nuestros cuerpos, sino también de nuestras responsabilidades. Pero también me han enseñado que el verdadero poder no está en cómo volamos, sino en por qué lo hacemos."

Hawks la miró fijamente, sorprendido por la profundidad de sus palabras. Había algo en la manera en que Hikari hablaba de su quirk que lo hizo reflexionar sobre su propia perspectiva. Siempre había visto sus alas como una herramienta, algo que lo hacía más rápido, más fuerte, pero Hikari las veía como una parte esencial de quién era, algo que debía ser honrado y comprendido.

**Hawks:** (sonriendo con calidez) "Nunca había pensado en ello de esa manera. Tienes razón, Hikari. A veces es fácil olvidar por qué empezamos en este camino. Es refrescante escuchar a alguien que aún lo tiene claro."

La conversación continuó, y cuanto más hablaban, más descubría Hawks que compartían una visión similar del mundo. Ambos valoraban la libertad y el poder de volar, pero también entendían la responsabilidad que venía con ello. Y, aunque Hikari era cinco años menor, su madurez y sabiduría sorprendían a Hawks, quien se daba cuenta de que había subestimado lo mucho que podía aprender de ella.

Al terminar la cena, Hawks y Hikari decidieron dar un paseo por la ciudad. Las calles estaban iluminadas por las luces nocturnas, y la brisa fresca de la noche era una bienvenida después del calor del día. Caminaban en silencio por un rato, disfrutando de la compañía del otro, hasta que finalmente llegaron a un mirador que ofrecía una vista panorámica de la ciudad.

**Hikari:** (mirando las luces de la ciudad) "Es increíble cómo, desde aquí arriba, todo parece tan tranquilo. A veces me pregunto cómo sería si no tuviéramos que preocuparnos por el mundo allá abajo."

**Hawks:** (acercándose a ella, con un tono reflexivo) "Sería más fácil, sin duda. Pero también sería menos significativo. Es la lucha la que le da sentido a todo, ¿no crees?"

Hikari giró su rostro hacia Hawks, y en sus ojos vio algo que lo desconcertó: una mezcla de comprensión, agradecimiento, y algo más que no podía identificar del todo. Fue en ese momento que Hawks sintió algo diferente, una conexión que iba más allá de la simple admiración. Había una atracción, sí, pero también una profunda sensación de respeto y empatía.

**Hawks:** (suavemente) "Hikari, me alegro de que estemos trabajando juntos. Siento que hay mucho que podemos aprender el uno del otro."

**Hikari:** (con una sonrisa sincera) "Yo también, Hawks. Gracias por invitarme hoy. Realmente disfruté de nuestro tiempo juntos."

El viento sopló ligeramente, haciendo ondear los cabellos de Hikari y agitando las plumas de sus alas blancas. Hawks, por primera vez en mucho tiempo, sintió una calidez en su pecho que no tenía nada que ver con el calor de la batalla. Era un sentimiento nuevo y, aunque no estaba seguro de hacia dónde lo llevaría, no podía negar que Hikari había comenzado a ocupar un lugar importante en su vida.

Mientras miraban juntos las luces de la ciudad, Hawks supo que, de alguna manera, su relación con Hikari había cambiado esa noche. Y aunque aún no sabía qué significaba exactamente, estaba dispuesto a descubrirlo.