Oc'S Kombat 2

Capitulo 7

-¿Que pasa? ¿Has visto un muerto? Hermana -Afirmo Leena-.

Leena Moon, hermana menor de Akira Moon, finalmente después de tanto tiempo se reuniría con su hermana.

-Leena... -Akira entra en un estado de depresión pos traumática sin siquiera darse cuenta-.

-¿No es increíble?, finalmente, cumplí mi promesa, ¿No lo recuerdas?, te dije que nos volveríamos a ver cuándo fuera capaz de dar la talla y por lo que veo, al parecer fui elegida como una de las más capaces en este torneillo de pacotilla, ¿No es fascinante? -Pregunto Leena con una pequeña sonrisa en su rostro-.

-Leena yo... -Akira no tenía dignidad para verla a lo ojos y cabizbaja, solamente intentaba excusarse-.

-... Tú nada, ¿De verdad creíste que me quedaría de brazos cruzados?, por tu culpa perdí lo que posiblemente era lo más importante de mi vida.... "Una sonrisa en los brazos de papá y mamá", ¿Era eso lo que decías que necesitaba cierto? ¿Pero que hiciste cuando estuve a punto de tenerlo todo? -Pregunto Leena sería mientras resopla su cabello suavemente-.

De inmediato, a unos metros, una explosión de hielo ocurrió, escuchándose gritos de dolor y desconsolados de Keyla, lo que claramente preocupa a la Proxy Akira al saber que su mejor amiga estaba en grandes peligros.

-Ve... Pero quiero que sepas algo -Advirtió Leena-.

De inmediato Leena invocaba un enorme martillo con puas y estacas clavadas por todos lados, bañado de sangre y con manchas sucias negras, que simbolizan lo retorcido que pudo ser con alguien alguna vez en el pasado con un martillo de ese calibre.

-Pagaras por arrebatarme una sonrisa en los brazos de papá y mamá -Confirmo su odio y venganza Leena Moon-.

Akira traga saliva, al parecer, su hermana menor tenía una habilidad más que Akira aún no podía dominar, ambas Moon son conocidas por sus agilidades y rapidez además de resistencia humano, algo que destaca en todos los miembros de dicha familia pero mientras Akira todo lo que toca lo puede volver un arma mortal para incluso seres Archiversales, Leena invoca dichas armas, con la diferencia de que aun no puede hacerlo del todo, por lo que normalmente lleva sus armas personalizadas como cartuchos de balas o metrallas, a excepción de un martillo que hasta los momentos, es lo que mejor domina para invocar, un martillo de estacas y púas.

-¡Resiste! ¿Si? Ya, ya lo soluciono, pensaré en algo, ¡Mírame! -Keyla tenía en sus brazos a Yuki la humana-.

-N-no hace falta... ¿Porque me ayudas?, no somos... Equipo -Pregunto la humana-.

Keyla se queda en silencio, en el fondo, la vampiro le daba la razón a Yuki, pero aún así, no era capaz de abandonarla, menos viendo cómo su pecho fue atravesado por una especie de estaca de tinta generada por Ink The Cat.

-No puedo evitarlo... Incluso, si tengo enemigos, en el corazón creo que todos merecemos ser felices y esto, esto para nada es felicidad, es injusto, por favor... Resiste -Las palabras de Keyla se mezclan con sus lágrimas-.

-Je... Creía que los vampiros eran seres horribles y la sangre los descontrolaba, supongo que... Tú me hiciste ver lo contrario -Yuki cerraba los ojos lentamente-.

Keyla abraza a Yuki al verla como lentamente su corazón, deja de latir.

-Cielos, Ink, es eliminarlos, no matarlos -Responde desde lejos Mihko-.

-Shi, perdón, exageré un poquis~ -Responde Ink The Cat-.

Ink y Mihko se acercan a Keyla, quien en lágrimas se levanta, solamente para ser derribada por una patada de Mihko, quien la expulsa a la orilla de plataforma de combate.