Como nos enamoramos [DRARRY]

Capítulo 12

Narra Harry:

Desde aquella noche, Draco y yo nos volvimos más cercanos. Empezamos a ir a las clases juntos, por una vez la vida me sonreía. De hecho, me daba una gran sonrisa, ya que desde ese viernes, Estella no volvió a aparecer. No sabemos qué sucedió con ella. Pero la prefiero lejos de mi Draco.

Además de disculparse con mis sus amigos, ahora también los suyos, me pidió que lo acompañara a la cabaña de Hagrid, objetando que le debía una disculpa por haberse portado como un niñato con él. Disculpas que Rubeus aceptó gustoso. Además, de preguntarle algo que no estoy muy seguro, pues salió de la cabaña rojo como un tomate. Yo estaba saludando a Buckbeak cuando eso sucedió.

Le quise preguntó pero este simplemente la esquivo, ambos nos despedimos de Hagrid y nos dirigimos hacia las clases, que empezaban en menos de veinte minutos.

Llegamos hacia la clase Herbología, acercándonos a los otros que ya se encontraban allí.

Sinceramente no me llamaba mucho la atención esta clase, pero no podía dejar de ver a Draco, se le veía entusiasmado, se reía. Y Oh por Merlín, cuando se tocaba el cabello, tan sedoso..tan lindo. Sentí como un calor subía a mis mejillas, y una boba sonrisa se cruzó en mis labios. Hemrione me miró, me preguntó que qué me pasaba, ya que estaba todo rojo, luego miró hacia donde yo estaba haciéndolo, y lo entendió. Levantó la cejas y las bajo repetidas veces, haciéndome sonrojar más aún.

El resto de la clase siguió igual de aburrida.

Después de que esta clase terminará nos tocó adivinación. Hermione odiaba esta clase, y yo disfrutaba como se enfurruñaba con la maestra, las caras que ponían eran tan graciosas.

Aunque estas clases eran también tediosas, más por qué teníamos tres horas seguidas, se podían soportar.

Las primera hora dabamos sobre teoría, y las siguientes dos horas la poníamos en práctica. Si todo salía bien, y terminábamos antes de tiempo nos dejaba salir antes, la Profesora Trelawney era muy considerada estos días, sabía que tres horas de clase se nos hacían, literalmente, bola. Así que sus lecciones se acortaban a dos horas y media, dependiendo.

Gracias a Merlín, terminamos al cabo de dos horas y cuarto. Nos dió el resto de clase libre y nos dejó salir hacia el patio cercano, o hacia la sala común, este día era una excepción, ya que nunca nos deja salir del aula, según ella todavía "somos su responsabilidad", cosa que entiendo. Nos dejó irnos porque tenía unos asuntos pendientes y eran urgentes.

Hermione, Ron y yo nos dirigimos al patio, eran cerca de las una y media, por lo que dentro de poco tendríamos que dirigirnos hacia el Gran comedor.

En el camino se nos unieron las serpientes. Blaise y yo estábamos comentando algunas cosas sobre los partidos de Quidditch; Ron y Hermione hablaban sobre tarea; por último Pans y Draco hablaban de sus cosas que, lamentablemente, no pude escuchar.

Llegamos y el patio estaba desierto, cosa que nos alegró de cierta manera. También era difícil que haya mucha gente, ya que la mayoría estaban dando clase.
Nos sentamos cerca de un gran árbol, que se encontraba en la esquina derecha del patio.

Sinceramente, estas últimas semanas he estado conociendo mejor a Zabini y a Parkinson. Nunca pensé en que pudiéramos hablar cordialmente, sin insultos de por medio. Pero al final, si pudimos, y la verdad me empezé a llevar muy bien con ellos. Casi que habló más con ellos que con los chicos, bueno...tampoco tanto jeje.

Draco y Zaza se encontraban ahora hablando y riendo de vez en cuando. Mientras que Pansy, Ron y Hermione seguían hablando sobre la tarea de la Señorita Trelawney.

Yo me encontra, pensando en la vida, nunca mejor dicho. Mirando los pájaros volar y cantar una fabulosa melodía; las hojas mientras caían del árbol lentamente; las hormiguitas que, algunas, subían sobre mi mano cuando se las acercaba, o como otras salían corriendo.

—Tu te vas a llamar Flick- hablé en mi mundo, embobado con la pequeña hormiga que estaba en la palma de mi mano.

Sentí unas risitas a mi izquierda, giré la cabeza confundido, ví a Blaise y Draco carcajeando, supongo que era por lo de la hormiga. Los miré frunciendo el ceño.

—¿En serio le estás poniendo nombre a una hormiga?- preguntó Blaise riendo, yo solo asentí, a lo que este se sujetó la barriga de reír tanto.

—No es una hormiga, es la Hormiga Flick- respondí poniendo cara arrogante.

Draco dejo de reírse y dejó que una de las hormigas se le subiera a la palma de la mano.

—Vale tu te vas a llamar...- pensó viendo detenidamente a la hormiga- ¡AHH!..- gritó, a lo que todos le miramos- me ha mordido la..la..- miró enfurecido a la hormiga.

Yo acerqué la mano a la hormiga, dejando que se suba. Esta en cambio no me mordió.

—Mordiscos- dijé sonriendo, todos me miraron más extrañados- Se va a llamar Mordiscos.-

—¿Por qué a tí no te mordió?- preguntó el rubio enfadado- ¿Quién eres Blancanieves?, que habrás con los animales- pregunté a lo que me reí.

—No estúpido, yo solo soy buena persona, y no casi la aplastó con la mano- respondí algo sarcástico.

De hay salió una pelea amistosa, de la que ambos quedamos riéndonos por las tonterias que dijimos.

Seguimos observando a las hormiguitas, y hablando de ellas, mientras que los otros cuatro socializados entre sí.

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Unos veinte minutos después sonó la campana, dando a entender que era de comer. Ron agradeció a Merlín, ya que ya estaba muerto de hambre.

Lamentablemente tuve que dejar a Flick y a Mordiscos allí. Draco y yo hicimos una dramática despedida, a lo que los otros nos miraban expectantes y asombrados.

No sabía que él y yo tendríamos tanto en común, el dramatismo, la edad, los dos somos magos, ¿Qué más puedo pedir? Ah, si..que estos estúpidos sentimientos que tengo hacia Draco se acaben de una vez.