𝐄𝐧𝐝 𝐆𝐚𝐦𝐞 [𝟒° 𝐭𝐞𝐦𝐩𝐨𝐫𝐚𝐝𝐚]©

CHAPTER 8

❝THE BEGINNING
OF AN INVESTIGATION?❞

DOS SEMANAS
DESPUÉS...

N.CASSIE.

Han pasado dos semanas desde el suceso que ocurrió en el lugar del evento, desde ese día no he parado de tener visiones que me llevan a ver aquello que transcurre en la otra dimensión.

No entiendo nada, ni siquiera porque todo me resulta tan desconocido y familiar a la vez.

Me encuentro desayunando en una cafetería junto con Mae, quien cada vez está más rara.

Quizás un poco más que yo.

Ambas nos encontramos en pleno silencio, solo se puede escuchar el sonido de nuestra mandíbula masticar nuestro desayuno.

—Ya está bien—Habla al fin Mae.—Tenemos que dejar de fingir que aquí no pasa nada.

—¿Y qué sugieres?—Le preguntó a Mae.

—Buscar respuestas—Me responde.—No puede ser que tengamos esas "visiones" y hagamos como si nada de esto estuviera pasando.

—De acuerdo, ¿Por dónde empezamos?—Le preguntó.

—Tenemos que ir al barrio que apareció ayer en mi visión, se encuentra no muy lejos de aquí—Me responde Mae.

—He quedado con Corbyn, pero puedo cancelar todo—Le comentó a Mae.

—¿Así que habéis quedado?—Me pregunta con una sonrisa pícara.

—Sí, queríamos pasar el día en Santa Mónica—Le respondo.

—¡Dios, amiga!—Se sobresalta Mae.—Date cuenta, ese hombre se muere por ti.

—No creo que le guste, solo somos amigos y nada más—Le comentó a Mae tan tranquila.

—Dí lo que quieras, pero está coladito por tus huesos—Me dice Mae.

—Déjate de tonterías y mejor vamos a centrarnos en eso que tanto quieres descubrir—Me pongo algo sería.

Entre Mae y yo pagamos el desayuno,saliendo de la cafetería minutos más tarde.

Ambas tomamos un taxi, dirigiéndonos hacía el barrio que supuestamente Mae vio en sus visiones.

El taxi nos deja allí.

Le pago y ambas bajamos del taxi.

—¿Hacía dónde nos dirigimos?—Le preguntó.

—Sígueme—Me responde.

Sigo a Mae hasta una casa.

Nada más mirar la fachada, me resulta tan familiar que diría que en algún momento de mi vida puede que la haya visto.

Juntas subimos la escalinata, tocando el timbre de la puerta un par de veces.

Tras esta aparece una chica castaña, de ojos marrones.

—Hola, soy Mae y ella es Cassie—Se presenta la pelirroja.—Me preguntaba si podía hacerle algunas preguntas.

—Perdonadme, ¿Os conozco?—Nos pregunta la mujer.

—Estamos entrevistando a todos los vecinos de este barrio para la revista de la universidad—Le miente Mae.

—De acuerdo, pasen—Nos sonríe la muchacha.

Tanto Mae como yo, entramos al interior de la casa, sentándonos en el sofá del salón.

—Yo me llamo Tate—Se presenta la mujer.

—Me gustaría qué me dijeses, sí conoces a un chico castaño,con ojos marrones—Se atreve a decirle Mae.

—Sí, es mi marido. Sam—Le responde Tate a Mae.—¿Por qué? ¿Pasa algo?—Le hace dos preguntas Tate a Mae a continuación.

—Aparece frecuentemente esta casa entre sueños—Se sincera Mae.—No sé qué relación tienen conmigo, pero no puedo dejar de pensar en ello.

—Pero, ¿Qué?—Se queda la muchacha algo pillada.

—¿Te suena el apellido Winchester?—Le preguntó a continuación.

—Están locas, deberían irse de mi casa, ¡Ya!—Nos dice Tate algo alterada.

En ese momento, Mae y yo nos levantamos con brusquedad del sofá, dirigiéndonos hacía la puerta.

—Y no vuelvan más—Azota Tate la puerta en cuanto salimos de la casa.

Mae y yo nos miramos durante unos segundos.

—¿Y ahora qué hacemos?—Le preguntó.

—Seguir con la investigación—Me responde Mae.

La mañana estuvo llena de desadortunios, malas bienvenidas y hasta decir que tuvimos en más de una ocasión que salir corriendo de casa de Valentina, debido a su brote de enajenación.

Finalmente, Mae y yo acabamos en el que es ahora mi apartamento, quedándonos agotadas en el sofá.

—Todo ha sido inútil—Menciona Mae.

—¿Seguimos mañana?—Le preguntó.

—No, quizás deberíamos tomarnos un respiro—Me responde Mae.

De pronto, el teléfono de Mae suena, siendo apagado a los dos minutos.

—Es Zach, pero no tengo ganas de hablar con él—Me es sincera Mae.

—Yo sigo quedando con Corbyn—Le soy sincera a Mae.

—Pues te ayudaré a elegir el outfit, total no tenemos nada mejor que hacer—Alza Mae los hombros.

—Genial—Le sonrió.

Mae y yo nos levantamos del sofá, dirigiéndonos hasta mi habitación.

Ahí, estuvimos Mae y yo durante veinte minutos eligiendo un outfit.

Finalmente me decanto por unos jeans con una camiseta blanca.

Lo combinó con una chaqueta vaquera y unas converse.

Me dejó el pelo suelto y finalmente me maquillo de forma natural.

—Yo ya me voy—Le aviso a Mae.

—Suerte—Me sonríe.

—Seguro que estarás bien—Miró a Mae.

—Sí—Le respondo.

Le muestro una sonrisa a Mae, saliendo al fin por la puerta, dirigiéndome hacía la entrada del edificio donde seguramente ya se encuentre Corbyn esperándome con su coche...

Bueno hasta aquí el capítulo 8 hasta el próximo capítulo 9

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