|𝐗𝐈𝐈|

137 13 137
                                    

|𝟏𝟐|𝐆𝐨𝐨𝐝 𝐎𝐥𝐝-𝐅𝐚𝐬𝐡𝐢𝐨𝐧𝐞𝐝 𝐋𝐨𝐯𝐞𝐫 𝐁𝐨𝐲𝐐𝐮𝐞𝐞𝐧

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

|𝟏𝟐|
𝐆𝐨𝐨𝐝 𝐎𝐥𝐝-𝐅𝐚𝐬𝐡𝐢𝐨𝐧𝐞𝐝 𝐋𝐨𝐯𝐞𝐫 𝐁𝐨𝐲
𝐐𝐮𝐞𝐞𝐧

Dedicado a: Miyinix_, ticxif, Spreena___ & Azul.

— ¡EL CIELO SE CAEEEEEE! — Gritó Stuart en cuanto llegamos al estacionamiento del restaurante.

— ¿Referencia a Chiken Little? — Sonreí al recordar esa película, uff, tremendo peliculón, la amé con mi vida.

— Esa película me hizo llorar. — Iba a soltar un sollozo, porque puso su cara tan conocida de pura y dura depresión, pero le tapé la boca y me frunció el ceño. — Mmmakwjq mamakijmi.

— Poético. — Me alejé y comencé a acomodar mi ropa mientras me veía en el pequeño espejo frente a mí, de esos que se me olvidó el nombre. — ¿Crees que me veo bien así, Stu?

— No sé cómo responder a eso sin parecer gay.

— ¡Bueno! Solo contéstame y yo haré como que no pareces gay. — Me reí y me miró feo, de nuevo.

— Pues pareces extremadmente gay. ¡Más gay que las primeras diez filas en un concierto de Lady Gaga!, diría mi hermosa novia. — Cerró sus ojos, colocó sus manos sobre sus propios pómulos y articuló una sonrisa boba de colegiala enamorada.

— Ay, que asquito. — Murmuré.

Se ofendió. — ¡Ni te quejes que así vas a estar con Paul!

— ¡CLARO QUE NOOOOOOO! Yo así voy a estar únicamente con mis gatos, cuando tenga 117 años y tenga miles de gatitos viviendo conmigo. Acabo de perder la fé en la humanidad porque ví un Tik Tok de gente siendo humillada por otros. — Soltó una risita y yo le seguí, pero fui detenido por mi propio instinto, al recordar algo que debía de contarle a Stu. — Stuart, hice algo...

— ¡AY NO! ¡¿QUÉ LE DIJISTE A PAUL AHORA?! — Decir que me sorprendió que solo tomase un segundo para atinarle a lo que le estaba a punto de decirle, fue poco.

— Pues... Es que le mandé mensaje porque... — Murmuré, intentando buscar palabras que no me hicieran quedar como un drogadicto sin dignidad y más rogón que no sé.

— ¡LE PEDISTE QUE SE VEAN!

— ¡CÁLLATE Y DÉJAME HABLAR! ¿Y CÓMO SABES? ¿REVISASTE MI CELULAR, VERDAD? — Fruncí el ceño.

— Es que se nota mucho, John. — Contestó. — Bueno, ya. ¿Qué te contestó?

— Me dejó en visto.

Comenzó a reír como un loco drogadicto y desquiciado. — ¡Ay, John. No tienes remedio!

— Me haces sentir que soy un rarito cada que dices eso.

𝐄𝐍𝐄𝐌𝐈𝐄𝐒 | 𝘔𝘤𝘓𝘦𝘯𝘯𝘰𝘯Donde viven las historias. Descúbrelo ahora