TITANIC ✧ KookTae

Capítulo X

«Y en medio del caos, estabas tú...»
-Anónimo

Fecha
11 de Abril

Horas
14:02
(1 día, 1 hora y 56 minutos despúes del embarque)

—Woo, hoy es incluso mejor que ayer.— Taehyung dice mientras mira al mar una vez que ambos salen al aire libre, oliendo el agua salobre en sus fosas nasales.

—Me parece lo mismo que ayer. No parece que haya cambiado mucho.— contesta Jungkook, mientras caminaban sobre el suelo de madera.

—Para.— el castaño toma el brazo de Jungkook, jalándolo hacia la barrera e indicando el horizonte. —Mira ahora tanto el cielo como el mar están más claros. Ayer todo estaba muy oscuro. Este mar es más... poético.—

—¿Poético?— dice el azabache entre risa.

—Sí, todo lo que no eres tú.— asume una postura compuesta colocando los brazos detrás de su espalda y se aleja, haciendo que Jeon lo siga.

—No digas eso, puedo ser poético.— replica mirandolo.

—Si no veo, no creo, decía Santo Tomás.— bromea Taehyung.

—Bueno, no lo veiste pero lo escuchaste. Dijiste que te gustaba mi música, si no fuera poético no hubiera podido componerla.—

—Mh ... bueno, tienes razón. ¿Pensó en alguien que lo inspiró, Señor Poético?— dice Taehyung haciendo que el menor se echara a reír.

—¿Me vas a llamar así ahora?—

—No cambies de tema. ¿Tienes novia?— pregunta, con un tono melancólico que no pasa desapercibido para el pelinegro.

—No, yo no la tengo. Nunca la he tenido.—

—¡Nunca!— exclama, haciendo que Jungkook camine rascándose la nariz avergonzado.

—Si, y no quería que todos lo supieran.—

—Oh lo siento. ¿No tienes una prometida?—

—La tenía, pero luego empezé a viajar. Sinceramente, no sé dónde está.— si pudieras describir el alivio y la satisfacción con algo, en este caso sería la reencarnación del rostro de Taehyung.

—Bueno... Qué lástima.—

—Ni siquiera estás tratando de fingir.— dice sorniendo ladino. —¿Qué pasa? ¿Quieres casarte tú conmigo?— Taehyung se detiene de repente.

Habían llegado a una parte del barco donde no había nadie presente y el castaño se apoya contra una pared, asumiendo una posición inocentemente sensual.

Jungkook se da cuenta de que falta Kim a su lado y se da vuelta acercándose a él.
Su mirada gritaba el nombre del azabache desde ambas retinas.

—¿Es esto un sí?— sin prestar atención a lo que decía su razón y si si alguien pasaba en algún momento, tira de la chaqueta del menor hacia él.

Sus respiraciones se fusionaron y sus latidos se sincronizaron.

Un suave roze entre sus labios surge.
Casto y dulce.

Este viene profundizado por el azabache, que lame su labio inferior pidiendo permiso para profanar su boca

Taehyung envuelve sus brazos alrededor del cuello del menor empujándo aún más cerca sus rostros.

Sus labios se movían con placer, buscando más y más, ya no había ningún tipo de distancia entre ellos. Sus cuerpos se movían uno contra el otro, buscándose.