Capítulo 10: ' Tiempo Juntos'

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Bakura

Suspiré y me alegré de que mis padres estuvieran de vacaciones, pude venir a la casa de Ryou, sus padres tampoco están, y quedarme con él fue lo mejor que se nos pudo haber ocurrido a los dos, además nuestros padres no se negaron, y además Ryou estará seguro conmigo.

Además me he dado cuenta de que la convivencia de los dos es perfecta, tenemos casi la misma rutina, salvo que yo duermo menos que mi omega, él se acuesta a dormir tempranito, todo juicioso, yo no, y aunque mis padres me lo reclamaron desde hace tiempo, ver a Ryou dormir me provoca sueño, a veces, así que estoy como casi todas las noches, mientras Ryou duerme, yo me quedo despierto, esperando a que me agarre el sueño porque no quise dormir, de todas formas no me sentía mal, al contrario, estaba perfectamente tranquila, a veces acariciaba la cabeza de Ryou, cuando miré la hora, me di cuenta de que ya era muy tarde y cerré los ojos, pero no me dormía, Ryou se movió un poco y yo lo dejé, cuando sentí sus brazos de la nada, abrí los ojos y ahora él me tenía en su pecho, lo abracé de la cintura y me quedé quieto, apenas me acarició la cabeza, me arrunché más a él y finalmente me quedé dormido.

Al día siguiente...

Abrí los ojos y me estiré un momento, menos mal es fin de semana, miré la hora y podía quedarme en la cama un rato más, al ver a Ryou nuevamente dormido en mi pecho, sonreí y me quedé un rato más vagando, hasta que Ryou se despertó.

Ryou: Buenos días- le sonreí y besé su frente.

Bakura: Buenos días- nos estiramos y nos levantamos- ¿si vamos a ir a visitar a Yugi?

Ryou: Si, pues fue lo que acordamos el viernes- aunque yo tengo mis dudas, porque Yami me decía que desde el lunes se sentía como mal, pero que no avisó, yo digo que si no se enferma ya, va a terminar en el hospital, o no era nada y solo estaba sobreactuando.

Mientras Ryou se bañaba, yo hice el desayuno y comí de una vez, así nos arreglamos más rápido, cuando ya estábamos a nada de salir, a Ryou le sonó el teléfono, contestó y cuando ya iba abrir la puerta, me detuvo con la mano.

Ryou: ¿En serio?, ¿y qué tiene?- ohh, tal vez era verdad- no, no hay problema, que iban a saber que se iba a poner así- si, solo sabía desde el lunes, ¿cómo pudo pasar?- tranquilo, lo pasamos para otro día, adiós- me miró- Yami tiene gripa- me quité los tenis- ¿qué haces?, vamos a salir, tenemos que comprar cosas- suspiré quejándome y me los volví a poner.

Bakura: ¿Por qué eres así conmigo?- se empezó a reír mientras yo me comportaba como un niño pequeño- ¿qué vas a comprar?

Ryou: Mi cabello tiene las puntas secas y quiero mirar un acondicionador o una crema- no opinaré nada, yo no conozco de eso, si solo hay jabón, eso me echo en el pelo... cuando me lo lavo.

Yami

Yugi: ¿Te sientes un poco mejor?- suspiré, me encuentro recostado en las piernas de Yugi, si me llevo a levantar, me dará un mareo...

Yami: Más o menos, en serio detesto vomitar- le pedía a Yugi que me consintiera mientras él hacía cabeza de qué comimos anoche- ¿qué fue?

Yugi: El desayuno no fue gran cosa, en el almuerzo tampoco...- me acurruqué más a Yugi- amor, ¿recuerdas que en la cena comiste algo extra?- me percaté y asentí- y te recuerdo que te dije que no era buena idea tomar un sorbo del wiski de tu padre después de eso- ay no, no, no, no.

Yami: Pero si solo fue un sorbo, hasta tu viste- me empecé a quejar más y él acariciaba mi cabeza- no vuelo a desobedecerte- se río y yo solo me quejaba, es que no podía hacer nada- quiero deshacerme de eso.

Yugi: No puedes, es de tu padre, no tuyo- te odio papá- ¿quieres agua, una fruta, o algo?

Yami: No mi amor, gracias, pero creo que mejor me quedo quieto un momento- Yugi me arropó con una cobija y nos quedamos a ver televisión un rato, no me daba sueño, así que me quedaba tranquilo, además el aroma de Yugi me calmaba bastante, me hacía respirar tranquilo y yo automáticamente dejaba de tensar el estómago.

En la noche...

Yugi: Avisas si tienes ganas de vomitar- asentí, no sé como, pero logré llegar a la habitación- por cierto, tu padre me llamó, ya sabe lo que pasó y que te mereces estar así por robar de su trago- me tapé con la cobija- y que regresa en unas semanas.

Yami: De acuerdo- apenas se acomodó me acurruqué en su pecho, en serio su aroma me hace sentir mejor- ¿le mandaste saludos a tu madre de mi parte?

Yugi: Si, que te mejores te manda a decir.

Yami: Ay, que linda, por lo menos ella si se compadece- se río y acarició mi cabeza, nos acomodamos para dormir y yo fui el primero en caer.

Hasta el próximo capítulo....

Nausea & ShudderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora