**Capítulo 10: Ecos del Corazón y Sombras del Pasado**

4 3 0
                                    

❉Los días pasaban tan rápido como las hojas que caen en otoño, y con ellos, el muro que alguna vez dividió a Jungkook y a ti se desmoronaba. Ahora, eran novios, pero lo más sorprendente era lo naturales que se sentían sus interacciones. Ambos habían decidido dejar atrás sus roles de “el bully y la víctima”, para simplemente ser dos personas que amaban estar juntas.

Jungkook, famoso por su popularidad y su destreza en las artes marciales y el canto, comenzó a mostrarte cada vez más partes de él mismo que pocos llegaban a conocer. Empezó a abrirse, contándote sobre sus sueños de convertirse en un artista reconocido y cómo había sufrido en silencio, sintiéndose atrapado entre la expectativa de los demás y sus propios miedos al fracaso. En esos momentos, sus vulnerabilidades se alineaban con las tuyas, creando un refugio donde ambos podían mostrarse sin máscaras.

Sus citas eran sencillas, pero significativas. A menudo caminaban por la ciudad con las manos entrelazadas, disfrutando de la presencia del otro sin necesidad de palabras, o se escapaban al parque donde todo comenzó, recordando cada detalle de lo que los unió. En casa, a veces te sorprendía con mensajes escondidos entre los cuadernos o te hacía canciones cortas y despreocupadas a la guitarra, donde las palabras “te quiero” y “me haces feliz” nunca dejaban de aparecer.

Todo decía que estaban en paz, pero la vida tiene la forma astuta de lanzarte dificultades cuando menos lo esperas. Así fue como una mañana normal en la escuela dio un inesperado giro. Fue entonces cuando él apareció, un chico nuevo....entre comillas, ya que Jimin había sido amigo de Kook en el pasado, pero se mudó así que ahora regresó a su tierra natal, que, desde el principio, llamó la atención. Tenía una estatura prominente, cabello rubio y ojos que parecían ocultar secretos profundos. Su nombre era Jimin.

Los rumores decían que había sido transferido desde otra ciudad, aunque nadie sabía bien de dónde. Era amigable y sociable, pero había algo en su mirada que capturaba la atención. Notaste, en los primeros días, cómo te observaba. Al principio fue sutil, pero luego esas miradas se volvieron más largas, incluso a veces podrías jurar que te sonreía con cierta sensualidad velada.

No podrías haber anticipado el efecto que Jimin tendría en tu vida, pero Jungkook lo entendió de inmediato, aunque trató de no mostrarlo. Sabía, lo sabía muy bien, que Jimin representaba una amenaza, sobre todo porque él era un tipo tan carismático y confiado, un imán para todos.

Una tarde, mientras esperabas que Jungkook terminara su práctica de artes marciales para salir juntos, un susurro familiar te llamó la atención. “Hey, estás sola,” la voz de Jimin atravesó el pasillo vacío.

“Ah, sí, solo estoy esperando a... alguien”, contestaste, tratándote de sonar neutral. A pesar de esto, tu tono denotaba un poco de inquietud. Jimin se acercó más de lo que esperabas, con esa sonrisa que parecía guardar tantas promesas.

“Sabes, he notado que pasas mucho tiempo con Jungkook. Pero, si alguna vez quisieras cambiar de compañía, yo estaría encantado... de mostrarte un mundo diferente,” ofreció, sus palabras cargadas con un peso que no se podía ignorar.

Tú te sorprendiste, pero antes de que pudieras reaccionar, sentiste una mano en tu brazo. Giraste para encontrar a Jungkook, su rostro lleno de una tensión contenida. “¿Algo que no debería saber?” preguntó, manteniendo la voz baja, pero su mirada clavada en Jimin.

“¿Acaso no puedo hablar con ella?” Jimin replicó, con una sonrisa que lejos de calmar la situación parecía desafiar a Jungkook.

Aquella noche más tarde, mientras caminabas con Jungkook, trataste de abordar el tema, notando que había algo en sus expresiones que delataba su preocupación. “Jungkook, sobre Jimin...”

~Jungkook~ 𝐵𝑎𝑑 𝐵𝑜𝑦 🐇 ❥Donde viven las historias. Descúbrelo ahora