El Sentimiento de una Canción

Capítulo D I E C I S E I S

Estoy nerviosa.

Ok, estoy muy nerviosa.

Hoy es la pequeña inducción para los competidores de The Moment Voice sobre el protocolo de dicho programa.

La competencia se llevará a cabo en el teatro de la academia que ha sido mi hogar de estudio musical durante seis años. El lugar fue acondicionado con una gran pantalla al fondo del escenario, ante las butacas que van ascendiendo hasta el fondo del lugar.

Ahora mismo todos estamos tras el escenario, en los vestidores, donde esperamos instrucciones. La competencia aun no tiene fecha de inicio, al menos no de forma pública. Andrea ha venido hace poco para explicarnos a Callum y a mí lo que abordaremos hoy. Solo nos darán indicaciones, nos familiarizarán con el modo interno con el que opera The Moment Voice, todo para lo que nos prepararán, y con lo que nos comprometeremos. También nos harán algunas grabaciones para el video promocional y unas cuantas pruebas. Y, si, de solo pensar en ellos los nervios empiezan a afectar mi pulso.

—No, no. Calma, respira, hermanita —me pide mi hermana.

Ha venido conmigo a modo de apoyo. Por suerte estuvo permitido traer a un acompañante por ser esto un introductorio.

— ¿Crees que de verdad deba hacer esto? —Cuestiono, en un momento de pánico.

—Vamos, Miley. No dejes que una mala pasada de nervios te bloquee. —Coloca ambas manos sobre mis hombros—. Lo pensaste mucho y decidiste estar aquí. Tú puedes con esto. —Me observa en busca de duda—. Aunque si no es lo que de verdad quieres...

—No, no. Tienes razón. —Respiro un poco y le agradezco a Hill por sus palabras—. Quiero estar aquí, estoy nerviosa pero también emocionada por intentarlo —Y lo digo de verdad.

Años de ver este programa y nunca pensé pasar de estar emocionada por los competidores, a ser uno de ellos. Es algo que un intento asimilar. Es una oportunidad única.

Respiro un poco. Proponiéndome canalizar mis pensamientos en cualquier otra cosa, paseo la mirada por el resto de personas en la habitación.

Están los "representantes", por así decirlo, que fueron los encargados de buscar a un potencial artista para postular en la competencia. Se escogieron a dos talentos por representante, que en total son cinco de ellos, así que terminamos siendo diez seleccionados. Cinco chicas, cinco chicos.

En mi recorrido visual por el lugar, mi atención se centra en una chica morena, de cabello rizado bien definido que se amolda en un espectacular afro. Su mirada conecta con la mía y sonríe, acercándose a nosotras.

— ¿También intentas amoldar esto a un mal reality show? —pregunta, con diversión.

— ¿Qué?

—Esto. —Hace un gesto a todo en el lugar—. Más a las personas. Fíjense, ese pelirrojo. —Señala a Callum en uno de los sillones, mira a todos lados mientras una de sus piernas sube y baja sin descanso—. Sería el chico tímido y asustadizo que apenas habla, al cual sus nervios podrían jugar en contra de su talento.

No me deja objetar nada, continuando con su inspección:

—Ese —Señala a un chico castaño, alto, que conversa animadamente con otro participante. Parece darle indicaciones o consejos por la expresión calmada y de superioridad que transmite—. Vendría siendo el carismático que vuelve loca a las chicas y lo sabe, por eso cree que tiene todo a su favor.

»Y, la rubia —Vemos a la chica que mira todo de forma despectiva—, la que cree que todos están por debajo de su nivel y que esto es una pérdida de tiempo porque también cree que esto solo lo gana ella. Ellos tres vendrían siendo los protagonistas destacados en el reality, si esto fuera uno, claro. Lo que es entretenido si te pones a pensar porque cada uno es una historia diferente desde su perspectiva.