four.

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Janette Povs.

—Esto fue un error. —Menciono el hombre negando. A simple vista se podía notar lo asustado que estaba.

—Te dije que nos sacaría de esto. —Dijo la mujer.

—¡No! ¡Me quiere muerto!

—¡Las quiere más a ellas! —Nos señaló, sin embargo, yo no sabía para que el tal Elijah me quería.

—¡Si tú se las das tendrá piedad, pero yo nesesito irme de aquí!

—¿Que es lo que somos? —Pregunto la mujer.

—Somos familia, por siempre.

Esa frase... Me agarre la cabeza cuando el dolor comenzó. Desde que desperté a comenzado este ciclo.

Elena y yo nos miramos levemente. Su mirada era distinta a la de Katerine, cuando te llegabas a fijar bien, la diferencia en la apariencia de las dos variaba muy poco.

A los minutos, un hombre con un traje elegante apareció en el segundo piso, el como intimidada no se podía explicar.

"Mi hermano suele ser muy formal y con cosas de moral, algo así."

Otra vez. Aquella voz extraña despertaba en mi sentimientos que jamás había sentido y un terrible dolor de cabeza.

De inmediato y sin darme cuenta el hombre estaba frente mío.

—¿Están seguros que es ella? —Pregunto Elijah mirándome fijamente.

—Si. Según nuestros contactos busca a alguien con el mismo nombre y apariencia.

Estuvieron hablando sobre algo de perdón con el otro hombre que estaba notablemente, al instante le corto la cabeza.

Odio la sangre. No me gusta verla. Las ganas de vomitar se presentaron y me lleve una mano a la boca, al parecer Elena se dió cuenta y me sostuvo. La vista era simplemente desagradable.

—Vengan.

—¿Y la piedra de luna? —Si Elena no le tenía miedo a la muerte yo si. Se cree inmortal o que, al instante Elijah la miro seriamente.

—¿Que sabes de la piedra de luna?

—Se dónde está.

—¿Y ahora?

No alcanze a escuchar lo que seguía de la conversación cuando un zumbido me invadió. Y solo logré ver cómo Elijah le arrancaba el collar a Elena.

Unos ruidos se escucharon y el solo pregunto que fue eso.

—¿Quien más está en la casa?

El nos agarro de los brazos y arrastrandonos, yo lo seguí en silencio, no valia la pena refutar nada si no tenia plan.

—¡Muevanse!

Nos llevó a la entrada de la mansión y unas sombras aparecieron.

Alguien me tomo inmediatamente, el miedo creció en mi interior y me intente zafar con todo lo que pude. En frente de nosotras estaba Damon. Dai. Cuando iba a abrir la boca me hizo una seña de silencio.

—No se escondan. Si creen que pueden venderme están equivocados. No pueden vencerme, ¿Oyeron eso?

Ver a Dai frente mío era irreal, después de creerlo muerto, ¿Porque no me busco?

—O rodarán cabezas.

—Me iré contigo.

Cuando me tense en mi puesto, Dai agarro mi mano reiterando la seña de silencio.

—No mates a mis amigos, ellos me querian ayudar.

—¿Que creíste que ibas a hacer?

Una explosión se escucha por todo el lugar, diferentes ruidos se escuchan y Dai sale.

La mujer de cabello corto sale, por lo que hace que yo también salga, al instante desaparece como el viento y mis dos hermanos miran a Elena primero. Luego a mi.

—¿J-Jane? —Murmura Stef mirándome atónito, cómo si no creyera que estoy aquí.

—Jane.

Salí corriendo hacia ellos dos, lanzandomeles mientras les daba un abrazo, como cuando era niña.

—Estan aquí... —Lagrimas se escaparon de mis ojos sin poder creer que estuvieran aquí.

—¿Cómo? —Pregunto Stefan.

—Tampoco se. —Le respondí llorando.

En cambio Damon desvío la mirada, oh, no. El sabía que había pasado, siempre que estaba así de raro es porque sabía algo o hizo algo.

—Damon. ¿Cómo Jane está viva? —Stefan lo miro seriamente.

—Ammm.

—Damon. —Murmure yo en voz baja rogándole que nos contara.

—¿Desde cuándo? ¡DIMELO DAMON!

—Fue cuando Emily murió.

Parpadee levemente hasta que los recuerdo me volvieron a invadir.

1864 Mystic Falls

El funeral de mis hermanos se celebro casi en el mismo día, como si fuera de paso. A padre le importo poco y yo aún no lo podía creer.

Cómo un padre tan despiadado no lloraba la perdida de sus hijos, sus progenitores.

—Jane. Ven aquí, te quiero presentar a alguien.

Me acerque tímidamente, pues aún seguía y seguiría dolida por la muerte de mis hermanos.

—Te presento a mi hija. Jane Salvatore, el señor Gilbert te quería conocer, Jane.

Le sonreí incómoda mientras apretujaba su mano. Apenas termine aquí iría a hablar con Emily.

Papá me despidió y pude salir, aunque me detuve.

—¿Que tal te parece mi hija?

—Es muy bonita debo admitir.

—Pues, después de lo que sucedió con Pearl, mi hija sería una gran esposa para usted. —Alento mi padre y yo solo me quedé helada en el lugar. Ah, el día más temido llegó, lágrimas escurrieron mientras salía corriendo hacia la casa de Emily.

Me querian vender. Yo no quiero casarme. Quiero enamorarme. Alguien que me dobla la edad me quiere como esposa y yo no podría hacer nada, las únicas dos personas que me defendían, se han ido.

Y quedé sola.

Toque la puerta de la casa de Emily desesperadamente, cuando ella me abrío se vio sorprendida.

—Señorita Jane.

—Emily. Nesesito tu ayuda.

La única opción que se me ocurrió hasta ese momento fue escapar. Huir de esta vida.

—¿Que sucedió?

—Mi padre, Él me quiere vender como esposa para el señor Gilbert. Y yo no quiero. Emily, quiero enamorarme, vivir mi vida, quería que mis hermanos me vieran casarme con el amor de mi vida pero ellos ya no están. Nesesito que me ayudes a huir de todo esto.

—¿Estás segura?

—Si.

—Bien, entra aquí y espérame. —Asenti mientras le hacía caso.

Cuando entro dijo algo de un hechizo de protección para que me fuera bien. El sueño me comenzó a invadir y mi cuerpo se comenzó a sentir cansado, no me dí cuenta cuando cerré los ojos que caí en un sueño profundo.

—Ya está listo, Damon.

Aquí aparezco por primera y rara vez. Les vengo a decir que me pueden ir comentando sus teorías que tienen. Me da mucha curiosidad escucharlos y darles una que otra pista, además en el tiktok @tdvlia hay muchas pistas que estoy dejando.

Los leo.


𝐒𝐎𝐔𝐋 ▎ 𝗞𝗹𝗮𝘂𝘀 𝗠𝗶𝗸𝗮𝗲𝗹𝘀𝗼𝗻Donde viven las historias. Descúbrelo ahora