Jennie solo quería adoptar a una cachorra cuando se independizó, no se imaginó lo que pasaría luego de adoptar.
Adaptación autorizada. Todos los créditos a harryomega
Jennie había decidido dejar al animal en su lugar todo el día.
No quería salir a verla o decirle algo.
¿Y si se la comía? No sabía que pensar ahora, por lo que le escribió a Miyeon para pedirle posada en su casa, así no estaría en peligro y podía llamar a control animal.
Kim Jennie: oye Miyeon, puedo ir a tu casa hoy?? por favor, necesito un favor
Cho Miyeon: claro que puedes paso por ti??
Kim Jennie: sisi por favor
Cho Miyeon: está bien, paso por ti en diez minutos.
La pelinaranja al leer el mensaje tomó rápidamente un abrigo para salir de su departamento rápidamente.
ㅡEscucha voy a salir y volveré por la tarde ¿Si? No hagas destrozos por favor. ㅡhabló hacia la loba, caminando lentamente hacia la puerta.
"¿A dónde vas? ¡Llévame!" La loba se puso rápidamente de pie, corriendo hasta la chica.
ㅡNo puedo llevarte ahora así que serás una buena chica y te quedarás aquí, te dejé croquetas en tu plato perruno. ㅡasintió la menor, acariciando la cabeza de su mascotaㅡ Portate bien, saldremos por la noche ¿Mhm?
La loba resopló, caminando nuevamente a su nido.
Jennie aprovechó eso para salir rápidamente del lugar, dejando su teléfono sobre el sofá.
Rápidamente bajó por las escaleras hasta el último piso, en donde se encontraba la rubia esperándola en auto para irse a su casa.
ㅡHola Miyeon, gracias por venir por mi. ㅡhabló la menor, dejando un beso en la mejilla de la ojicafeㅡ Pasó algo que no vas a creer, es que soy una ciega.
La contraria rió bajo, dejándola pasar a su autoㅡ Cuéntame ¿Qué sucedió? ¿Encontraste a un alien en tu casa?
ㅡPeor. ㅡasintió Jennie, poniéndose rápidamente el cinturón de seguridad por si acasoㅡ Es que Lisa estaba enferma y ensució todo el departamento así que la llevé al veterinario, todo normal hasta ese punto pero cuando me dijeron que estaba bien me dijeron algo más, ¡Lisa es una loba negra!
ㅡCon razón era demasiado grande para ser un perro, amiga le faltaban como cinco centímetros para ser de tu tamaño. ㅡMiyeon rió bajo, palmeando las mejillas de la menorㅡ Que mascota tan distinta, deberías hacer como la gente que sube sus historias a Internet.
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Lisa calculó cuando la pelinaranja se fue, olfateando el aire para localizarla y pudo saber que estaba a unas cuadras lejos junto a Miyeon.
Su olfato iba a ser muy útil para alertarla de la presencia de la menor cuando esta volviera a casa.
Corrió rápidamente al sofá, haciendo caer el teléfono de la humana con ayuda de su hocico.
Y con ayuda de sus patas buscó en los contactos "Minnie", era costoso hacer ese trabajo con sus patas peludas.
"Joder que feas patas y no tengo pulgares ¡Agg! Los envidio humanos" soltó un bufido, con ayuda ahora de su húmeda nariz le picó al botón rojo para llamar y rápidamente comenzó a sonar.
ㅡ¿Hola? ㅡpreguntó Minnie, riendo al ver a la lobaㅡ Lisa devuelvele su teléfono a Jennie por favor, no podemos hablar ahora.
"¡Imbécil!" La loba ladró, tratando de hablar con la contraria.
ㅡ¿Estás sóla? Ladra dos veces y será si, ladra una vez y será no. ㅡdijo en voz baja, tratando de escuchar los pasos de Jennie pero al parecer no estaba.
El animal ladró dos veces, batiendo felizmente su cola.
ㅡEstá bien, estás sóla. ㅡasintió la humana, soltando un suspiroㅡ Ve a cambiarte de forma, no te entiendo por ladridos. ㅡla ojimiel rió bajo, batiendo su cabeza.
"Pues deberías aprender, tonta" Soltó otro bufido, corriendo hasta el baño para cambiar su forma animal a una humana.
Minutos después regresó a la llamada, envuelta en un suéter de la pelinaranja que le quedaba un poco apretado.
ㅡJoder, ya estoy lista. ㅡhabló la pelinegra de nuevo, tomando el celular en sus manosㅡCreo que estamos en problemas.
ㅡ¿Estamos? ㅡrespondió Minnie, alzando las cejasㅡ Estás en problemas, pero aquí tienes a tu amiga la pendeja que te apoya en todo.
ㅡComo sea, necesito salir de aquí ahora. ㅡhizo una mueca, mirando hacia varios ladosㅡ Pero las croquetas son tan deliciosas.
ㅡEscucha ya sé que vamos a hacer ¿Si? Mañana iré a casa de Jennie por ti, y lo mejor es que le digas lo que realmente eres, pudiste morir ¡Idiota!
La pelinegra rodó los ojos por el regaño, porque vamos. ¡Su idea era genial!
ㅡEstá bien, mañana hablaré con Jennie y espero que no me rechace. ㅡmurmuró la mayor, soltando un suspiro.
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