Secret Alpha | Jenlisa

Capítulo 34

Después de unos minutos en el auto, Lisa y Jennie llegaron hasta donde iba a ser la reunión con la manada de la pelinegra para hacer la digna presentación de la pelinaranja. 

Ambas estaban nerviosas por lo que iba a suceder, pero se estaban apoyando mutuamente en eso y eso era lo que importaba, si alguna de las dos se sentía incómoda se irían al instante. 

Y Lisa se lo dejó muy claro a Jennie, pues se lo dijo aproximadamente veinte veces en el camino en auto. G–

ㅡToma mi mano. ㅡdijo la pelinegra con una sonrisa, estiró su mano para tomar la mano de la humanaㅡ¿Me dejarías llevarte hacia la sala de reunión para poder presentarte como mi cortejo? 

Jennie sonrió al escucharla, sus mejillas se pusieron rojas al instante y sus pupilas se dilataron. ㅡClaro que sí, alfa. ㅡsusurró. 

La alfa suspiró al obtener la respuesta, tomó la mano de la menor con cuidado y se acercó a ellaㅡ¿Me dejarías besarte antes de entrar?

ㅡSabes que sí puedes besarme, cuando quieras. 

Una sonrisa adornó los labios de la loba y asintió. Tal como lo dijo, besó a la pelinaranja con un beso que planeaba ser corto, pero de un momento a otro comenzó a pasar de nivel, pasó de ser un beso relajado a tener ambas lenguas moviéndose en sus bocas, las manos de la pelinegra sostuvieron las caderas de la menor para mantenerla cerca. 

Ambas estaban enfocadas en sus besos que habían olvidado en donde estaban, hasta que las puertas del lugar de abrieron. 

ㅡPerdón. ㅡdijo la pelinegra al separarse del beso con los labios hinchados, por alguna razón la pelinaranja se le hacía más apetecible y sus colmillos exigían salir para marcarla. 

ㅡPerdóname tú a mi. ㅡrespondió la humana mientras bajaba la mirada, se sentía muy avergonzada en esos momentos y no sabía que le estaba sucediendo. 

Creyó que era fiebre, pues un día antes se había duchado en la noche y quizás eso le había afectado, tenía unas defensas muy bajas y eso la hacia muy débil a las enfermedades.

ㅡDebemos entrar. ㅡsusurró la mayor después de unos segundos en silencioㅡLos demás lobos nos están esperando para conocerte, después podemos continuar con los besos. ㅡbromeó. 

La respuesta de la pelinaranja fue un golpe no tan fuerte en la nuca, al parecer Jennie no era alguien fanático de esas bromas. 

Pero le gustaba mucho ver esas mejillas sonrojadas y las pupilas dilatadas, le encantaba ver a su omega de esa manera, su loba estaba perdidamente enamorada de todas las partes de la pelinaranja. 

ㅡMejor entremos, no me hagas ponerme como un tomate. ㅡdijo la pelinaranja mientras fruncía levemente el ceño. 

Lisa asintió y tomó nuevamente la mano de la pelinaranja para entrar a la sala de reuniones con su clan, pues ya las estaban esperando hace tiempo. 

ㅡBuenas noches. ㅡsaludó la loba al entrar, vio a todos con una sonrisa sincera y se puso detrás de la pelinaranjaㅡLes presento a Kim Jennie, mi cortejo. 

Todos los presentes le sonrieron a Jennie de manera agradable, habían alrededor de quince alfas jóvenes acompañados de sus respectivas omegas, todos parecían amigables. 

ㅡMucho gusto. ㅡdijo la pelinaranja con una sonrisa, inclinó levemente la cabeza hacia todosㅡMe llamo Jennie y... soy el cortejo de Lisa. 

Los halagos no tardaron en llegar por parte de los omegas presentes, pues Jennie era muy linda físicamente y también era una persona amigable, rápidamente se unió al grupo de únicamente de omegas mientras Lisa y los demás alfas hablaban por otro lado mientras cenaban. 

Jennie estaba muy a gusto con todos los omegas en el lugar, eran personas muy amigables y se había hecho amiga de ellos en poco tiempo, pero no sabía porque quería irse del lugar. Se giró para ver a la pelinegra, quien charlaba animadamente con sus amigos alfas, así que decidió no interrumpir.

ㅡY eso... aún no sabemos si queremos tener cachorros. ㅡdijo la pelinegra con una mueca, no había hablado tanto con sus amigos así que no sabía muy bien como recaccionarían.

ㅡOh, eso está perfecto. ㅡrespondió un alfa con una sonrisaㅡTambién hablé con mi omega de eso pero por el momento él prefiere enfocarse en su trabajo y luego pensar en cachorros. 

ㅡTiene razón. ㅡopinó otro alfaㅡLos omegas de ahora tienen más oportunidades y los alfas tenemos que respetar eso, aunque nuestros padres estén en contra de eso. ㅡrodó los ojos. 

Lisa suspiró al recordar a su madre, aún tenía pendiente decirle que no le diga de cosas a su omega, pues sabía que Jennie se merecía el respeto y no iba a dejar que los ideales pasados lo arruinen. 

ㅡTienes razón, ellos siempre quieren seguir sus ideales de cavernícolas. ㅡdijo LisaㅡMi madre la otra vez le gruñó a mi ome- 

Su voz se vio interrumpida al sentir los brazos de la pelinaranja alrededor de su cuello, sonrió levemente al sentirla cerca. 

ㅡ¿Sucedió algo?ㅡpreguntó la pelinegra. . 

Jennie puso su boca cerca del oído de la pelinegra para susurrarㅡCreo que tengo fiebre, quiero ir a casa. 

ㅡEstá bien. ㅡrespondió la pelinegra, al instante se puso de pieㅡAgradezco la noche que hemos pasado hoy pero mi omega no se siente muy bien así que debemos ir a casa. ㅡinformó a sus amigos. 

Todos la entendieron perfectamente y las dejaron ir. 

Mientras que Jennie y Lisa caminaron hacia el auto para ir a casa, seguramente era alguna gripa. 

ㅡ¿Tienes fiebre, amor?ㅡpreguntó la loba mientras acariciaba el muslo de la pelinaranja. 

ㅡMu-mucho calor. ㅡrespondió la pelinaranja mientras se lanzaba aire con las manos. 

Sentía que su cuerpo ardía, no sabía cuanta fiebre tenía pero sentía un calor insoportable. 

Lisa la miró de reojo mientras manejaba, eso no era una simple fiebre. 

ㅡ¿Si?ㅡpreguntó mientras aceleraba un pocoㅡCuéntame que más sientes. 

Jennie puso el aire frío para bajar el calor que sentía, nada funcionabaㅡCalor, mucho, mucho calor. ㅡbalbuceo.  

ㅡ¿Calor? ¿Espasmos? ¿Calambres?ㅡpreguntó la alfa mientras apretaba la mandíbula. 

ㅡSí. 

Lisa suspiró y apretó el volante con fuerzaㅡMierda. ㅡsusurróㅡJennie, es tu primer celo.