𝐵𝐸𝐴𝑇 𝐼𝑇!! 𝓑𝓮𝓪𝓽 𝓜𝓮...

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Realmente me sentía en una gran duda, no podía evitar recordar ese día que hice el amor con Naoto, no sólo lo que hicimos, también la reacción de Hinata, todo se sentía tan perfecto, pero no lo entendía, Takemichi había sido mi primera vez, ¿por qué cuando lo hice con él fue algo tan normal pero con Naoto fue algo tan especial?

No podía sacar esos pensamientos de mi mente, todas las tardes cuando veía la hora recordaba lo que había pasado en la habitación de Naoto, 4:20pm era una hora específica que siempre recordaba a esa hora salí de la habitación de Naoto, aveces agradecía haber visto el reloj de la sala, otras veces me arrepiento al no poder centrarme en mis clases o cuando me escapaba con la pandilla.
Se supone que solo estaría con Naoto para tener mi venganza contra Hinata, pero ahora me sentía mal todo el tiempo que pasaba lejos de él, recordaba la conversación que había tenido el con William; el recordar que yo precia ser la única persona importante para Naoto me hacia sentir realmente bien y sabía a la perfección que Hinata se sentía completamente mal, era fácil de notar por el rostro que hacía cuando Naoto me defendía de ella en las veces que trataba de humillarme. Mi vida tuvo un gran cambio, uno del cual no me arrepentía pero del cuál siempre tenía dudas.

Pasar todo el tiempo con la pandilla o con Naoto se había vuelto una guerra de todos los días, si iba con la pandilla me divertía pero extrañaba a Naoto, en cambio, si estaba con Naoto me sentía amaba pero algo aburrida, sentía que me faltaba sentir algo de adrenalina que solo sentía con la pandilla... en concreto, que solo sentía con Takemichi.

「Si me van a regañar por esto, al menos quiero tener un buen recuerdo」

Pensaba lo mismo cada vez que me escapaba de la escuela o hacia algo con Takemichi. Hoy no era diferente, la música sonando tan alto como se podía y las personas del alrededor bailando o fumando por la casa.

—Souya—escuche la voz de Draken detrás de mi, haciendo que volteara a mirarlo— no creí que vinieras, Emma no vino.

—Lo sé, Takemichi fue quien me invito y me trajo—mis palabras perecieron hacerlo fruncir el ceño levemente—¿por qué? Eso solo otra fiesta más.

—No, por si no lo has notado, la mayoría de la pandilla que está aquí son adultos, los adolescentes se supone que quedarían fuera de esto, incluyendote.

Tenía razón, apenas y había visto chicos de mi edad rondar por la fiesta y también me parecía raro no ver a Emma por ningún lado de la fiesta.

—Yo no sabía de eso, Takemichi simplemente fue a buscarme a mi casa y ya.

Draken suspiro mientras sostenía el puente de su nariz con dos dedos, miro alrededor y frunció más su ceño.