one piece alianza en la oscuridad (remake)

la guerra empieza

Luffy miró a todos en Marineford con una mirada que solo podía describirse como implacable. Sus manos aún estaban cubiertas de la sangre de los guardias de Impel Down, un testimonio de la destrucción que había dejado a su paso. Los marines y piratas en la plaza central sintieron un escalofrío recorrer sus espinas al enfrentarse a esta nueva versión del joven pirata.

—Hola, Ace —dijo Luffy con una voz sorprendentemente calmada—. Vengo a rescatarte.

Ace, encadenado en la plataforma de ejecución, levantó la vista hacia su hermano menor. A pesar de la situación, una mezcla de alivio y preocupación llenó su corazón.

—Luffy, no... Esta es mi pelea. No pienso involucrarte —respondió Ace, tratando de disuadir a su hermano de lo que estaba a punto de hacer.

Pero Luffy no tenía intención de retroceder. Su determinación era palpable, y el aura amenazante que emanaba de él solo aumentaba. Sus ojos, encendidos por el poder de su herencia, se enfocaron en su hermano.

—si algunos de ustedes marines lastimó ami hermano, personalmente le voy a arrancar los ojos y se los meteré por el pescueso para que vean mis garras abriles las entrañas—dijo, mientras se tronaba los dedos con un sonido que resonó en todo Marineford, como un preludio a la tormenta que estaba a punto de desatar.

De repente, a su lado apareció otra figura que causó aún más pavor entre los presentes: Marshall D. Teach, conocido como Barbanegra. Con su risa característica, llenó el aire con una sensación de maldad pura.

—¡Zahaha! Y créanle, lo hará por él —dijo Teach, disfrutando del terror que su presencia causaba.

La aparición de Teach al lado de Luffy cambió por completo el equilibrio de la batalla. Ahora no solo se trataba de enfrentarse a Shirohige y Aurora, sino que también tenían que luchar contra dos de los piratas más peligrosos dela geracion de los supernovas.

El ambiente en Marineford se volvió abrumadoramente tenso. La mera presencia de Luffy y Teach, junto a Shirohige y Aurora, hizo que el temor se extendiera como un manto sobre todos los presentes. Los marines, que hasta ahora habían creído tener la ventaja, empezaron a darse cuenta de que el combate que se avecinaba no sería como ningún otro. Ahora, estaban cara a cara con una fuerza que podría destruir todo a su paso.

Luffy comenzó a formar una esfera de energía en su boca, una manifestación pura del poder destructivo que ahora controlaba. Los marines y piratas observaban con horror cómo esa energía crecía y se intensificaba, amenazando con consumir todo a su alrededor.

—Teach, ¿lo hacemos? —preguntó Luffy con una voz que parecía resonar en todos los rincones de Marineford.

Teach sonrió, mostrando sus dientes afilados mientras su propia oscuridad comenzaba a envolver la esfera de energía de Luffy.

—Sí, hagámoslo —respondió, su risa resonando con malicia.

La energía creada por Luffy se fusionó con la oscuridad de Teach, creando una esfera que pulsaba con un poder inimaginable. Una mezcla de luz y sombra, de destrucción pura. Juntos, los dos gritaron:

—¡Eclipse Lunar del Rey!

El ataque se disparó hacia el cielo de Marineford, explotando en un estallido de energía que oscureció el cielo y dejó a todos los usuarios de frutas del diablo en el campo de batalla sin la capacidad de usar sus poderes o incluso levantarse. El caos y el terror se apoderaron de la Marina, incapaz de comprender cómo enfrentarse a este nuevo y devastador poder.

Luffy, respirando con calma después de la liberación del ataque, miró a su alrededor y vio que la mayoría de los enemigos estaban indefensos.

—Listo, abuelo. Comencemos —dijo Luffy, con una tranquilidad que solo hacía más escalofriante la situación.