𝗠𝗶𝗻𝗶𝗻𝗮⥃𝗥𝗼𝗱𝗿𝗶𝗴𝗼 𝗖𝗮𝗿𝗿𝗲𝗿𝗮

𝖣𝗂𝗈𝗌, 𝖣𝖺𝗆𝖾 𝖯𝖺𝖼𝗂𝖾𝗇𝖼𝗂𝖺

𝘈𝘵𝘦𝘯𝘦𝘢

15 de junio de 2023

Hoy llegan, Spreen, Josué, Carre y Oscu a España, estoy bastante emocionada porque al fin voy a poder entrenar a full con mi entrenador, aunque Rony y Rivers se han portado re bien conmigo. Pero igual extraño una banda entrenar con Josué. Y también estaba re manija porque iba a empezar al fin el proyecto de La Casa Madrid, aunque nos iba a tocar esperar al Mariana para iniciar con los directos, pero ya íbamos a poder estar en la casa.

Estábamos Meli y yo en el aeropuerto esperando a los chicos, para irnos todos juntos a la casa, tenia re engañada a Meli con que Uni venia hoy también, pero en realidad venia hasta mañana, tampoco tanto tiempo, pero le quería hacer una bromita por forra.

—Che Mel, voy al Starbucks ¿quere' algo? —pregunte levantándome donde estábamos.

—Uhhh si, porfa —.

—¿Caramel Macchiato? —ella asintió y me fui para comprar las cosas.

En el camino me encontré a un montón de Bichitos, me quedé un buen rato tomándome fotos, firmando cosas y recibiendo regalos que me daban. Grabé un par de saludos y me volví a dirigir a Starbucks.

—Hola, bienvenida a Starbucks, ¿Qué vas a ordenar? —.

—Hola, quisiera dos Caramel Macchiato, por favor —ordene.

—¿Algo más? —pregunto

—Quisiera dos sándwiches de jamón y queso también —.

—Okey, perfecto, ¿Para quién serían los cafés? —.

Le dije los nombres, ella los apunto en los vasos y se los paso a su compañero para que los preparara, me cobro mi pedido y luego me entrego los sándwiches en dos bolsas de papel. Me entregaron los cafés y me volví a donde estaba Melissa.

Llevábamos casi una hora aquí y no había señales de los chicos, según la pantalla en donde salen lo vuelos, su avión ya había aterrizado, pero no los veía por ningún lado así que decidí escribirles para ver si todo estaba bien.

—Dice que todo bien, ahí vienen —le avise a Meli mientras guardaba mi teléfono.

—Algo tardados —nos reímos y los seguimos esperando.

Yo estaba como loca viendo para todos lados, hasta que vi unos rulos que reconocí al instante, así que me pare rápido y jale a Melissa para comenzar a caminar.

Empezamos a caminar rápido entre la gente, íbamos empujando y pidiendo perdón, hasta que los vimos claramente. Melissa y Ger se vieron y Meli no dudo en correr y saltar para abrazarlo como si fuera koala. Mientras que yo saludaba a los demás.

—Amigo, por poco y no llegan —salude a Iván.

—Y, unos problemas con migración —volteo a ver a Rodrigo mientras sonreía burlón.