TITANIC ✧ KookTae

Capítulo XXV

Fecha
14 de Abril

Horas
17:00
(3 días, 4 horas y 53 minutos después del embarque)

—Uy...— luego de casi tres horas de almuerzo italiano, Jungkook se encontró en condiciones desastrosas, doblado en dos, luego de realizar el gesto de amor más sensacional del siglo.

—¿Te sientes bien, cariño?— la Sra Kim preocupada trató asegurarse que el pobre azabache pudriera aún respirar, acariciándole la espalda.

—Sí Señora no sé preocupe... Solo creo... creo que iré a descansar un poco.—

—¿Descansar? ¿Bromeas?— exclamó Taehyung, quien lo sostuvo sobre sus hombros, ayudándolo a mantenerse erguido mientras se dirigían a la cabina del menor.

—Mi amor, tengo como cuarenta y cinco kilos de comida en mis intestinos... Me encanta comer pero por el amor de Dios...— dijo con dificultad.

—Ando cachondo.—

—TAEHYUNG.— exclamó su madre a la queja, mientras Jungkook se puso a reír sintiendo su estómago hacer movimientos extraños.

—¿Qué?—

—¿Son estas las formas de hablar en un pasillo por donde pasa la gente?—

—Los odio a todos.—

—No, no quiero molestar pero creo que es hora de moverse... algo está subiendo.— los dos Kim comenzaron a caminar más velozmente hacia la habitación del pelinegro quien, una vez dentro, inmediatamente se dirigió al baño... y regurgitó la mayor parte de su almuerzo, dejándolos sin palabras y asqueados a los dos que se quedaron justo afuera de la puerta.

—Kookie...— trató decir el mayor apoyado a la pared del baño. —...¿Todo bien?—

—¿Te parece qué está bien?_ susurró su madre dándole una palmada en el brazo, fallando.

—Todo bien mi amor...— el sonido del agua corriendo se abrió paso y poco después el menor salió del baño más relajado, pero completamente sudoroso. —Todo bien.—

—Ay niño, lo siento mucho.— Soojin acarició su cabello mojado.

—No se preocupe. Estoy mucho mejor. Solo necesito una ducha.—

—Vale, tienes razón. Me voy, mis queridos. La decrépita madre de Beckett había quedado en reunirse conmigo a las 7 de la tarde. Tengo que arreglarme.— dijo alejándose y mimando a su hijo un 'cuidalo' muy enojada, antes de salir.

Pronto Jungkook se arrojó en su sofá completamente exhausto, haciendo que Taehyung también se sintiera culpable ya que se había aprovechado demasiado de la situación, dejando que se fuera de control.

Se sentó al borde susurrando un —Lo siento...—

—No te preocupes, lo he hecho peor.—

—¿Qué?—

—Una vez en Vietnam comí tarántulas fritas... No te hablo de la indigestión.—

—¡Qué asco!— exclamó haciendo reír el menor.

—¿Me echarás una mano?— dijo comenzando a quitarse la chaqueta, mientras Taehyung se desabrochaba la camisa.

—¿Estos abdominales pueden soportar cualquier cosa?—

—Si sigues así no lo creo.—

—¡Ya dije que lo siento!— el azabache sonrió y después se levantó y fue semi desnudo hacia el baño.