Capítulo 4: ' Amigos'

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Ryou

Hoy no me sentía del todo bien, pero de todas formas quise venir a clases, no puedo dejar de ser responsable, así que logré pasar desapercibido por mi mamá y llegué a la escuela, por si acaso me puse el tapabocas, porque no quiero que nadie se enferme por mi culpa, si es que de verdad llego a enfermarme.

Yugi: Ryou, ¿estás bien?- asentí, pero algo me decía que estaba mintiendo- por el tapabocas me asustaste, pero no significa que no estaré pendiente de tí- por lo menos Yugi siempre me ayuda en estos casos... o más bien en esta situación.

En las clases me sentía bien, nada fuera de lo común, aunque al finalizar para ir al primer descanso, empezó a dolerme la cabeza, menos mal siempre llevo acetaminofén para estos casos, ya que el colegio necesita una orden médica para tomarse una simple pastilla, y me fui con Yugi y los demás, y tuve mis precauciones.

Ryou: Joey, ¿qué pasa?, no sueles estar así de callado- todos lo miramos, agachó la cabeza y suspiró.

Joey: Resulta que, de camino a casa, unos chicos estaban molestando a una niña, no pude evitarlo y logré que la dejaran en paz, eran de esos ricachones de mierda, pero cuando uno de ellos se me quedó viendo... y el aroma de él se me hacía... exquisito, entré en pánico- todos nos impresionamos- y ahora, después de las clases, nuestros padres se van a conocer, después de esta tarde voy a quedar comprometido- y mordió la manzana con rabia.

Yugi: Vamos Joey, no te cierres de esa forma- tomó un poco de jugo- sabes que este tipo de cosas no la podemos escoger nosotros, además estás juzgando sin conocer al chico, ¿qué pasa si terminan con mucho en común?, o hasta incluso, no sea la persona que tu imaginas que es.

Sonreí, me encanta cuando Yugi se comporta de esa forma, además de que su aroma nos calma a todos de una forma inmediata, y luego recordé la charla que había tenido con él el otro día... miré a Tea y se notaba que hacía esfuerzo para intentar sentir atracción, pero no funcionaba... así que lo que pensaba es verdad, me pregunto cuando esos dos se darán cuenta... pero para que eso pase, el verdadero alfa de Yugi tiene que aparecer y encargarse de... separar a esos dos, suena feo, pero es lo mejor, porque Tea no logrará mantenerse unida a Yugi, ni por error, antes, se terminarán lastimando.

Cuando le pedí a Yugi que me acompañara a dejar mis cosas en el salón, me sentí realmente mal, la cabeza me dolía cada vez más y solo quería recostarme por un largo rato, me dolía todo el cuerpo y no quería nada, dejé las cosas y de camino al patio, me estaba dando mareo, me sostuve de Yugi, cerré los ojos haciendo un intento de recuperarme, aunque sea un poco, pero no pude, también sentía frío y empecé a temblar, no entendía lo que Yugi me estaba diciendo, y simplemente cerré los ojos un momento....

Bakura

Estaba de regreso al salón hasta que escuché gritos, cuando miré era el omega de Yami... corrí a ver que pasaba y me asusté, Ryou estaba en el piso, no perdí tiempo.

Bakura: ¿Qué pasó?

Yugi: Estábamos dejando unas cosas, empezó a tambalearse, y se desmayó- con cuidado lo cargué y me acompañó a dejarlo en la enfermería.

Bakura: ¿Tu sabes porque le pasó eso?

Yugi: Pues desde esta mañana tenía el tapabocas, pero se veía bien, así que no sé si ya estaba enfermo o fue en el transcurso de la mañana- miré a Ryou, a simple vista parecía como si estuviera descansando, pero sé que no es así- ¿qué pasará con él?- y sonó la campana.

Bakura: Regresa a clases y le dices a los maestros que lo estoy cuidando hasta que llegue la enfermera, yo lo voy a cuidar- asintió y se fue corriendo, yo me senté en una silla.

En todo el rato no se movía, cuando toque su frente estaba caliente, no quise que empeorara y le puse una toalla húmeda, la enfermera no llegaba y yo estaba a nada de entrar en pánico, hasta que lo vi moverse, y después abrió los ojos.

Ryou: ¿Qué pasó?, ¿qué hago aquí?- intentó sentarse, pero no lo dejé- Baku... 

Bakura: Te desmayaste en el pasillo, Yugi gritó por ayuda y llegué en el momento justo- me miró- te trajimos aquí y Yugi ya me dijo todo, si te sentías enfermo desde antes de venir, ¿por qué no te quedaste en casa?

Ryou: No quise, no me gusta faltar, me hace sentir... irresponsable.

Bakura: Pero mírate ahora, enfermo y sin fuerzas- suspiró- no quiero que vuelva a pasar, ¿me escuchaste?- asintió, por lo menos ya despertó.

Ryou: Baku, ¿quieres ser mi amigo?- lo miré, no sé porque me sentí feliz de la nada cuando me preguntó eso.

Bakura: Claro que si- sonrió y le acaricié la cabeza.

Hasta el próximo capítulo....

Nausea & ShudderDonde viven las historias. Descúbrelo ahora