Capítulo 29

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Lisa y Jennie seguían avanzando en su relación, aunque la pelinegra estaba aprendiendo aún le faltaban muchas cosas más por aprender. Para llevar una convivencia humana más agradable, el día de hoy tenían preparado un almuerzo especial en el cual invitarían a sus amigas para conocerse mejor y formalizar su relación como pareja delante de ellas. Miyeon, Minnie, Jisoo y Rosé eran buenas amigas ahora, estarían felices si ellas eran las primeras en enterarse de su relación, porque sin duda decirle a sus padres no era buena idea, aún.

ㅡLisa. ㅡlo llamó la pelinaranja, tocando su hombro para llamar su atenciónㅡTienes que acompañarme a la carnicería por unas libras de lomo, necesitamos tener lista la comida para cuando vengan tus amigas y Miyeon.

La pelinegra alzó las cejasㅡEstá bien, iremos en un momento solo deja que me cambie la ropa porque estoy apestosa.

ㅡExclamó la dulce princesa. ㅡsusurró la pelinaranja con sarcasmo, soltando una risita baja.

ㅡExclamó la hija de Albert Einstein. ㅡrespondió la alfa con el mismo tono sarcástico. Jennie frunció el ceño y ya no respondió nada más, simplemente observó a la pelinegra caminar hacia la habitación por algo de ropa nueva para ir decente a la carnicería, al menos ahora no tendría ningún lío con la mujer lobo.

Luego de unos minutos la pelinegra regresó con nueva ropa, lista para salir por lo que necesitaban para el almuerzo que harían. Quizá era algo sencillo pero ninguna de las dos sabía como cocinar.

ㅡ¿Ya?ㅡpreguntó la pelinaranja, tomando sus llaves y algo de dinero para comprar la comidaㅡTe comportas, por favor no quiero escándalos ahora.

Lisa rodó los ojos pero asintió, sonriendo ladinoㅡLo que mi novia diga, vamos por la comida. ㅡsoltó una risita, tomando las suaves caderas del humano con ambas manos para dejarle un beso en la mejilla.

Salieron tomados de la mano pues iban a ir caminando hacia la carnicería más cercana, además tenían que ir al supermercado por unas gaseosas para la misma comida.

ㅡYo iré por la carne mientras que tú puedes ir por unas gaseosas al supermercado, nos vemos en este mismo lugar después. ㅡindicó la pelinaranja con una sonrisa, acariciando suavemente la mejilla de la mujer loboㅡNo hagas ningún desastre por favor, no estoy para eso ahora.

La pelinegra hizo un puchero fingidoㅡMe ofendes Jennie, jamás he hecho algo malo y mucho menos loco.

Jennie alzó una cejaㅡ¿Cómo nos conocimos?

ㅡBueno quizá sí hice una que otra locura, pero ahora no lo haré. ㅡasintió con una leve sonrisaㅡCompraré un paquete de croquetas, tengo antojo de unas.

ㅡSin besos por una semana. ㅡrió la menorㅡNo pienso besarte si tienes sabor a croqueta de perro en la boca.

Lisa sonrió nuevamente, inclinandose hacia adelante y dejando un rápido beso en los labios de la menorㅡDespués estarás rogando por mi boca, cosita, ve por esa cosa y yo voy por las gaseosas.

ㅡSin desastres. ㅡrecordó la menor, dejando una última caricia en la mejilla de Lisa antes de caminar un poco más hacia una carnicería.

Mientras que la pelinegra fue a comprar un litros de gaseosas, una Coca-Cola y Crush Orange, no sabía cual le gustaba a la pelinaranja por eso compró ambas.

En su propia opinión, Lisa decía que la Coca-Cola era la mejor gaseosa del planeta.

Luego de pagar las cosas que había comprado, gaseosas, un paquete de croquetas, unas gomitas de fresitas y un juguete para mordisquear.

Aún no veía a la pelinaranja volver al lugar indicado. Tuvo una idea magnífica para ayudar a Jennie con la comida. Dejó cuidadosamente la bolsa con las cosas compradas sobre un pequeño arbusto enfrente de una casa, luego de eso corrió a un callejón cercano.

ㅡUn poquito de carne no hará daño. ㅡse dijo a si misma, preparándose mentalmente para lo que iba a hacer.

Para su suerte el callejón estaba vacío, así que pudo libremente desvestirse en medio de la calle sin miedo a que alguien lo viera. Una vez estuvo completamente desnuda cambió a su forma animal, la cual le serviría para su maravilloso plan.

Comenzó a caminar rápidamente, siguiendo el aroma de la pelinaranja con ayuda de su nariz desarrollada. Pudo averiguar que la pelinaranja no estaba a más de dos cuadras del lugar indicado, aceleró el paso rápidamente. Al ver a la pelinaranja corrió más rápido al puesto enfrente de donde estaba parado.

Lisa sinceramente no pensaba las cosas antes de hacerlas, por eso mismo terminó robando la bolsa con carne cruda que estaba sobre el mostrador antes de salir corriendo otra vez.

La pelinaranja soltó un grito de terror cuando el animal se llevó lo que recién había comprado, alzando las manos.

ㅡ¡Alguien agarrelo! ¡Yo sé donde vive! ㅡgritó el de ojos verdes, recordando que no era un animal salvaje, era más bien su novioㅡ¡Ah no, sí es cierto! ¡Yo no sé donde vive!

Dejó el dinero en el mostrador antes de comenzar a correr detrás del animal negro, dejando atrás a las personas asustadas por lo sucedido anteriormente. Luego de correr por algo de tiempo se detuvo al ver una larga y esponjosa cola en el callejón, suspiró aliviada al saber que al menos Lisa estaba bien.

ㅡLadrale a la mano. ㅡfue lo único que dijo, mostrándole su mano a la loba negra antes de comenzar a caminar con las bolsas del supermercado en sus brazos.

"Ya extrañaba a la chica quejona, como me gusta que seas quejona." Pensó la loba, sooltando un suspiro antes de comenzar a caminar a su lado.

Jennie siguió el camino sin decir nada, solo fijándose cada cierto tiempo que el animal siguiera detrás de ella.

"Jennie eres muy mandona, pero me gusta que me des órdenes." Soltó un bajo ronroneo, batiendo rápidamente su cabeza. "No, digo no, eso jamás."

Al llegar su hogar la pelinaranja puso la carne al refrigerador luego de lavarla, no le dirigió la palabra a la pelinegra y canceló el almuerzo.

"¿Jugamos al silencio en la sala?" Ladeó la cabeza.

ㅡSi intentas decir algo es mejor que te calles, no te entiendo y no quiero hablar ahora.

"Ah." 

Secret Alpha | Jenlisa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora