"Y el premio a la mejor asistente es para..."
— ¡Y aquí tenemos a la candidata perfecta!
Los ojos de todos en la habitación viajaron hacia ti. No había que ser un genio para saber a quién se refería con eso de 'la candidata perfecta' para mandar de espía al hotel de la princesa Morningstar, cosa que no te estaba gustando para nada.
— De ninguna manera. — Vox responde de manera contundente, cosa que agradeces en tu mente.
— Vamos, querido... De todas las asquerosas almas que poseemos en nuestro poder, TN es la más capaz de todas. Incluso diría que ella tiene potencial. — Valentino comenta con su gran sonrisa 'amable' que solo te provoca una sensación de incomodidad y un escalofrío por la espalda. — Dejemos que ella vaya y averigüe qué está pasando ahí. Con un poco de suerte incluso puede que descubra que está tramando el demonio de la radio.
Vox considera la propuesta durante unos segundos, pero finalmente niega y vuelve a rechazar la idea.
— No, es demasiado riesgoso.
— ¡Oh, vamos! ¿Ahora eres alguien que se preocupa por sus empleados? — Valentino se queja.
— Necesitamos a alguien que no pueda estar relacionado con nosotros. Si mandamos a TN la descubrirán de inmediato... Alastor podría reconocerla. — Vox explica, murmurando la última oración.
— No estás siendo racional, Vox. — Valentino interviene, acercándose a Vox para alejarlo un poco y darle un abrazo juguetón. — Tú mismo me lo dijiste esta mañana, ¿Recuerdas? A ti no te interesa donde esté TN siempre y cuando siga haciendo su trabajo. Entonces, este pequeño espionaje cuenta como trabajo para la empresa, ¿no crees?
— El espionaje sin duda ayudaría a nuestra causa, pero no puedo arriesgar a TN. — Vox responde, haciendo que Valentino lo vea con ojos en blanco. — E-eh... Y-yo... Yo necesito que ella esté dentro de los dominios de los Vees, a-así puedo asegurarme de que está haciendo su trabajo correctamente.
— Por supuesto que es por eso. — Valentino comenta con sarcasmo.
— ¡Digo la verdad! — Vox gruñe, apuntando con su dedo a Valentino. — Necesito asegurarme de que está haciendo su trabajo y no holgazaneando como siempre. Además, también debo estar cerca para corregir sus mediocres informes y papeleo.
Esto te había dolido, realmente te había dolido. Todo este tiempo, las veinticuatro horas del día, los siete días de la semana durante los últimos veinte años habías estado trabajando sin descanso alguno para ayudar a Vox. Habías estado trabajando hasta que tu cuerpo no daba más y fallaba, incluso desmayandote algunas veces. Habías hecho todo eso... Solo para descubrir que Vox te veía como una holgazana que no hacía bien su trabajo.
— Y si TN es tan terrible, ¿Por qué sigue siendo tu asistente personal? — Velvet cuestiona con una ceja levantada.
— Ahhh... Bueno... Eso es porque... porque... Es porque ella es la única tonta que trabajaría incluso en sus días libres por un salario tan malo. — Vox explica, apuntando hacia ti con condescendencia, aunque aun negándose a verte directamente. — Es patética, pero es leal.
— Wow, ya me gustaría a mí que mi Angelito fuera así de diligente conmigo. — Valentino se ríe con burla. — Te sacaste la lotería de los empleados.
— Meh... — Vox le quita importancia. — Ella no es tan buena. En cuanto encuentre un buen reemplazo voy a destituirla de su puesto.
Quieres gritarle a Vox y echarle en cara todo lo que él ha arruinado en este tiempo y como tú habías tenido que ayudarle a solucionarlo. Quieres golpear su rostro plano hasta que nadie sea capaz de reconocerlo y luego tirar los restos a la basura. Pero por más que lo deseas simplemente no podrías hacerlo. Tu lado racional te está gritando que te calmes y guardes silencio como todas las veces anteriores, pero hoy especialmente has sentido que ya no puedes más con esta estupidez. Hoy especialmente sientes que ya no soportas a Vox.
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𝐀𝐬𝐢𝐬𝐭𝐞𝐧𝐭𝐞 𝐦𝐚𝐥 𝐩𝐚𝐠𝐚𝐝𝐨 || Vox x T/N
FanfictionTu trabajo como asistente personal de Vox no es tan espectacular como la gente suele pensar; Largos turnos de trabajo sin descanso, salaria mínimo y horas extra sin paga alguna, ¿Qué más debías soportar? - ¡Renuncio!