Tu y yo (KevEdd) (remasterizada)

Punzadas del corazón

Ed, Edd y Eddy son propiedad de Danny Antonicci

Nathan Kedd Goldberg es propiedad de c2ndy2cld

Sólo los tomo prestados para este fanfic

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

La luz del sol que se escapaba por las rendijas de la persiana fue la que obligo a mis ojos a abrirse, como era de costumbre, respire hondo y gire mi cuerpo para poder ver el reloj digital al lado de mi cama, faltaban solo cinco minutos para que la alarma sonara. Esto ya era normal para mi, despertar a la hora exacta antes de alistarme para ir al instituto, aunque faltaran dos horas para la hora de entrada, me gusta ser puntual, no por nada tengo sobre mi escritorio hay un trofeo de asistencia perfecta con mi nombre: Eddward Marion Masllow.

Ese soy yo, ¿que puedo decir? Soy un chico responsable a quien le gusta aprender, por eso mismo soy considerado un nerd, y por eso mismo me molestan todos los días, otra situación más que ya es costumbre.

Despertarse mas temprano tiene sus beneficios, me duche, me vestí, hice algo de limpieza y hasta logro hacer mi desayuno con tiempo de sobra, he intentado inculcar estas costumbres a mis amigos y compañeros, pero a sus ojos el ridiculo soy yo, si tan solo supieran lo gratificante que es.... en fin.

Termine mi desayuno, lave los platos y tome mi bolso saliendo de casa muy alegre para dirigirme a la preparatoria, el Peach Creek High, pero tristemente mi alegría se desvaneció conforme avanzaba a la parada del autobús, pues al ver que mis dos mejores amigos no me esperaban en ella, recordé el por que de esto. Lamentablemente uno de ellos enfermo hace un par de días, le advertí que comer un sándwich comprado en la gasolinera no era buena idea, pero para él hacerme caso era la mala idea. Mi otro amigo salió de viaje con su familia ya que celebrarían el casamiento de una prima lejana, en conclusion, los próximos días seguramente estaría completamente solo.

Trate de no preocuparme, pero es la primera vez que no tengo a ninguno de los dos a mi lado, entre los tres nos protegemos, nos cuidamos, nos alegramos, pero entiendo que la situación es inevitable, no debo ser egoísta.

Sin darme cuenta ya me encontraba en el estacionamiento del instituto, mis pensamientos no me permitieron razonar en que instante subí al autobús y baje de el, es normal ¿no? Estar tan concentrado en tonterías que olvidas todo a tu alrededor. Camine hacia la entrada y un ruido muy sonoro llamo mi atención, este venia detrás de mi en el parqueadero, se trataba de una moto que se estacionaba en el lugar antes mencionado, todo aquel que viera esa motocicleta roja enorme y brillante sabría de quien se trataba, pero no le preste mucha importancia y me introduje en aquel edificio en el que comenzaría otro día de conocimiento.

Unos pasos mas y llegue a mi casillero ingresando la contraseña al instante, este se abrió soltando un no muy sonoro rechinido por lo viejo y oxidado que esta, metí y saque lo necesario pero al darme vuelta para dirigirme a mi respectiva aula una gran fuerza me empujo haciéndome caer y que mis libros salieran de mi maletero dispersándose por el suelo. Instantáneamente dirigí la mirada a la persona con la que había chocado dispuesto a disculparme, pero lo único con lo que se toparon mis ojos fue con un chico que corría por los pasillos y me gritaba.

-¡Ten mas cuidado, gusano! –fueron sus palabras entre risas conforme se alejaba mas y mas. Era obvio que me había empujado a propósito, ya eran rutinarias sus agresiones y todos los días era algo diferente.

Sigo sin entender la razón del porque todos son tan groseros conmigo y mis amigos aquí, si, mentíamos y estafábamos a la gente, pero nunca en la vida he lastimado ni insultado a nadie... bueno excepto por una ocasión pero es algo que quisiera olvidar. Negué para mi mismo y extendí mis brazos en el suelo para recoger todo lo que cayo de mi maletín.