La belleza de lo roto

CAPITULO 15

Trey

Pronto llego el día de mostrar nuestra obra, basta decir que estaba más que nervioso y podía notar que Emily también ya que no se esforzaba mucho en ocultar su nerviosismo.

En la escena final teníamos que darnos un beso mientras yo estaba muerto, pero ella se negó a hacerlo todas las veces que intentamos practicarlo.

Pero aun así intentamos hacer lo mejor de nosotros por esa nota, la mayoría se desenvolvió bastante bien. En especial nosotros los protagonistas.

Emily y yo bailábamos mientras hablamos, se suponía que este día era su boda y yo regrese al pueblo después de bastante tiempo, manteniendo la química de los personajes ninguno de los aparto la mirada del otro. Por alguna razón los latidos de mi corazón durante todo ese tiempo se mantuvieron inquietos, finalmente mi muerte.

Ella se sentó a mi lado y parte de su cabello cayo de sus hombros.

-He perdido al hombre que más amaba, ¿Cómo podría yo seguir con vida? –Dijo con la voz quebrada, sentí una lagrima de ella caer en mi mejilla.

Finalmente, ella se acercó a mí y junto nuestros labios en un corto, pero tierno beso. Mi corazón y el tiempo parecieron detenerse en ese segundo. Mateo se colocó delante de nosotros y dio fin a la obra, Emily y yo nos levantamos y pude notar el rubor de sus mejillas mientras esperábamos que la maestra nos diera nuestra nota.

-Eso es poner esmero en el teatro, estoy más que segura que ustedes son el grupo que se presentara al final de clases. –La maestra mostro una sonrisa de oreja a oreja.

-Está bien.

-Pero necesitare que expandan un poco más la historia de Isabel y Diego, por el resto todo está más que perfecto.

-¿Les parece bien ir a festejar? –Pregunte cuando bajamos del escenario.

-Por mi está bien. –Tamara y Emily asintieron.

-Vamos por pizza después de clases. –Mateo se acercó.

-Excelente.

Pilar y sus dos amigas ya se habían ido por lo que no escucharon sobre nuestra celebración. Mientras seguían las clases mi corazón seguía acelerado y mi mente recordando lo suaves que se sentían sus labios, menee la cabeza intentando mantenerme concentrado en la clase, un intento en vano.

-¿Qué pasa? ¿Sigues pensando en lo que paso en el teatro? –Gabriel susurro.

-¿Qué paso en el teatro? –Pregunte fingiendo demencia mientras tomaba apuntes.

-Dos almas enamoradas, una obra de teatro y un beso final. –Dijo este dramatizando.

-Solo fue una obra de teatro, no es como si significara algo.

-Claro, ¿entonces no te emociona que vuelva a suceder?

Mi corazón dio un brinco al escuchar sus palabras delatando lo que mi mente parecía querer ocultar, di un suspiro y solo negué con la cabeza sintiendo de nuevo los latidos de mi corazón con fuerza.

-Si ella te gusta, ¿Por qué no s e lo dices?

-Porque no me gusta.

-Puedes decir eso frente a Daven y otros tontos, pero he leído muchos libros y se cómo se llega a ver el amor más que nadie, incluso antes de que tú lo notes.

-Porque has leído muchos libros es la razón por la que estás perdiendo la cabeza.

-Emily también lee mucho.

-Sí, lo sé.

-Significa que debe tener expectativas altas y que debe estar imaginándose algo en su cabeza. –Deje de escribir y lo mire.

-¿Cómo qué?

-¿Por qué te interesaría? No te gusta. –Sonrió alegremente y puse los ojos en blanco.

-Solo quiero saber si no está pensando las cosas equivocadas.

-Ella ya debe saber que gustas de ella.

-¿Cómo podría saberlo?

-En tu mirada, facciones y todo en ti te delata cuando se trata de ella, evita la verdad mientras puedas, pero tarde o temprano veras lo que Mateo y yo vemos cuando estas cerca de ella.

Justo en ese momento sonó la campana finalizando la hora de historia y él se levantó con una sonrisa en la cara con otros amigos, me quede sentado y me pregunte el cómo se supone que ellos creen que estoy enamorado de ella. No tenía lógica.