Capítulo 8: 'Cambios'

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Yami

Después de hablar con los chicos, regresé a casa a intentar hablar con mi papá, porque él en serio el molesta todo lo que está pasando y de verdad no quiero que haya problemas, intenté de todas formas y solo lo empeoraba, hasta que le dije que me diera una semana, de esa forma se calmó un poco, pero sabía que hacer tratos con mi propio padre, no es buena idea, pero me aceptó el trato, me daba hasta el otro domingo, y si no tenía a Yugi a mi lado, convencería a sus padres.

Papá sabe jugar para que todo quede a su favor, me imagino que a los padres de Yugi se va a presentar como un amor de persona, ya he visto como actúa, y si los padres de Tea son el problema, él perfectamente los puede mandar a matar con Tea y se acaba el problema, así de sencillo, aunque no me parece mala idea tampoco, pero no quiero hacer eso, necesito que Yugi venga a mí a su manera, no a la fuerza.

Finalmente terminé vendiendo mi alma al diablo, mi padre aceptó, pero no significa que esté tan feliz como normalmente me veo, al verificar que había terminado todas mis tareas del colegio, no pude hacer nada más que quedarme sentado, pensando en como llegaría el lunes, o más bien que haría... Yugi siempre llega antes que Tea, así que creo que hablaré con él sobre tener algo serio... solo espero no espantarlo.

Yugi

Apenas llegué a la casa de Tea, no me sentía igual que siempre, antes me sentía normal, pero en estos días me he aburrido tanto, que vine por pena la verdad, porque he evitado venir, pero como sus padres llamaron, me dio susto...

Mientras Tea me hablaba de sus cosas, yo honestamente no estaba prestando atención, no estaba pensando en nada la verdad, miraba al rededor de su cuarto, y cuando vi sus cartas, no pude olvidar los duelos que tuve con Yami, sonreí un momento, recuerdo su cara cuando iba perdiendo, cuando sabía que iba a perder, me hacía ojito para dejarlo ganar, pero no, lo único que lograba con eso era que yo me riera, para al final perder y dejarme abrazar por él, dejando que su aroma llegue a mi nariz y desear nunca separarme de él...

Tea: Yugi, ¡Yugi!- parpadeé, ah, verdad...- te noto distraído, ¿estás bien?

Yugi: Si, creo que estoy cansado, solo es eso.

Tea: Si quieres puedes recostarte un rato, debo terminar tareas- asentí y me recosté, ahora que lo pienso, siempre que olfateo las almohadas de Tea, espero encontrar su aroma, pero no huelo nada, y eso solo me aburre más y me da ganas de irme, o cuando lo siento es demasiado suave... que no llego a sentir nada.

Cerré los ojos un momento para pensar bien, no me he sentido bien últimamente, de verdad me siento tan perdido, a vece no presto atención en clase, aunque no he bajado mis calificaciones, pero no sé... espera, ¿por qué siento...

Yugi: Tea, ¿qué crees que estás haciendo?- me siento en la cama y veo que tiene una de sus manos cerca de mis muslos- ¡quita!- le retiré la mano y me encerré en el baño antes de que ella me dijera algo... y caí a llorar en silencio....

Me quedé ahí, en silencio, sin decir o hacer algo... y cuando pensé en todo... abrí los ojos y entendí, ahora lo entiendo... yo nunca voy a ser de Tea, ¿verdad?, ella no tiene ningún efecto en mí, el único que ha logrado capturarme con su aroma es... Yami.... dios mío, ¿qué debo hacer ahora?, solo quiero irme, pero no puedo irme con él así porque si... a menos... que hable con mamá... me lavé la cara, y salí de la casa de Tea, sus padres me preguntaban que pasó y solo les dije que no permitiría que su hija me tocara mis muslos otra vez, y me fui corriendo, debo hablar con mi madre.

Sra. Muto

Mi hijo se ha comportado diferente estos días, aunque debo admitir que me puse feliz cuando llegó y él se veía feliz, y llegó con un alfa a la casa, sé que no es Tea, pero mi hijo se veía diferente, le encantaba pasar tiempo con él, y se notaba que se llevaban bien, no he dicho nada a los padres de Tea porque se supone que el compromiso fue un trato, pero siento que eso ya no puede ser.

Apenas él llegó, fue corriendo a su habitación, y olía un poco a tristeza, me aseguré de dejar la comida lista, y sin quemarse, y subí al cuarto de mi hijo, toqué la puerta y esperé, cuando entré, Yugi estaba llorando, me senté en la cama y esperé a que se calmara un momento...

Sra. Muto: Yugi... hijo, ¿pasa algo?- tomé su carita y sequé sus lágrimas.

Yugi: Mamá, ¿qué pasaría si te dijera que Tea no es mi alfa?, ¿qué es alguien más?- así que eso era... al parecer algo era verdad.

Sra. Muto: Hijo, si eso pasa, no puedes hacer nada, solo dime, dime quién es, desde cuando, dime hijo, si necesitas que te ayude, solo habla- y me soltó todo, así que si... Yami es el alfa de mi bebé, aunque me alegra bastante que pasara de la forma natural, y no algo forzado- Yugi, no te sientas mal, yo hablaré con sus padres, y más después de que intentó tocarte, con más razón, ve el lunes y habla con Yami, dile, así los dos serán felices, mamá se encargará del resto.

Yugi: Gracias mamá- mi querido omega, mamá alfa siempre estará para ti.

Hasta el próximo capítulo....

Nausea & ShudderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora