one piece alianza en la oscuridad (remake)

3d2y un mesaje para un medico y musico

El dúo regresó al comedor, donde Bonney ya las esperaba, mirándolas fijamente con una expresión seria.

-Hina, te noto molesta -comentó Bonney con una leve sonrisa desafiante.

-¿Molesta? No, para nada -respondió Hina, levantando una ceja, aunque su tono denotaba cierta incomodidad.

Bonney respiró hondo y se dirigió a Tashigi. -Necesito decirte algo, Tashigi.

Tashigi la miró con curiosidad. -No me digas... ¿Eras la matriarca de la familia?

-Sí, lo soy -afirmó Bonney con un tono firme-. Pero la segunda matriarca es la Princesa Serpiente, Hancock.

Hancock, quien hasta entonces había estado tranquila, intervino con serenidad. -Por mí no hay problema, siempre y cuando lo amen de verdad, son bienvenidas.

Aurora asintió con aprobación. -Por mí también está bien. Bonney, deberías ser menos agresiva. Al final, todas están aquí por mi hijo.

Bonney bufó, cruzándose de brazos. -Sí, pero... bueno, les espera una noche agitada a las dos -dijo con una sonrisa pícara.

Hina y Tashigi se sonrojaron intensamente, al igual que varios en la mesa, al captar el significado detrás de las palabras de Bonney. La tensión en el aire era palpable, pero también había una especie de aceptación tácita.

-Es la verdad -añadió Bonney, encogiéndose de hombros-. No podemos permitir que el clan se debilite o muera.

Todos entendieron que el clan, el lazo que se estaba formando alrededor de Luffy y las mujeres que lo rodeaban, estaba destinado a ser fuerte y unido, enfrentando juntos cualquier desafío que pudiera venir.

El desayuno transcurrió con normalidad hasta que Buggy, Mr. 3 y Bonclay irrumpieron en el comedor, agitados y visiblemente preocupados.

-, Buggy, Bon-chan, ¿qué les pasó? -preguntó Luffy, extrañado al verlos tan alterados.

-¡Capitán, tenemos que hablar! -exclamó Buggy, todavía recuperando el aliento.

-¡Sombrecito! ¡Causaste un gran problema! -agregó Bonclay, casi dramáticamente.

Hina, que había estado escuchando, intervino con una ligera sonrisa. -¿Qué problema causó mi querido?

Buggy miró con incredulidad a Luffy. -Capitán, no me digas que... ¿Hina también será tu esposa?

Luffy se rió a carcajadas. -¡Jajaja! Y no solo ella, Tashigi también.

Los tres se miraron entre sí, sorprendidos, antes de que Buggy se dejara caer al suelo de rodillas, exagerando como siempre. -¡Sin duda, has hecho una buena elección al seguirte, pero en serio debemos hablar!

Luffy levantó una ceja, divertido. -Habla, Buggy. Aquí todos estamos en confianza... bueno, tal vez ellas no -añadió, señalando a Sora, Bellmere y Olivia, que estaban al fondo.

Aurora frunció el ceño, captando el tono de su hijo. -Luffy, ¿por qué no confías en ellas?

Luffy miró a su madre directamente. -Madre, madre... los hijos se parecen a sus padres. En cualquier momento, ellas podrían apuñalarme por la espalda, como las ratas de sus hijos.

La tensión en la sala creció rápidamente. Sora, Bellmere y Olivia miraron a Luffy con miradas afiladas, pero no dijeron nada de inmediato. Era evidente que las palabras de Luffy les habían afectado, y la mención de sus hijos solo añadió sal a la herida.

Buggy tragó saliva, sintiendo el aire volverse más pesado. -C-capitán... Tal vez este no sea el mejor momento para...

Aurora levantó una mano, interrumpiendo a Buggy. -Luffy, esas palabras pueden tener consecuencias. Recuerda que no todos aquí comparten el mismo pasado ni las mismas lealtades.