Feather - Ranma y Ryoga

Capítulo 17

Incluso si muchos deseamos vivir en aquellos momentos que nos dan paz, no siempre es posible. En algún momento nos vemos obligados a volver a la misma rutina de siempre.

Tanto Ranma como Ryoga habían disfrutado de estar juntos en casa, tranquilos, sin nada que hacer y saliendo a pasear para conocer diferentes lugares, solo que ahora tuvieron que regresar al Sensations. 

Su jefe llamó diciendo que quería verlos y, en especial, hablar con la chica.

Obviamente ella ya suponía de que podía tratarse la conversación. Siendo que ya pasó más de un mes desde aquel día.

Ranma no sabía qué era aquella sensación extraña que se formaba como un nudo en su garganta y bajaba hasta la boca del estómago. Se sentía enferma de tan solo pararse frente al local.

Incluso Ryoga se veía más pálido de lo normal, entonces decidió agarrar la mano del chico como si quisiera darle apoyo. Él pareció entender su intención así que dió un leve apretón para jalarla adentro.

Al entrar, un ambiente extraño los recibió. Había caras nuevas y en definitiva hubo una gran remodelación del lugar. Mesas diferentes, otro tipo de suelo, color de paredes cambiadas. En fin, era demasiado por enumerar.

Era de esperarse que las cosas cambiaran, la mayoría de objetos se rompieron durante la pelea y era mejor realizar un cambio completo a que reemplazar algunas cosas.

—Voy a hablar con el señor Baek. —murmuró mientras seguía escaneando la zona. ¿Seguirán sus cosas ahí?

¿Seguirán las cosas de Kiyoko en su habitación?

—Tranquila. —Ryoga masajeó sus hombros con levedad notando los nervios que la chica quería ocultar. —Te espero aquí 

Ranma asintió antes de desaparecer de su campo de vista e ir directamente a, donde recordaba, era la oficina de su jefe.

El chico por otra parte, camino hacia la puerta del lugar, la mayor parte del tiempo sabía pasar ahí conversando con algunos de sus compañeros. Sabía que la mayoría habían muerto en el tiroteo defendiendo a los demás y… era extraño regresar.

—¡Hola! —Una voz a su espalda lo sobresaltó, haciendo que se gire de golpe. —¿Eres nuevo?

—No, no tanto. —respondió algo cauteloso.

Frente a él, estaba una chica casi de su mismo tamaño, cabello azul que le llegaba más abajo de la cadera y ojos de color oscuro. Tenía una gran sonrisa en sus labios. ¿Tal vez de unos 20 años?

—Oh, es la primera vez que te veo aquí. —comentó casual. —Me llamó Haruka Kobayashi, es un gusto conocerte.

—Igualmente, soy Ryoga Hibiki. —correspondió el saludo con un movimiento de su cabeza. —Tú si eres nueva ¿verdad?

—Si, el señor Baek me contrató hace dos semanas. Necesitaba el trabajo de manera urgente. —comentó bajando la mirada al suelo por un instante para decir: —También me contó que hubo un incidente tiempo atrás por lo que era necesario que me presente a todos nuestros compañeros.

—Oh, claro, puedo entender el porqué. —La chica era bastante agradable, su personalidad era de alguien extrovertido, pero su color de cabello le incomodaba un poco. Le recordaba a alguien.

—En fin, perdona si sueno entrometida. No es mi intención. —Empezó a juguetear con uno de los mechones de su cabello, enredando y desenredándolo de su dedo. —¿La chica con la que entraste es tu novia?

¿Escuchó bien? Dijo…

¿Novia?

…

Ranma se encontraba sentada frente a su jefe, algo desconcertada por lo que acababa de oír.