Solo Por Ti

°Intenciones sinceras°

Narra Rodrygo:

La gélida brisa golpeaba mi piel, mis piernas daban largas zancadas por el extenso pasillo que conectaba con la oficina de Luana. La encontré sentada en su escritorio, parecía estar esperandome.

-Buenos dias- Saludo con una sonrisa maliciosa.

-Nada de buenos días, Luana- Dije estallando mi ira. -Pamella dijo que si firmaba esa acta no le haría daño- Protesté y ella se incorporó.

-Tu lo has dicho, Pamella no le haría daño pero yo si- Hablo con determinación, como si sintiera orgullo sobre lo que estaba haciendo.

-Haber, haber, haber... Han dicho que no le harían nada y ahora quieres forzarla a renunciar?- Escupí y su cara se convirtió en una seña de cabreado pura.

-Fuistes a verla? No creo que a Pamella le guste esa noticia?- Hablo con advertencia mientras jugaba con su teléfono entre sus manos.

-Ja!, si crees que puedes amenazarme con mi Querida y amada esposa, estás muy equivocada- Ladre con dichas palabras quemandome la lengua.

-Has lo que quieras, igualmente Leah será expulsada de aqui- Dijo antes de volver a sentarse en su escritorio. -Ah, y antes de irte, deseale lindas vacaciones a tu queridísima Leah- Dijo con una sonrisa torcida.

-Vete al carajo, Luana- Hablé antes de girarme en mis talones para largarme de allí.

(...)

Cruce cuidadosamente mi camioneta para entrar en la calle donde estaba mi casa. Y la de Leah.

<<<<Que maravilla>>>> Exclamó con ironía mi consciencia.

El auto de Vini está parqueado en el garaje descubierto de la casa de Leah.

Un leve pinchazo se asentó en mis sienes, mi sangre fluía con rapidez desde mis talones hasta mis oídos, mi mandíbula tensa, y como si fuera poco mi ansiedad haciendome añicos. Quise correr hasta donde estaba Leah para asegurarme que los inventos de mi ansiedad no era ciertos.

<<<<Ella tiene derecho a rehacer su vida, ya estás casado>>>> Intervino mi consciencia.

Golpeé el volante de mi camioneta cayendo en cuenta nueva sobre mi. ¿Era tan obvio? Me quedé estacionado del otro lado de la acera justo al frente de su casa.

Seguí mirando hacia su casa como si tuviera Rayos x, como si quisiera perforar las paredes. Estuve ahí pensando unos minutos, en si entrar y ver qué mierda estaban haciendo o seguir con mi vida sin interes en ella.

<<<<De por medio está tu amistad con Vini, yo que tú no lo hago>>>> Sugirió mi consciencia, una vez mas entrometiéndose.

(...)

Toc. Toc.

Los pasos más cercanos a la puerta. Me debatí si jugar a "Toca y corre" o seguir con mi plan inicial. El auto de Vini ya no estaba, era el momento indicado para hablar con ella.

-Si? Que dese- Abrió Camille para luego caer en cuenta de mi presencia-Tu...Tu!...ni loco entras- Intento cerrar la puerta pero tuve reflejos y pude detenerle.

-Solo vengo a hablar con Leah- Confesé y ella siguió empujando contra mi.

-Ya te dije que no!- Empujó con más fuerza.

Tuve que acabar con ese forcejeo de una vez por todas. Empuje con todas mis fuerzas mientras los pies de Camille se deslizaban por el suelo sin ningún obstáculo.

-Que quieres hablar con ella?- Se detuvo en frente de mi con los brazos cruzados. Daba más miedo que mi mamá.

-No te incumbe- Hable con ironía.