Guys Dead Monster

Capitulo 6

ERNIEN

Estaba en una gigantesca casa al otro lado de la ciudad, era aproximadamente del mismo tamaño de la casa en la que se encuentra la central.

-Savage, ¿Me escuchas? -Pregunte activando el transmisor.

-Muy bien, Tenshi -Confirmo Gregory -. ¿Ya llegaste al blanco? -Interrogo serio.

-Ya.

-Okay, ya sabes que hacer -Dijo a manera de orden. Me acerque al monitor del timbre, el cual tenía una bocina y arriba una cámara, para después ponerle encima un pequeño círculo metálico con unas pequeñas salidas en punta abajo.

-Listo -Conteste sonriendo. Pasaron unos segundos hasta que Gregory volvió a hablar.

-Oficialmente has sido borrado de las cámaras de seguridad y tienes acceso total -Dijo mientras un sonido de tronido de dedos se hacía escuchar.

Con una patada logre romper la cerradura de la reja metálica y comencé a caminar por el inmenso jardín, pero rápido escuche como un grupo de perros corría, creo hacia mí, con gruñidos muy feroces.

Los perros cada vez se acercaban más, eran aproximadamente cinco, tal vez seis. Me detuve, era el momento. Los perros se escuchaban a unos diez metros.

-¿Trajiste algo por si esto llegaba a pasar? –Interrogó Roderick con una sonrisa. Yo únicamente sonreí triunfantemente a manera de respuesta -. Con eso me lo has dicho todo.

Ahora se escuchaban más cerca. Levanté mi talón izquierdo y de una correa que tenía ahí saque una de las pequeñas armas que traigo en todo el cuerpo.

Voltee y en un movimiento rápido con el filo del cuchillo militar le corte la cabeza al perro que se me había aventado. La quijada ahora le colgaba al pobre perro. La sangre me había manchado el brazo y parte de la camisa. Los otros perros seguían en posición de ataque.

-Tenshi, no te desvíes de la misión. Relájate y deja a los perros en paz. No queremos echar esta oportunidad a la basura –Grito Gregory de manera seria

-Gregory tiene razón –Atajó Chris -. Deja a los pobres perros y entra a la casa. No ganaras nada.

Ambos tenían la razón. Lo mejor sería dejar a los perros en paz. No sería conveniente llamar mucho la atención, tenemos suficiente con que una chica sepa lo que pasa.

-¿Algún plan para deshacerme de los peludos? –Pregunte estando en posición de pelea.

-Creo que sí, espera –El silencio se mantuvo por unos segundos, los perros todavía se veían molestos, pero creo que mientras no haga ningún movimiento brusco no harán nada -. Listo, ponte el auricular del otro oído y ponlos en altavoz.

-No, puedo. Si lo hago los perros atacaran –Respondí.

-Hazlo, esos animales estarán en el suelo antes de que te toque –Dijo de manera segura. Hice lo que me dijo y cuando ya me di cuenta ya se me iban a atacar.

-Listo –Dije preparándome para ignorar a Chris y Gregory, pero cuando me di cuenta los perros ya estaban inconscientes en el suelo -. ¿Qué mierda paso aquí?

-Mejor no preguntes –Corto Gregory de manera borde.

Seguí su recomendación y de un solo disparo silenciado, obviamente con silenciador, abrí la puerta de la casa.

Entre con la Five Seven en mano, esperando que en cualquier momento algo sucediera, mas todo siguió calmado.

-Lugares probables en los que encuentre algo –Pedí a Gregory.

-Sótano, ático, estudio, habitación matrimonial y cobertizo –Contesto inmediatamente.

Rápido busque una puerta que llevara al sótano, la cual encontré bajo las escaleras.

El sótano era sorprendentemente... oscuro, o al menos lo era hasta que prendí la luz, ahí si me sorprendí, no porque tuviera algo, sino porque era excesivamente grande.

Revise detenidamente y no encontré nada, hasta al maldito Santa Claus revise, pero igualmente nada.

Así me paso igualmente con el ático y el cobertizo, pero las cosas cambiaron cuando entre al estudio.

Revisando entre los papeles encontré unas ubicaciones que podrían servir por el momento, seguí revisando y nada. Al menos de aquí había conseguido algo.

Entre a la habitación matrimonial ubicada en el otro lado de la casa. Estaba finamente decorada, en las paredes había varios cuadros, pero tan solo uno de la familia completa. La familia de Melanie.

Baje cada cuadro para ver si no había ningún papel detrás de ellos, pero no había ni eso ni una caja fuerte. Puede que encuentre algo si busco en el tocador. Lo moví y lo encontré y sonido hueco, lo que significaba que había algo, quite el ligero pedazo de pared y encontré una caja fuerte.

-Bingo –Susurre.

-Hey, idiota –Llamo mi atención Dominic -, no tienes la contraseña.

-Eso crees tú –Dije triunfante -. Gregory, posibles combinaciones de caja fuerte.

-Mejor preocúpate por otra cosa, diez hombres acaban de llegar a la casa y se han dado cuenta del allanamiento –Exclamó seriamente –No hay rutas de escape –Atajo antes de que preguntara por alguna -. Tendrás que pelear. Todos traen Desert-Eagles.

-Gracias –Dije armándome con el revolver y la Five Seven.

Salí de cuarto con cautela y troté por el pasillo, me asome por el pasillo y encontré a un hombre dándome la espalda.

-No voltees o mueres –Dije apuntándole a la cabeza. Él, en un movimiento estúpido, se intentó voltear, pero antes de que pudiera le dispare en la cabeza.

-Vienen más como refuerzo –Informo Gregory -. Sera mejor que busques una forma rápida de escapar.

-Hare una cosa mejor –Conteste sonriente.

-Ya comenzó la matanza –Dijeron Roderick, Dominic, Lila, Chris y Angel al unísono.