Capítulo 4: ¿Qué le ocurre a Jason?

38 10 3
                                    


Capítulo 4: ¿Qué le pasa a Jason?



El sol se había escondido hace horas, pero en mi mente, la escena en el campo de fútbol de la escuela seguía repitiéndose una y otra vez sin parar.

Mi novio golpeo a un chico por coquetearle a T/N, esa imagen no deja de atormentarme. El eco de los gritos y la violencia que vi en los ojos de Jason me tiene atrapada en una maraña de pensamientos oscuros.


La cena con mis padres fue, como siempre, un desfile de silencio incómodo.


Apenas toque mi comida, no tengo estómago para nada, mi mente está fija en Jason. Apenas respondí a las pocas preguntas que mi madre me hizo.


Cuando finalmente logré disculparme para ir a la habitación, sentí una mezcla de alivio y ansiedad. El silencio de la casa solo hace que el ruido en mi cabeza sea más fuerte.


Me puse mi pijama rosa con brillitos y me metí en la cama, pero la suavidad de las sábanas no logró calmarme en lo mas mínimo.


Doy vueltas, buscando una posición cómoda, pero ninguna ayudaba a alejar los pensamientos que me atormentan. No puedo dejar de pensar en Jason, en lo que ha hecho y en lo que podría estar haciendo ahora.


Las agujas del reloj avanzan, y con cada minuto que pasa, me siento más desesperada, la ansiedad no me deja dormir.

Necesito verlo, necesito respuestas.

¿Por qué estaba actuando así? ¿Qué le pasaba? Un impulso que no pude resistir me llevó a tomar una decisión que sabía que no era la más sensata, pero no sería Elizabeth Sander si no sigo mis impulsos.


Se levantó de la cama y, con el corazón latiendo con fuerza, me dirijo hacia mi armario. Sabía exactamente lo que iba a ponerme.


Elegí un conjunto de lencería negra que se que a Jason le encanta, algo que me hace sentir poderosa, sexy.

Me puse encima un vestido corto de seda negra, que no era más que uno de mis pijamas sensuales que no utilizo diariamente por obvias razones, pero que en este momento me parece la prenda perfecta.


La tela acariciaba mi piel mientras me miro al espejo, el reflejo muestra a una mujer decidida, a pesar de las dudas que se asomaban en el fondo de su mente.


Con extremo silencio, salí de casa cuidando de no hacer ruido al cerrar la puerta.


Camino con paso firme hacia la casa de Jason, el aire nocturno enfria mi piel a través del fino vestido calmando mis nervios.


Al llegar, mis dedos temblorosos buscaron la copia de la llave que había hecho sin que él lo supiera. Con un giro sutil, abrí la puerta y entré, asegurándome de que la alarma no sonara.


Sabía el código. Siempre he sabido más de lo que Jason cree.



Al subir las escaleras, escuché el leve sonido de la televisión en la habitación de Jason. Mi corazón se aceleró. Cuando llegué a la puerta, lo vi recostado en la cama, con una cerveza en la mano y la mirada fija en la pantalla. Al verme, Jason se sobresaltó, su sorpresa mezclándose con una confusión evidente.


- ¿Qué haces aquí?- preguntó con un tono de incredulidad.


Sonreí suavemente, mis ojos mirándolo con una dulzura que rápidamente se transformó en algo más profundo y seductor.

- Hice una copia de tu llave- dije sin rodeos, disfrutando del desconcierto en su rostro.

-¿Y cómo sabes el código de la alarma? Jason levantó una ceja, claramente incómodo aunque no molesto, es un paso.


La típica villana Donde viven las historias. Descúbrelo ahora