Alejo y Sebastián eran novios. Llevaban casi un año de relación, siendo el último verano antes de la universidad cuando las cosas se fueron a la mierda. O más bien, lo peor que Alejo pudo haberle hecho a su pareja. Mientras que Neo no había podido ir al viaje de egresados, en Bariloche.
Se habían peleado unos días antes de la salida, pues Neo había aceptado bailar con un amigo suyo. Sólo eso. Bailar. Él no estaba acostumbrado a los valses ni a las danzas elegantes, por lo que se dejó llevar por este, sin darse cuenta de que su novio se había puesto celoso, apretando el vaso de alcohol lo más fuerte posible, para luego salir del lugar.
Se escondió en donde podía asegurarse de que nadie lo encontraría. Ahí fue donde todo salió mal, pues casi no le gustaban ese tipo de multitudes, donde el centro de atención no era él; y tampoco le gustaba ser ignorado por su novio. Cuando estaba a punto de irse, recibió un mensaje de este, recordándole que le había prometido acompañarlo a su casa.
El camino estaba bastante silencioso, a diferencia de otras veces, cuando iban riendo o fumando juntos. El más bajo miró de reojo a su novio, antes de decirle que sus padres no le habían dado permiso de ir al viaje de egresados, lo que molestó más a Alejo.
—No te enojés, dale, Ysy, no me dejaron mis padres, no es porque no quiera...
—¿Ya no querés pasar tiempo conmigo, verdad? —fue lo último que dijo, antes de dejar al otro en la puerta de su casa. Esa fue la última vez que hablaron, antes de que Alejo se fuera con los demás chicos al viaje.
Entonces Ysy se enredó con otro chico que le presentaron sus amigos. Era rubio y casi siempre estaba alegre. Muy en el fondo, le recordaba a Neo, quien no estaba presente. Al inicio no fue con intención de mantener algo romántico y/o sexual. Empezaron a hablar como si fueran amigos de toda la vida.
El aire era salado y el óxido estaba presente en la puerta cuando todo empezó. Primero fueron caricias más que amistosas, para luego darse un tímido beso, en el que Alejo se olvidó de su pareja. Pasaron varios días en el sol, con Indra deseando escribir su nombre en la espalda del otro, quien gustaba de tumbarse en la arena y disfrutar de los dedos de Bhavi en su espalda.
Pronto los susurros de '¿Estás seguro?' se volvieron habituales entre ellos, mientras eran amparados por la oscuridad de la noche y las cómodas sábanas, en las cuales amanecían enredados. A medida que los días pasaron, se empezó a sentir culpable. Se acostaba con Indra, pero terminaba pensando en su novio; de alguna forma, era el sustituto de Neo, ya que este no había podido ir al viaje. Para él, Bhavi no era más que una cosa de verano. Se veían detrás de alguna tienda, para evitar que los conocidos de Alejos se enteraran del prohibido romance.
—¿Me llamarás cuando regreses? —preguntó el rubio, creyendo que ya lo tenía. No hubo respuesta a su pregunta, lo cual debería hacerle saber lo que estaba a punto de pasar
Y cuando ese verano terminó, Ysy se fue de la vida del rubio, regresaría con su pareja y le pediría perdón por lo forro que fue. Pero alguien le fue con el chisme a su novio, contándole que le había sido infiel, por lo que Neo no quiso verlo cuando regresó. Lo peor de todo, era que se acercaba el cumpleaños del chico. Lo llamó incontables veces, humillándose un poco en el proceso, sin siquiera recibir un texto de ruptura.
En una de esas ocasiones, en las que Ysy paseaba en su patineta, por enfrente de la casa de su todavía novio, aunque ya estaban en los peores términos. En ese momento, apareció un auto, que se detuvo a pocos metros de él. La ventanilla fue bajada, a través de la cual, se asomó un chico de cabello rubio y lentes de lectura.
—¡Ysy!
Aquella voz hizo que se le acelerara el corazón, a la par que casi se le iba el alma del cuerpo, cuando se dio cuenta de quién era. Echó una rápida mirada a la casa de Neo y, sabiendo que se iba a arrepentir, se acercó.
—¿Qué querés?
—Dale, subí.
Apenas subió, un par de labios se estrellaron contra los suyos. No se dio cuenta de que lo estaba correspondiendo, pero cuando lo hizo, se apartó.
—Escuchá, ya no puedo seguir con esto... Tengo pareja.
La sorpresa se hizo presente en Bhavi; él ya sabía que no podía llamarlo suyo, pero nunca se imaginó que era por eso. La sorpresa pronto se transformó en dolor.
—Pero...
—No, pará. Vos fuiste cosa del verano, ¿okay? No confundás las cosas.
Se bajó del auto, sin importarle las lágrimas que empezaron a bajar por las mejillas del otro chico, quien sí lo consideró su amor de verano. Sólo quería enfocarse en pedirle perdón a Neo. No quería que lo dejara, aunque sabía que había hecho las cosas re mal, cagándose en todo lo que habían construido.
Cuando llegó el día del cumpleaños de Neo, sabía que todos sus amigos se iban a juntar, primero en algo tranca con la familia del chico y que, probablemente, más tarde irían a algún boliche para continuar con la fiesta. Sus pasos lo llevaron en automático hacia la puerta, que estaba cerrada, pero se escuchaban con claridad los ruidos del interior.
Entonces se preguntó si Neo lo aceptaría ahora que venía como perro con la cola entre las patas, si lo aceptaría, incluso si lo llegaría a besar frente a todos sus amigos. Su mano se detuvo a punto de tocar el timbre, aún en estado dubitativo ante lo que podía hacer. Finalmente, se decidió y tocó la puerta con fuerza.
Apenas se asomó Neo por la puerta, el otro se lanzó a sus brazos. A Neo le hizo ruido que todo fueran excusas, pero ninguna palabra que le indicara que el otro estuviera rogando por su perdón; sin embargo, se sentía incapaz de decirle que no. Sí, le había engañado, pero aquellos besos y las salidas juntos eran todo lo que necesitaba.
Él, la cura de las cicatrices en su vida, estaba regresando a dibujar las estrellas que había borrado. Se aferró a él, aún sabiendo que no era lo correcto y que más tarde se arrepentiría de eso.
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𝒇𝒍𝒐𝒓𝒊𝒅𝒂!!!
Fanfic𝒇𝒍𝒐𝒓𝒊𝒅𝒂!!! ⛤ trap ships one shots de mis shipps de traperos trolos Contiene: Duki x Paulo Lit Killah x Tiago PZK Trueno x Nicki Khea x Trueno FMK x Rusherking Ysy A x Neo