nuevas reinas y la preocupación de una madre

184 12 16
                                    

Días después, Luffy apenas se despertó. No había podido dormir bien por una razón en particular: sus esposas habían querido pasar el rato con él en la habitación adema de que los sintomas de sus embarasos ya se hacian porsentes como el apetito o la fatiga. En el suelo se veía la ropa de cada una, y Luffy había dormido en medio de todas.

De repente, un Den Den Mushi sonó.

—¿Sí? ¿Quién habla? —preguntó Luffy, adormilado.

—Buggy, capitán. Disculpe que lo moleste, pero necesito hablar con usted a solas.

—Ah, está bien. Solo un momento —respondió Luffy, intentando no reírse al pensar en lo que había

Luffy salió de la cama y se dirigió a la cocina. Mientras buscaba algo para desayunar, escuchó la voz de Buggy.

—¿Y bien, qué necesitas, Buggy?

—Capitán, van a ejecutar a un integrante de mi tripulación.

—¿Ah, sí? ¿Y qué pasó con ellos  no vi que vinieron por ti cuando saliste de prisión? —preguntó Luffy, frunciendo el ceño.

—Esos imbéciles me vendieron a la Marina.

—Entonces, ¿por qué quieres rescatar a uno de ellos? —inquirió Luffy, curioso.

—Es alvida, capitán. Ella fue la única que estuvo en contra de eso.

Luffy suspiró y, al abrir sus alas, un círculo de luz apareció sobre su cabeza.

—¿Sabes dónde está? —preguntó.

—Sí, en la prisión G5, cerca de aquí.

—Bien, iremos por ella. Pero después quiero ver tu lealtad, Buggy.

—¿Qué lealtad, capitán? —respondió Buggy, confuso.

—Tal como te traicionaron, quiero que los elimines a todos —declaró Luffy, su mirada decidida.

Buggy tragó saliva y asintió, comprendiendo la gravedad de la situación.

El grupo salió de la cocina y Luffy abrió un portal directo al G5. En ese momento, su madre, Aurora, los vio.

—¿A dónde van? —preguntó, preocupada.

—A salvar a alguien —respondió Luffy.

—Bien, ya que vas al G5, te encargo que rescates también a miquita, por favor.

—¿Miquita? Ah, Miss All valentine.

—Sí, ella misma. Y por favor, no dejes a nadie vivo en esa base.

Luffy asintió, decidido, y cruzó el portal con su grupo, listo para enfrentar lo que sea que les esperaba en el G5.

El dúo pronto llegó a la base G5 de la Marina, donde se llevaría a cabo la ejecución de los piratas del payaso Buggy.

—Bien, Buggy, recuerda: sin misericordia.

—¡Sí, capitán!

Avanzaron por los pasillos de la base, ejecutando a marines y prisioneros por igual. La sangre manchaba cada nivel de la G5, cubriendo pisos y paredes.

Finalmente, llegaron a la celda donde estaban Miquita y Alvida.

—¡Tómalas y vámonos! —ordenó Luffy.

Buggy asintió y rompió las celdas de ambas, mientras Luffy las levantaba y las colocaba sobre sus hombros. Con determinación, continuaron su camino, listos para escapar y dejar atrás el caos que habían creado.

one piece alianza en la oscuridad (remake)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora