Beelzebud III (Anónimo)

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Después de un bloqueo de escritor mi socio Anónimo vuelve con un relato, continuación, del emo favorito de Shuumatusu. Por cierto, ya saben que sus comentarios nos encantan, yo se los paso a esta personita y le animan/motivan a seguir escribiendo, apoyennos con uno. Sin más que decir... Disfruten!


Ya habían salido varias veces pero Beelzebub dijo que tenía una sorpresa para ella.

La llevo a lo que parecía un almacén, prácticamente estaba abandonado el lugar y si no loconociera a él y sus costumbres espeluznantes estaría preocupada.

Se estacionó en un lugar oscuro y la condujo a una puerta que apenas vio en la oscuridad,sacó una llave y abrió la puerta para después cerrarla detrás de él, prendió las luces queapenas iluminaban y la condujo por un largo pasillo, al final había otra puerta pero está noestaba cerrada con llave, cuando la abrió pudo ver el interior, era mucho mejor que afuera yhasta podría creer que este lugar no estaba en medio de la nada, la habitación grande ylujosa estaba iluminada por grandes velas encendidas en todas las esquinas, a pesar deque podía ver las lámparas en el techo que seguramente podían iluminar mucho mejor lahabitación, pero estaba bien, está era la manera de Beel de ser romántico, había mesas conbocadillos y una hielera con bebidas frías, la cama en el centro era grande y se veíabastante cómoda, las sábanas de seda roja eran bastante llamativas pero no tanto como elhombre desnudo y encadenado que estaba acostado en el centro, tenía los ojos vendados yla boca tapada con lo que parecían uno de esos artículos de masoquismo que leencantaban a Beel, su cuerpo estaba en forma con curvas suaves y músculos duros, supene estaba flácido entre su piernas pero podía notar que era grande, volteo a mirar a Beelcon la boca abierta, y Beelzebub se mostraba indiferente como si tener a alguiensecuestrado y encadenado fuera su normalidad.

Quizá estaba equivocada, quizá no lo conocía tan bien y si debía preocuparse.

Cómo si repentinamente se diera cuenta que esto era extraño Beelzebub se animó y miro alos dos.

—Ah si, es un amigo, no te preocupes por él— dijo completamente serio—. Es lasorpresa de la que te hablaba.

El hombre encadenado comenzó a moverse y hacer ruidos inentendibles cuando escucho lavoz de Beel, parecia tratar de zafarse de las cadenas pero era tan poco el esfuerzo queponía que probablemente estuvo de acuerdo en todo esto... o estaba drogado.

—Vamos bonita, no quieres hacer esperar a nuestro amigo, o si?— dijo Beelzebub mientrastocaba con el pulgar sus labios, llevo a su amante a los pies de la cama donde hizo que searrodillara entre los muslos del hombre encadenado—. Muéstrale lo que sabes hacer —susurro sensualmente en su oreja.

Con algo de vacilación ella acarició los muslos musculosos del desconocido y tocósuavemente su polla flácida sintiendo como poco a poco el miembro reaccionaba y seendurecía y crecía, tomo la gruesa circunferencia con su mano y escupió en la puntamoviendo de arriba a abajo su mano extendiendo su saliva para lubricar el penesemierecto, pasando el pulgar por el orificio del glande cada vez que llegaba a la puntabulbosa, escupió más saliva cuando dejo de ser suficiente para lubricar la gran polla en sumano, su saliva llegando a escurrir en los testículos, les dió un apretón y comenzó amasajerlos con su otra mano, sintiendo cada unas de las grandes bolas en su manoprestando atención a cada una sintió como se movían y se tensaban los testículos.

El desconocido soltaba gemidos ahogados por el dispositivo en su boca, la salivacomenzaba a salir por las comisuras de sus labios, sus caderas empujaban tratando defollarse en su mano.

Nunca en su vida había tenido tanto control sobre un hombre y tener uno así a su merced laexcitó como nunca antes, su coño se empapaba con cada sonido que hacía el desconocido,froto sus muslos para tratar de conseguir algo de alivio, pero no fue necesario, unas manosgrandes y cálidas se posaron en sus caderas frotando sus costados.

Noches con los Dioses (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora