Painting of love ★[Haely]★

-Día despues-

El sol de la mañana acariciaba suavemente el rostro de Lily cuando abrió los ojos. Todavía podía sentir el suave cosquilleo de los labios de Haewon sobre los suyos, la calidez de su toque. Habían pasado la noche juntas, no en un sentido físico, sino emocional, compartiendo secretos y risas, dejando que sus corazones se acercaran más y más con cada palabra.

Al recordar lo sucedido la noche anterior, una suave sonrisa se dibujó en su rostro. Haewon había sido clara, no quería apresurarse, pero también quería estar cerca de ella, sentir que podían caminar juntas sin miedo. Y ahora, mientras el día comenzaba, Lily sabía que todavía quedaban cosas por descubrir, por resolver.

Justo en ese momento, su teléfono vibró. Era un mensaje de Haewon.

"Buenos días, Lily. ¿Te gustaría pasar el día conmigo?"

9:05.

Lily no pudo evitar sentir una mezcla de nervios y entusiasmo. Quería pasar más tiempo con Haewon, pero también temía lo que pudiera suceder. Aun así, no podía decir que no.

"Me encantaría."

9:07.

A las 10:00, se encontraron en la misma plaza donde habían hablado la noche anterior. El sol brillaba con fuerza, bañando la ciudad con una luz cálida que contrastaba con la ligera brisa que movía las hojas de los árboles. Haewon estaba esperándola, con una sonrisa nerviosa pero genuina. No había flores esta vez, solo la promesa de una nueva oportunidad.

—Hola —dijo Lily, sintiendo que su corazón aceleraba al ver a Haewon tan cerca.

—Hola —respondió Haewon, dándole un rápido abrazo que, aunque breve, dejó una extraña tensión en el aire, como si ambas fueran conscientes de algo que no se habían atrevido a nombrar del todo.

—¿Dónde quieres ir? —preguntó Lily, rompiendo el momento.

—Pensé que podríamos caminar, ver qué encontramos. Solo... pasar el día juntas.

La propuesta era simple, pero la forma en que Haewon la miró, con una mezcla de timidez y deseo, hizo que Lily sintiera mariposas en el estómago. Asintió, sin decir nada más, y ambas comenzaron a caminar, sus pasos sincronizados.

Mientras recorrían las calles, hablaron de todo y de nada. Haewon le contaba historias de su infancia, de su familia, de los miedos que había enfrentado y de los sueños que alguna vez había dejado de lado. Lily escuchaba atentamente, sintiendo que cada palabra acercaba más sus mundos.

—¿Sabes? Nunca pensé que alguien como tú podría importarme tanto. —dijo Haewon en un momento, con la voz baja, como si temiera romper algo frágil entre ellas.

Lily se detuvo, sus ojos buscando los de Haewon.

—¿Alguien como yo? —preguntó, con una sonrisa juguetona en sus labios.

Haewon rió suavemente.

—Sí, alguien tan dulce, pero también tan fuerte. Es como si pudieras ver a través de mí y saber exactamente lo que pienso. Me asusta un poco.

La confesión dejó a Lily sin palabras por un momento. Sentía lo mismo, esa conexión inexplicable que la hacía vulnerable y al mismo tiempo, la llenaba de un calor que no podía ignorar.

Siguieron caminando, y eventualmente, llegaron a un pequeño parque escondido entre los edificios. Las risas de niños jugando y el sonido de las hojas mecidas por el viento creaban un ambiente relajante. Se sentaron en una banca, sin dejar de mirarse. La conversación fue disminuyendo hasta que el silencio se instaló entre ellas, pero no era incómodo, más bien se sentía cómodo.

-Lily... —dijo Haewon mirándola.

—Dime, Haewon. - dijo lily mirandola a los ojos mientras sentía como Lily agarraba sus manos.

—¿Me permites besarte, Lily? - dijo Haewon colocando un mechon de pelo detrás de la oreja de Lily.

—Si, bonita. - hablo Lily besándola, apoyo su mano en la mejilla de Haewon intensificando el beso. Haewon la agarró por la cintura para acercarla más. Lily se separo y beso el cuello de Haewon haciendo que se le escape un pequeño jadeo.

—Que linda. - dijo Lily viendo a una Haewon sonrojada.

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